P R Ó L O G O

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He mirado atrás y me he dado cuenta de que  quise seguir la historia con una temática más amigable, pero también me di cuenta de que a ustedes les gusta más los Naruto y Sasuke que comen cereal con sangre en el desayuno, entonces, espero les guste, ¡Dattebayo!

¿Por qué todo es negro?

¿Por qué no puedo abrir los ojos?

Mi garganta quema

No puedo moverme

Levantante

Su voz

¿Viejo Hagormo?Naruto estaba desorientado, reconoció la voz del sabio y comenzó a ponerse de pie.—

— No mereces ni por un segundo dirigirme la palabra —El rubio ensanchó los ojos ante las acusaciones del sabio—Ésto es todo lo contrario a lo que debías ser, superaste todo el odio de una aldea, de tus compañeros, peleaste por ti y por un simple episodio nuevo de desprecio volviste abajo, ¿Tan inservible te dejó ser Hokage? ¿Fue mucho para ti estar sentado detrás de un escrito durante año sin hacer nada más que firmar papeles? Estoy decepcionado.

— Yo...-

— Asesinaste a decenas de personas  únicamente porque fue mucho para ti que tus amigos y familia te despreciaran, te debilitaste y quebraste por algo que viviste durante  toda tu infancia —Acusó severamente el viejo Rikudo, quien acto seguido, formó cinco pequeñas flamas de chakra, cada una en la punta de los dedos de su mano derecha, con esa misma mano tomó la cabeza del rubio, que empezó a desprender luz de sus ojos.

Todo volvía a ser negro.

Hagoromo-sama, ¿Dónde...-

— Tu voz comienza a fastidiarme, cállate y observa.

Era el pasado, su no muy tan lejano pasado.

En el se veía un túnel subterráneo, oscuro, húmedo, "Es una cueva", dedujo Naruto al notar las paredes y techo rocosas, antorchar simétricas repartidas por las paredes y las innumerables puertas a lo largo de ésta, en una habitación articular, estaba un hombre de espaldas, Naruto, por su cabello largo hasta la cintura dedujo que era Orochimaru, él estaba interviniendo quirúrgicamente a un anciano, al que Naruto identificó como el cadáver de Danzo Shimura, vio el procedimiento ocular en silencio bajo la dura mirada que le daba Hagoromo, al terminar, Orochimaru se vendaba los ojos, pues tenía que asegurarse de que su nuevo Mangekyo Sharingan, robado del cuerpo de un Danzo criogenizado, se adaptara correctamente.

¿Por qué lo hacía? Tenían un trato.

— Hambre de poder, sabes sobre el Genjutsu de Shisui, ¿No? —El sabio rodó los ojos al ver la expresión con fundida del rubio— El Kotoamatsukami, es un Genjutsu de alto calibre visto en el Mangekyo Sharingan de Shisui, éste Genjutsu le permite al usuario, particular o colectivamente, dar una orden al cerebro de la persona que no percibe estar en un Genjutsu, la víctima cumple con la orden del usuario como si fuera decisión propia suya.—

El escenario cambió, era la aldea de la hoja, completamente intacta, en la que se hallaba Orochimaru entrando en la misma con una sonrisa sádica con su ojo izquierdo brillando intensamente en un tono rojo sangre, era un espectáculo del que ningún aldeano quiso perderse, y en su pequeño paseo por Konoha, Orochimaru consiguió de títere a una cantidad masiva de personas, exceptuando, claro, a los que se convertirían años más tarde en los hermanos sombra, ordenó finalmente lo que quería, y cuando ya estaba fuera, percibió como Sasuke se dirigía a la oficina del Hokage.

Genjutsu.

Naruto se desplomó, quiso asesinar al Sannin  y a la vez a él mismo por haber destruido tanto por un jutsu tan estúpido.

La ilusión del sabio terminó, y cuando Naruto se dio cuenta de ello, estaba en el suelo, gracias a que el sabio deshizo el agarre que mantenía sobre su cabeza, desde arriba, Hagoromo lo miró despectivamente.

— Deberías irte al infierno —El rubio palideció— Pero darte el descanso sería premiar tus acciones —El sabio se puso en cuclillas y tomó a Naruto por el cuello, lo levantó,y mientras el aire se le iba al rubio, el sabio le susurró, por primera vez, sonriendo— Vive con las consecuencias de tus acciones, púdrete intentando enmendar lo que dañaste.


Se despertó de un brinco y miró a su alrededor intentando reconocer dónde se encontraba, casi cae de la silla en la que se hallaba sentado al notar varias torres de papeles, una laptop frente a él y siete retratos distintos repartidos en lo que parecía ser una oficina, el rubio se frotó sus cienes.

La puerta de aquél cuarto se abrió violentamente dejando al rubio asombrado, que ahora vestía de Naranja y llevaba una capa blanca amarrada a su cuello.

Sasuke...

Traición | NarutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora