31

6.3K 312 27
                                    

Clío

Abrí mis ojos poco a poco para acostumbrarme a la luz que entraba por la ventana ¿a quién mierda se le ocurre dejar las cortinas abiertas? para, este no es mi cuarto, ni el cuarto que tengo en la casa de Valen ¿dónde mierda estoy? ¿que hice anoche?

Mire abajo de las sábanas y no tenía puesta mi ropa, tengo una remera pero mi tanga está, al menos se que no hice nada

Mirando bien el cuarto, es el cuarto de Mateo ¿que hago yo acá?

Salí rápido de la cama y la resaca atacó ¿para qué tome tanto? Fui al baño, hice mis necesidades y me bañe, agarré ropa que tenía en el cuarto de Mateo y me vestí, me puse un top y un short, baje y fui a la cocina, estaba Mateo preparando algo para comer

-¿qué hora es?- me acerqué a la heladera y saque una botellita de agua

-Hola Teo ¿todo bien? Todo bien Clío ¿vos? Bien bien, gracias por cuidarme anoche, no pasa nada Clío.

-no te pedí que me cuides.

-un gracias no estaría nada mal.

-si es lo que estas esperando, sentate por que te vas a cansar.- agarre una pastilla para el dolor que me está matando y me la tome -¿que pasó anoche?

-anoche te pusiste re en pedo mal y me termine agarrando a las piñas porque te chapaste a un pibe y el loco te quería llevar contra tu voluntad a un cuarto.

-¿que?- ¿y eso a que hora pasó? -no me jodas.- me senté

-no te hizo nada, tranquila ¿querés comer?- me ofreció una taza chocolatada con tostadas

-gracias.

-no es mucho pero para bajar el hambre...

-no, gracias por cuidarme anoche.

-tengo que cuidar a la chica que me gusta.

-ya me voy.

-quédate un rato más, Clío.- me agarro de las manos y las miro -Cami tenía razón- agarro su teléfono y lo llevo a su oído -Gala... no... sos una mentirosa... me mentiste... no quiero volver a verte... si... chau.- corto

-nos vemos, Mateo.

-para Clío, quería pedirte perdón.

-¿por qué?

-por creerle a Gala sin pedirte explicaciones o escuchar tu versión la historia.

-ya no importa, me tengo que ir a ver dónde está Rocío.

-esta con Luchito, se quedó en la casa de él.

-okey... igual me voy.

-¿por qué no querés estar conmigo?

-por qué me haces mal Mateo ¿no te das cuenta? Estoy enganchada con vos y cuando pienso que todo está bien algo llega a cagar todo y vos te alejas de mi, cada vez que lo haces, me haces mierda y yo termino llorando como una estúpida y eso no me hace bien.

-¿vos pensas que yo soy feliz alejándome de vos? No, no soy feliz lejos tuyo.

-no parece, te alejas cada vez que tenes oportunidad y está vez soy yo la que quiere estar lejos tuyo.

-Clío...

No deje que termine de hablar y salí de su casa a la mía ¿por qué la tiene que hacer tan larga?

-no te vas una mierda hasta que me perdones.- sentí sus brazos al rededor de mi cintura e instantáneamente estaba volviendo a su casa sin caminar

-¿me podes soltar?

-ahora si ¿me vas a perdonar?

-no, déjame salir que tengo que ir a la casa de Valen por que se va a preocupar.- saco su celular y lo desbloqueo

-Valen, Clío está en mi casa conmigo- mando el audio -listo.

-sos un tarado.- fui a la sala y me senté, el fue atrás mío

-Perdóname, Clío, dale.

-te dije que no, Mateo, basta.

-dale amor.- dijo en un tono suave acercándose a mi y mirándome a los ojos

-te...- lo miré y el me miro tierno -te dije que no, no quiero y ya no me mires así.

-¿así como?- dijo sin despegar sus ojos y poniendo una de sus manos en mi cachete

-de esa manera.- no puede ser que este pibe me vuelva loca con sólo mirarme

-¿por qué? ¿te pongo nerviosa?- sonrio, ¿alguien vio mi tanga?

Se acercó despacio a mi, haciendo que yo me ponga nerviosa ¿por qué? No se

-basta Mateo, Alejate no te quiero cerca mío, me haces mal ¿no entendes? Me duele cuando me boludeas.- mis ojos cristalizados se hicieron notar en cuestión de segundos

-no me voy a alejar de vos, Clío, nunca más.- sus ojos se clavaron en los míos nuevamente, yo estaba en una lucha interna, no sabía si creerle o no

-me lo prometes?- lo mire triste

-te lo prometo mi amor -junto nuestras frentes- no me voy a alejar de vos otra vez

No aguante y lo besé, el me siguió el beso, poco a poco fue subiendo de intensidad y me acosté en el sillón, me siguió besando y bajo sus besos a mi cuello, para volver a subir por mi mandíbula y terminar en mi boca, empecé a sacarle la remera y él me frenó

-¿estás segura?- dijo a centímetros de mi boca -no voy a hacer algo que no quieras hacer.- ayy me lo cómo a besos, es re tierno lpm

-estoy segura.- sonreí y el volvió a juntar nuestros labios

-vamos arriba.

Familia; TruenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora