30 𝓓𝓪𝔂𝓼 𝓸𝓯 𝓞𝓽𝓹 𝓢𝓱𝓲𝓹 𝓨𝓪𝓸𝓲

Dia17 En La Ducha

¿Que es lo que mas uno puede llegar a desear de una persona? Para Saga tan solo quería verlo en su total desnudez, como los dioses lo trajeron al mundo.. Para Saga era un deseo que, jamás, en su caso podría cumplir pues la persona que deseaba ver desnuda en su cama se trataba del Santo que no se llevaba tan bien..

Shura de Capricornio, el hombre que mandó a matar a su mejor amigo mucho antes de haber sentido esa atracción por el mencionado, para el de cabellos azules/violáceos era difícil, después de todo habían regresado a la vida.. Todos se perdonaron, celebraron y disfrutaron de su nueva vida..pero Saga estaba incorforme desde que resucitó y eso era por la relación que mantenía con el ajeno, lo quería en su totalidad lo que, sin duda uno que otro se daba cuenta de lo que estaba pasando.

Lo deseaba, como si se tratara de un niño rogando por un dulce, solo quería pasar un momento con el azabache ¿Acaso nadie lo ayudaría? ¿Cuanto más tenía que soportar para que Shura acceda a sus deseos?

- ¡Saga! - Habló su diosa, a la que anteriormente quería asesinar por los pensamientos de su contraparte, estaba ahí parada en frente de él preocupada. - has estado distraído todo este tiempo.. Debes tomarte un descanso, ve a la mansión, no puedo permitir que se esfuercen más de la cuenta, anda Saga, ve-

-.. Esta bien, perdón las preocupaciones ... - no se opuso, le debía mucho por los daños causados, por ello se fue a Géminis y arreglo una maleta, quizás para unos días, como Athena le había "ordenado" y partió hacia la mansión Kido, la joven de cabellos lilas tenía razón, estaba distraído y eso le perjudicaba, esta vez se concentraría en sí.. Sin embargo quién pensaría que al llegar sintiera una presencia conocida, una vez dentro observó cada detalle, las decoraciones, los muebles, las habitaciones, etcétera..

Se encontraba observando el segundo piso en cuanto notó el sonido de una ducha "seguramente se le olvidó cerrarla" pensó dirigiéndose al lugar, una vez llegado se le olvidó por completo todo lo demás.... Su deseo, su mayor deseo estaba ocurriendo sin que pasará por su cuenta, el cuerpo desnudo cubriéndose con la compañia del agua que invadía a aquel hombre.

- Mgh ~ ... -Jadeo en bajo, su cuerpo se estaba calentando, Saga era un pecador por pensar de esa manera, de una manera lasciva y lujuriosa del ajeno. Se acercó, estaba dispuesto a ir, era como si el cuerpo de Shura también quisiera eso, lo llamaba. Esos eran los pensamientos de el de cabellos azulados/violáceos. Claro se desnudo, quería hacerle compañia al solitario, pero se detuvo. Lo anhelaba, pero no podía alcanzarlo, ¿Podria tener el cuerpo que tanto deseaba? No podía..pero ya estaba sin su ropa ¿Como le explicaría esto? Su única salida era irse o quedarse. No le quería perturbar más se dió la vuelta avergonzado de sí mismo por su actitud en cuanto le escuchó.

- Ah~- Era un gemido, no era ni de dolor ni de placer, un gemido gentil, como sí lo invitara a pasar, el ajeno lo notó. No había vuelta atrás, ya estaba echó lo que pasaría, por lo que se acercó, con sigilo algo apurado entró en donde se encontraba el azabache, trago saliva en cuanto le vió de espaldas, enseguida guió su vista al trasero del contrario, su entrepierna estaba erectandose más en cuanto embistió a capricornio sin ningún problema. Shura había jadeado sorprendido, quizás por lo causado, pero Saga tan solo sonrió con picardia. Y así comenzó,sin importar quién estuviera más en la mansión , a complacerse tanto a él mismo como a Shura, tomó el miembro del mas bajo y comenzó a estimularlo mientras le penetraba.

Saga podía escuchar una y otra vez los gemidos llenos de placer de Shura,también podía escuchar el ambiente en esos momentos, el agua, la conexión o choques entre ambos cuerpos, unos sonidos gloriosos.

— Saga~!... — habló capricornio llamando la atención del mencionado,su rostro estaba ruborizado,mostraba como su boca estaba invadida por los gemidos, pero aún así quería hablar con él.

— Perdóname Shura, pronto terminaré esto~— le susurró acercando su rostro para darle un beso, por supuesto el azabache había dudado, pero aceptó aquel lascivo beso apasionado. Era como si realmente buscara al geminiano.

— Más.... — Mientras se besaban habló capricornio— Mgh.. Quiero.. Quiero seguir~.. —con dificultad habló, pero logró compartir algunas palabras con el ajeno, Saga le escuchó. Sonrió y aumento su fuerza en cada embestida,esta vez no paraba, el sonido de ambos cuerpos chocando entre sí aumentaba, Saga aprovechó de nalguear al ajeno, de vez en cuando incluso apretaba el trasero ajeno con fuerza,lo hacía sin parar. A pesar de ello, Shura no le dijo nada, tan solo seguía sintiendo aquellas acciones del geminiano que tan solo pensaba en aquellos momentos.

Las piernas de Shura temblaban cada vez más,el de cabellera azul/violáceo lo notó, por lo que le sostuvo de las caderas. No aguantaba más, quería correrse dentro del hispano. Los jadeos del geminiano hacían notar el momento, el azabache no dijo nada también estaba en su límite por lo que, después de unas embestidas más,finalmente Saga liberó su semilla dentro del ajeno, como deseaba mordiendo la nuca de Shura para aferrarse y por supuesto,el azabache también manchando con su semilla la ducha de la mansión Kido.

Ambos quedaron con una respiración dificultosa,Saga aún sostenía de Shura y este se aferraba a las llaves de la ducha dejando caer el agua. No dijeron ni una sola palabra más, esperaron a calmarse y finalmente el griego habló.

— Shura, perdón por esto.. Me.. Me descontrole yo de verdad lo lam— no terminó de hablar, fue interrumpido por el beso deseoso del capricorniano.  Por supuesto eso le hizo entender casi a la perfección la intención del ajeno. De cualquier manera no tan solo lo dejaría así por lo que sin dejar descansar comenzó a hacer de Shura suyo nuevamente.

Sin embargo no notaron que había llegado una presencia bastante conocida. Asi mismo Saori la diosa que protegían había llegado para ver si estaban cómodos con quedarse en su querido hogar. Vió por todas partes en busqueda de Saga y Shura, ella también había invitado a "rejalarse" en la mansión Kido, por lo que se extraño que la maleta de Saga estuviera en la entrada.. ¿Le habrá pasado algo? Se preguntaba escuchando sonidos desde el segundo piso de su hogar cosa que, por supuesto debía investigar.. Jamás se habría pensado una escena tan vergonzosa para ella, ambos caballeros en la ducha teniendo sexo como si fueran los únicos que importaban. Saori se quedó totalmente colorada por lo que rápidamente se retiró a la planta baja de su hogar. Sin duda Saga y Shura se llevarían bien en cuestión de días.