❝ Los héroes no son siempre los que ganan, a veces son los que pierden. Pero siguen luchando, y siguen aguantando. No se rinden. Eso es lo que los convierte en héroes.❞
BOOK 2, SAGA: HEROES IN THE DARKES TIMES.
portada hecha por @faithlion 🖤
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Todos aún lamentaban la pérdida de Coulson y Astrid era la más afectada. Él había estado con ella desde el primer día, la protegió y cuidó desde que llegó a S.H.I.E.L.D, había sido un gran mentor. A pesar de que intentó con todas sus fuerzas no culparse, no pudo dejar de hacerlo.
En su «habitación», acostada y viendo el techo, pensó en su madre, en cómo sería todo si ella estuviese allí con ella. Llevó su mano a su collar, acariciando el mismo y cerrando sus ojos por una fracción de segundos, pero fueron suficiente como para escuchar un «no te rindas». Y pudo jurar que esa voz pertenecía a su difunta madre. Lo tenía en claro, jamás iba a hacerlo, no lo hizo antes, no lo haría ahora.
La puerta de la habitación se abrió, dejando ver a Steve allí, de pie y aún vistiendo con su traje. Sin pensárselo, se adentró para quedar frente a ella, mientras que Astrid lentamente se situaba en la cama y lo miraba.
─¿Cómo te sientes? ─le preguntó, cruzándose de brazos y apoyándose contra la pared. Astrid le sonrió a medias.
─Estoy bien, ¿lo han encontrado?
─Tony tiene una idea de en dónde puede estar. ¿Estás lista para continuar con la batalla?
─Déjame a Loki, Capitán.
─Será tuyo. Vístete.
Astrid asintió, tomando su otro conjunto de respuesta y corrió hacia el baño, en dónde tomó el traje realizado por una pareja de científicos nuevos, recordaba brevemente su nombre, pero era o le decían Fitz. El traje era negro, a sus costados líneas azules brillantes y en el cinturón alrededor de su cintura, un par de navajas que pertenecieron a su madre. Colocó un arma allí también, para después cerrar sus ojos e intentar crear un círculo protector alrededor suyo, pero no lo logró e hizo que haga una mueca. Algo estaba pasándole.
Pero no dejaría que eso impida que continúe con la batalla. Le arrancaría la cabeza a Loki por lo que había hecho y después, hablaría con Thor, porque sabía que estaba vivo, lo podía sentir.
─Andando, Cap.
Steve caminó detrás de ella, y pronto se le unieron Natasha y Clint. El segundo miró a Astrid con orgullo, la niña que él mismo entrenó se convirtió en una gran soldado, con excelentes poderes y con un futuro más que prometedor. Salieron del gran Herricalier para poder subir a otro, en dónde un joven mecánico los miraba.
