Desperté exaltado y un poco transpirado por el impato que el miedo había causado en mi, a causa de una horrible pesadilla.
Me tranquiliza al darme cuenta de que nada había pasado, por suerte, todo había sido producto de mi imaginación.
No pude impedir que una sonrisa se dibuje en mi rostro al ver a mi novia descansando tranquilamente sobre mi pecho.
Tenia sus ojos cerrados, su rostro reflejaba Paz y Belleza, ella era simplemente perfecta.
Voltee para buscar con la vista mi celular, al conseguir mi objetivo, estire mi brazo derecho para alcanzarlo y ver la hora.
En la pantalla de mi Iphone, se podía ver que eran las 11:07 am, del día 24 de Octubre, por lo tanto, decidí interrumpir el sueño de mi pareja.
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-Bebé...-
-¿Mhh? Un rato más- Dijo aún adormecida.
-Levántate, reina- Le dije al mismo tiempo que le hacía mimos en la cara y jugaba con su cabello.
-Bueno, amor- Dijo para acto seguido sentarse a upa mio y darme un beso- ¿Que hora es?
-Las 11:10, si tenes ganas anda a bañarte y vamos a almorzar al restaurant nuevo-
-¿De verdad?- Pregunto con una calida sonrisa en su hermoso rostro.
-Si bebé, pero anda a bañarte-
-Está bien, ¿Vos ordenas acá?-
-Si, amor, anda tranquila-
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Luego de esas palabras, la chica del pelo negro se introducio en el cuarto de baño llevando con ella una toalla, un toallon, y la ropa que se pondría luego.
