diary

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Desde que tenían uso de consciencia, Frank y Gerard eran mejores amigos. Se conocían por que sus madres eran muy amigas, por lo que los inscribieron juntos en la misma escuela y eran vecinos. Tan fuerte era su amistad que incluso se iban junto a sus familias de vacaciones

En la escuela ambos eran muy conocidos debido a cómo se mostraban. Frank se mostraba como un chico rudo y sarcástico mientras que Gerard como un chico dulce y tímido. Cuando la verdad es que ellos no eran así, es más era al revés, Frank era el chico dulce y tímido y Gerard el rudo y sarcástico, pero solo se mostraban así cuando estaban solos. A menudo solían hacer dramas en la escuela para ganar más popularidad ya que disfrutaban ver como gente se impresionaba con tales tonterías tan fácilmente.

Gerard y Frank sabían todo de ellos mismos, se contaban todo pero había un pequeño secreto que se ocultaban por el mismo miedo; Ambos tenían un crush en el otro pero tenían miedo a perder la amistad. Por lo cual ninguno daba un paso adelante.

Gerard se tomaba realmente enserio sus sentimientos hacia Frank y aunque para el era estúpido y aniñado, escribía un diario con sus sentimientos hacia Frank. Lo llevaba siempre con el para escribir si pasaba algo.

Sábado 20:30 pm

Gerard notó que llegaba tarde a la casa de Frank (Aunque vivía al lado de él). Tomó una mochila con unas mantas, snacks, algunos juegos de mesa, unas pantuflas, por supuesto su diario y su teléfono. Una vez que estuvo listo salió con su pijama de esqueleto y tocó el timbre de la casa de Frank. Este al abrirle le miro con un puchero

-Llegas tarde 5 minutos-Dijo con un puchero y jugando con su pijama de dinosaurio

Gerard rodó sus ojos

-Frank vamos, solo son 5 minutos pequeño, no te pongas así-Dijo cruzando sus brazos y soltando un quejido

Frank empezó a reír y tiró del brazo a Gerard para entrar. Gerard vió a la madre de Frank y la saludó con una sonrisa nerviosa ya que Frank lo tiraba para subir hasta su habitación

Al entrar, Gerard se acostó en el suelo y Frank tomó su mochila para sacar las cosas, luego de eso Gerard tiró su mochila a una esquina, no notando que estaba abierta.

Esa noche fue increíble, se divirtieron mucho y la pasaron muy bien. Todos los sábados hacían pijamadas, jugaban juegos de mesa, videojuegos, hacían karaoke y comían pizza que la madre de Frank hacía. Muchas veces se quedaban viendo series hasta las 3 am hasta que decidían dormir

Domingo 12:45 pm

Gerard despertó y vio a Frank ya despierto

-Al fin despiertas, bella durmiente-Dijo Frank soltando risitas

Gerard tomó una almohada y se la tiró a Frank

-No me llames así, enano-Dijo Riendo

Ambos se quedaron jugando a una guerra de almohadas hasta que llegó tocando la puerta la madre de Frank

-Chicos, no quiero interrumpirlos pero la madre de Gerard ya llegó-Dijo la señora Iero con una sonrisa

Ambos se miraron tristes y Gerard tomó su mochila y guardó sus cosas para luego despedirse de Frank con un abrazo y salir de casa.

Cuando habían pasado unas horas, Frank estaba ordenando su cuarto y encontró un diario que por supuesto no era de él.

-Eh? Que es esto?-Se preguntó confundido y empezó a leerlo

——
Lunes, 8:35 pm

Gerard estaba entrando en pánico.

No podía encontrar su diario, no recordaba donde lo había dejado por última vez y estaba asustado.

Espero que por lo menos esté en mi casillero

Pensó Gerard y salió con su mochila para irse caminando a la escuela. No vio a Frank así que supuso que el ya había llegado ya que Frank iba bastante tarde a clases

Al llegar allí miró a Frank y este solo lo saludo tontamente y Gerard rio bajito para luego concentrarse en la clase

El resto del día siguió normal hasta el almuerzo. Cuando había llegado la hora del almuerzo Frank y Gerard salieron con sus bolsos

-Frank, voy al baño, ¿Podrías esperarme?-Preguntó con una sonrisa adorable

Frank lo miró y suspiró

-Ve, yo te espero en la cafetería

Gerard asintió y fue al baño tranquilamente. Cuando volvió vio que todos lo miraban, no entendía por que

-Oh Gerard, aquí estás-Dijo Frank en un tono lo suficientemente alto para que todos allí lo escucharan

¿Que está pasando? Yo y Frank no hemos planeado nada

Gerard estaba confundido pero se quedó ahí observando

-Escuchen todos esto-Dijo Frank levantándose de la mesa intentando obtener la atención de todos-Gerard, dejaste tu diario en mi casa

Gerard empezó a respirar agitadamente. Estaba maldiciéndose a si mismo por dejar su diario en casa de Frank

-Leí todas las páginas-Dijo tomando el diario y hojeándolo-¿Realmente me amas?-Pregunto con una sonrisa orgullo

Un fuerte "oh" se escucho de parte de todos

Gerard suspiró

No debería hacer esto, yo y Frank siempre pretendemos ser otras personas pero no puedo soportarlo más y no me importa si a él no le gusta esto

Después de tomar confianza Gerard dejo sus cosas en el piso y camino rápidamente hacia Frank

-Entonces?-Frank iba a seguir hablando pero algo inesperado lo interrumpió

Gerard lo acercó a él y empezó a besarlo sin miedo, se sintió orgulloso al saber que Frank correspondía. Estuvieron así hasta que necesitaron respirar

Frank estaba sonrojado fuertemente y de brazos cruzados, aún intentando parecer rudo

-Gerard eres un idiota-Dijo tratando de lucir enfadado

Gerard asintió y cuando Frank dejo de hablar, le guiñó el ojo a Frank

Frank hizo un sonido extraño y luego un soltó un quejido

Gerard tomó sus cosas y salió de la cafetería, decidido a comer en su salón. Cuando entró, junto dos mesas y puso dos sillas, se sentó y cuando empezó a comer entró Frank

-G-gee, yo-Dijo avergonzado

-No importa idiota, siéntate-Dijo riendo despreocupado

Frank confundido se sentó

-No estoy enojado contigo, de hecho, estoy feliz de que hayas hecho esto

-¿Por qué? Casi te humillo frente a todo el instituto

-Frank idiota, me gustas demasiado. Solo tengo miedo de arruinar esta amistad

Frank se sonrojo y soltó risitas

-T-tú también me gustas-Dijo tímidamente

-Lo sé idiota, me correspondiste

Cuando terminaron de comer siguieron hablando y dándose cariños pero cuando la clase empezó, Gerard fingió ser dulce y Frank ser rudo.

Las clases terminaron y ambos fueron caminando a sus casas.

-Frank-Dijo Gerard llamándolo

-Sí?

-Lo de la cafetería, no fue una actuación

Frank sonrió y pensó

Gerard debería dejar su diario en mi casa más seguido

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