[2019]

278 20 8
                                    

Él sabia perfectamente el día que era, porque lo había vivido varias veces antes en la escuela media, todos los 11 de Noviembre no faltaba el listillo que creia que llevando una caja de pockys y retando a jugar a la chica que le gustaba se volverían novios, eso no funciona así, por lo menos no para el masculino Kirishima Eijiro, varias veces sus compañeros le habían insistido en jugar, hasta recordaba que había sido retado por un par de sus compañeras, pero año tras año se negaba a hacerlo, no le veía el sentido de poner de excusa un palillo de dulce para besar a alguien, no era para nada masculino, si te gusta alguien se lo dices directo y listo. Aquello es lo que había sucedido con su actual pareja; él había tomado las agallas de declararse a Bakugo Katsuki y para su suerte ahora eran pareja. Los tres mejores meses de su vida había vivido al lado de su amado rubio y aunque este no lo demostrará demasiado, sabia que el sentimiento era mutuo.

9 de Noviembre por la noche le había llegado un mensaje de su mejor amiga Mina Ashido, que le había mandado una foto, era una caja de pockys de fresa, él le mandó un audio preguntándole qué estaba insinuando, su respuesta fue obvia:

—Es para que lo uses con Bakugo, te hice el favor de comprarlo para ti —fue lo que le respondió, dió un salto en su cama, para después pasarse la mano por el rostro, pensando—.

No podía hacer aquello con su pareja, por obvias razones, comenzando con que Bakugo no accedería y quedaría en ridículo, no quería pasar por aquella humillación. Aparte, ¿Era digno de hacer aquel acto romántico con su novio? Osea, si por él fuera, se casaba ahí y ahora con el contrario, vivía resignado a la idea de que aquello nunca pasaría, pero era bueno soñando que si.

—Lo siento Mina, ¿Por qué no mejor se lo regalas a Kaminari? Le servirá con Sero... —respondió desanimado—.

La pelirosa lo dejó en visto, pensaba que se había enojado con él, pero al escuchar fuertes pasos viniendo desde el ascensor hasta su puerta le advirtió que aquella chica abriría a la puerta gritando:

—¡Kirishima Eijiro! —como predijo, abrió la puerta de una patada— ¡No te he preguntado si quieres o no, se los vas a dar! —ingresó a su cuarto, cerró la puerta y como si fuera su cuarto, se sentó a en su cama, cerca de él— ¿Qué te hace dudar, Kiri? Osea, sé que es Bakugo de quien hablamos, pero vamos, te ama y todos los sabemos, no se va a negar —una sonrisa de las que solo ella sabe darle le regaló, poniendo su mano en su pierna más cercana, dandole apoyo, animo y hasta autoestima— Y si se niega, me encargaré de derretirlo jaja 

—No creo que aquello se necesario, Mina...

El 11/11 del año había llegado y con eso todas las preocupaciones del nuestro joven Kirishima Eijiro, estaba preparado para recibir un "No me jodas" por parte de Bakugo, pero su miedo era terminar siendo etiquetado de infantil o alguna cosa por el...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El 11/11 del año había llegado y con eso todas las preocupaciones del nuestro joven Kirishima Eijiro, estaba preparado para recibir un "No me jodas" por parte de Bakugo, pero su miedo era terminar siendo etiquetado de infantil o alguna cosa por el estilo que se pudiera ocurrir a su pareja.

Mina estaría más atenta a cualquiera cosa que pasara, con ayuda especial de sus otros dos amigos que conformaban la autodenominada "Bakusquad" ubicaron a su pareja, que estaba entrenando afuera, sabía que eso solía hacer por las mañanas de los fines de semana, le gustaba verlo entrenar, y cuando ya sabía que necesitaba algo que golpear o usar sus explosiones, iba y lo ayudaba, le gustaba pasar sus mañanas así.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 21, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Pocky's Day'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora