Tomar una taza de café en una cafetería en el centro de la ciudad al atardecer cuando el cielo se torna rosado y el reloj marca las siete en punto, las tan añoradas "horas mágicas" para un fotógrafo, es lo más normal. ¿No es cierto?
Encontrarte sentada en esa cafetería con la persona que tanto ansiabas conocer, que le pedías al cielo con todas tus fuerzas que las estrellas se alinearan a tu favor para ponerlo en tu camino como si fuese el destino. ¿Normal, verdad?
Sé que no lo piensan así.
Esas cosas solo suceden en las películas ¿no?
Si, yo sé que si.
O en los libros románticos que todo ser humano en algún momento ha leído aunque fuese por mera casualidad.
O en el "amor verdadero" que nos hizo creer Walt Disney en sus películas.Forzar el destino solo nos lleva a nuestra destrucción. El querer que todo salga como queremos nos termina demostrando que por algo no se nos había dado la oportunidad y que perdimos el tiempo, momentos, lugares y sentimientos que nadie nos va a devolver.
Para él, estar ahí sentado tomándose un café al atardecer era pan de cada día. Un hábito de toda su vida y el estar acompañado o no, no cambiaba absolutamente nada.
Para ella, estar ahí sentada frente a él tomándose un café que por más simple que pareciera era un momento que en su vida jamás olvidaría.
...El único momento que ella atesoraría en sus recuerdos para consolarse cada vez que él actuara irracional.
...El único recuerdo que ella usaría cada vez que se tomase un café para no ahogarse en él.
Pero,
¿qué pasa cuando te das cuenta que odias el café?
¿O qué pasa cuando te das cuenta que lo amas?Dos personas opuestas que el destino decidió juntar en un experimento.
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Dedicado a: _AM4NTM0RT_
Lo prometí hace un año y nunca lo hice, lo siento tanto.Ahora si que si.
Para ti, cariño.
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Un café en Londres ✧ TH. P R O X I M A M E N T E
Romansa𝑼𝒏 𝒄𝒂𝒇𝒆́. 𝑈𝑛 𝑑𝑢𝑙𝑐𝑒 𝑐𝑎𝑓𝑒́ 𝑐𝑜𝑛 𝑙𝑒𝑐𝘩𝑒 𝑒𝑛 𝑢𝑛𝑎 𝑐𝑎𝑓𝑒𝑡𝑒𝑟𝑖́𝑎 𝑒𝑛 𝐿𝑜𝑛𝑑𝑟𝑒𝑠. 𝑈𝑛𝑎 𝑒𝑠𝑐𝑒𝑛𝑎 𝑐𝑙𝑖𝑐𝘩𝑒́ 𝑦 𝑚𝑢𝑦 𝑟𝑜𝑚𝑎́𝑛𝑡𝑖𝑐𝑎... ¿𝐷𝑒 𝑣𝑒𝑟𝑑𝑎𝑑 𝑐𝑟𝑒𝑦𝑒𝑟𝑜𝑛 𝑞𝑢𝑒 𝑠𝑒𝑟𝑖́𝑎 𝑎𝑠𝑖́ 𝑑𝑒 �...