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11. Colores

Quiero pedirles una disculpa por no actualizar, pero me he tomado un tiempo de fuera de redes sociales, ya que en serio necesitaba un espacio para mi solamente, alejada de todo. Además he tenido algunos problemas en mi familia. Y bueno, ya he regresado y ahora si me tendrán que soportar, porque las haré sufrir *risas perversas*
Ok, no es cierto, pero trataré de actualizar más seguido, gracias por seguir aquí. Lxs amo mucho.

¡Disfruten la lectura!

***

Era la hora de irse, su vuelo saldría en un par de horas y tenía que estar a tiempo en el aeropuerto, Emma y Lottie iban con él, la pequeña habia insistido demasiado en acompañarlo, quería estar cerca de él, se sentía segura estando con Louis, a pesar de que sus ahora tías eran muy lindas, ella siempre prefería estar con su nuevo papá.
A pesar de que había llorado para que la llevara con él, al final había aceptado quedarse, con la condición que volvería muy pronto o ella iría con él.
Louis había puesto a trabajar a su equipo, quería que Emma fuera su hija lo más rápido posible, quería llevarla a dónde él iba, y convivir con ella, conocerla, y darle ese amor que ambos necesitaban, no había pasado tanto tiempo, y su gente se estaba moviendo rápido, incluso Liam estaba muy atento a todo, no había visto a su ahora novio por estar ayudándolo, pero Zayn sabía que Liam jamás dejaba solo a uno de sus mejores amigos.

— ¿Volverás pronto? — Louis estaba de rodillas frente a la niña, la cual abrazaba a su oso de peluche y veía directo a los ojos brillosos de su padre.

— Te lo prometo pequeña, por ahora podrás salir con Lottie, con Phoebe, Daysi, y conocerás a Ernest y Doris, además de que Liam te presentará a otros dos de mis mejores amigos — la niña asintió, sus ojos estaban empezando a llenar de lágrimas

— Está bien, pero por favor vuelve pronto

Louis la abrazó y Emma le devolvió el abrazo muy fuerte, Louis sentía un inmenso cariño por aquella niña, le recordaba a sus hermanas, le recordaba a la pequeña Fizzy, su corazón se había sentido tan triste desde que su madre se había marchado, desde que Fizzy no estaba, desde que Harry había decidido dejarlo, pero ahora, ahora todo estaba cambiando tan rápido, estaba empezando a ser feliz otra vez, estaba ilusionado, tal vez eso era lo único que quería, tener una verdadera familia, una hija que realmente él quería cuidar, una niña que merecía todo el amor del mundo y que por razones de la vida se le había negado, pero ahora estaban los dos, y se había prometido ser feliz, y hacer feliz a esa pequeña, ambos merecían estar bien a partir de ahora, la vida les debía felicidad y nada más que eso.

***

Harry estaba llegando a Londres, su departamento no estaba muy lejos de ahí, era casi de noche, y él solo quería tomar una buena cena e ir a dormir, al día siguiente vería a Zayn y Liam, y esperaba que pronto también podría ver a Louis.
De camino a casa, su mente pensaba en las varias ideas que había estado teniendo y anotando para poder llegar nuevamente a Louis, había leído historias de las fans, tweets que aparecían cuando en el buscador ponía Larry Stylinson, a veces incluso, no podía creer en la imaginación que muchas chicas podían llegar a tener, pero también debía agradecer a ello, porque por alguna de esas tantas historias, Harry le había enviado Crisantemos rojos a su amado.
Minutos más tarde, sin que Harry se diera mucha cuenta de lo que sucedía, llegó a su departamento después de casi una hora, había comprado algo de comida por el camino, y ahora solo tenía que descansar. Eran las nueve de la noche cuando al fin cayó dormido.

Por la mañana, recibió un mensaje, aún era muy temprano, y el no quería levantarse, pero lo hizo a regañadientes. Zayn lo esperaría en su casa de campo, lejos de la ciudad, y posiblemente Liam también estaría ahí. Se duchó y desayuno algo muy rápido, salió en su viejo auto hacia aquella  casa de campo que aunque no quería, le traía recuerdos, buenos y malos, al fin de cuentas, era lo mismo.