Me Enamoré Dé Una Influerce

capítulo 30

Narra Alba

Aída me abrazo y desearía que ese abrazo no terminará nunca, comenzó a llover y Aída no paraba de pedirme perdón y de llorar me partía el corazón verla así quería abrazarla y besarla, pero recuerdo su infidelidad y eso me detiene, le di un golpe a la pared y mis nudillos empezaron a sangrar solo me tire al suelo a llorar sin importarme la lluvia

Lo único que hice fue levantarme e irme de ahí, salí en busca del chofer (Juan) con el que me llevo muy bien al verme se acerca a mi con un paraguas y me dice

Juan: Alba ¿Estás bien?

Alba: Vámonos de aquí por favor
-dije con lágrimas en los ojos y escurriendo el agua por todo mi cuerpo, me subo al auto y asomó por la ventana y veo a Aída caminando sola y mojándose, me baje del auto la tomo del hombro y le digo

Alba: sube te llevaré a casa
-dije mie tras la sujetada del brazo haciendo que suba al auto sin dejar que conteste, noto que Aida tiene frío le doy una chaqueta que había dejado en el auto y le digo a Juan

Alba: Juan ore de la calefacción por favor
-dije mientras le ponía la chaqueta a Aida

Aida: gracias mi amor
-dijo mientras me sonreía

No le conteste y nos quedamos e  silencio todo el camino, empiezo a estornudar y Aida me dice

Aida: bebé te vas a enfermar
-dice tratando de ponerme la chaqueta

Alba: estoy bien, quédate la tú
  -dije mientras me quitaba la chaqueta y se la ponía a ella, llegamos a su casa y me baje con Aida

Tocamos la puerta y abre Ana al verme dice

Ana: hija que bueno que regresas te y nos viene a visitar
-dijo mientras me daba un cálido abrazo

Alba: si Ana ustedes también son mi familia
-dije mientras entraba a la casa me dirijo hacia el Salón y agua estaba Alex con Salvador al verme Alex se para rápidamente me abraza y me dice

Alex: princesa te extrañe mucho

Dice abrazándome

Alba: yo igual hermano

Salvador: que bueno que ya estas aquí Alba, aunque ya no estés con nuestra hija nosotros seguimos siendo tu familia
-dice mientras me toca el hombro

Ana: suban a cambiarse para que no se enfermen

Alba: yo ya me tengo que ir

Aida: por favor quédate
-dice mientras trata de tocarme

Alba: no gracias luego nos vemos
-me despido de todos menos de Aida

El chofer me lleva a mi departamento me doy una ducha, me cambio y me siento en el sofa, estoy pensando si de verdad debería de hablar con Aida, estoy en mis pensamientos y escucho que tocan el timbre voy abrir la puerta y es Bruna al verme me abraza y me dice

Bruna: te extrañe mucho Albin
-dijo mientras me abrazaba

Alba: yo igual brasileña

Nos sentamos en el sofa y Bruna me dice

Bruna: Albin ¿ya hablaste con Aida?

Alba: no aún no, nos encontramos hace rato
-le empece a platicar de mi encuentro con Aida y me dice

Bruna: ella a hecho todo para poder hablar contigo amiga

Alba: tu que crees que debi hacer

Bruna: deberías perdonarla amiga, yo se que aún la amas t ella igual a ti, todos cometemos errores unos más que otros, pero estoy segura que Aida te ama
  -Bruna tiene razón al igual que todos los que me lo han dicho, debo hablar con Aida y solucionar todo mi orgullo no me llevará a nada bueno