It Grows on you (Tomarry/Harrymort)

Capítulo 1

It Grows on You

Por lordmarvoloriddle

Traducción por Alyssa S.

****IMPORTANTE LEER ANTES DE CONTINUAR CON LA LECTURA****

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Esta historia tiene contenido no apto para todo público: nigromancia, manipulación por parte de un adulto, muerte de personajes y una relación romántica y sexual CONSENTIDA de un adulto con un menor de 16 (14) años.

Esta obra de ficción, por cuestiones de seguridad, ha sido censurada para la publicación en esta plataforma dadas las políticas de Wattpad ante las relaciones románticas/sexuales con menores de edad -en este caso, la relación de un menor de 14 años contra un adulto que le dobla la edad. La edad mínima permitida es de 16 años. [Sí desean leerlo con la edad real -o sin censura-, les dejaré el enlace a las dos otras publicaciones alternas en mis otras plataformas].

Sí, a pesar de lo anterior, quieres continuar con la lectura a pesar que no te agrada este tipo de contenido, has aceptado que has leído todas las anteriores advertencias y estás leyendo bajo tu propio riesgo. Sí no eres partidario de este tipo de situaciones, por favor, detente aquí. No te hagas daño si no te agrada. Tampoco se está permitido comentarios violentos/ofensivos dirigidos al lector o al escritor y traductor. De haberlo, me tomaré la molestia de eliminarlos al instante. Los comentarios constructivos, sugerencias y demás son altamente bienvenidos.

¡Han sido avisados, mis amores!

Sin más, disfruten de la lectura. Uwu

****IMPORTANTE LEER ANTES DE CONTINUAR CON LA LECTURA****

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It Growns on You

Por lordmarvoloriddle

Traducción por Alyssa S.

Advertencias de capítulo: Leve referencia a nigromancia/manejo de cadáveres. Leve relación de adulto con menor. Referencias a asesinato.

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Capítulo I

Ninguno de los dueños de la tienda se atrevió a intervenir en el trabajo de Tom en las raras ocasiones que regresaba con fines de obtener suministros.

No era el tipo de trabajo público del que ciertas personas ricas eran conscientes en los sagrados pasillos del Ministerio. No, era el trabajo que generaba una enorme fuente de emoción y frustración para quienes seguían las raras visitas de Tom a la oscura tienda en Knocturn Alley. Algo mucho más sombrío de lo que la mayoría de la gente solía pensar.

Le quedaba bien a Tom.

A los veintiocho años, y en medio de algo mucho mayor que trabajar en el Ministerio de Magia, las horas que le dedicaba a su trabajo secreto resultaron útiles. Y placenteras, a decir verdad. Había una inmensa belleza en armar un ser, con sus propias manos y con la ayuda de su magia, especialmente después de aguantar y resolver la larga lista de errores de las incompetentes personas adineradas. Y sus criaturas no eran meros cadáveres como los inferí, sino algo que tenía la capacidad de pensar, incluso si sus oídos solo escuchaban las órdenes de Tom. Y por eso eran especiales. Apreciaba mucho a sus seguidores, sin embargo, tener a estas criaturas a su disposición era algo completamente diferente. Eran su propia creación. Su hijo, en cierto sentido.