—Chae HyungWon, me gustas.— HyungWon se sorprendió al encontrar a su hyung después de abrir la puerta, con un ramo de flores rojas en sus manos, vestido de traje y bien peinado.
—Eh...
—No, no me gustas ni como amigo, ni como hermano, ni mucho menos como hijo, Wonnie. Me gustas como pareja.— WonHo lamió sus labios. —Me gustas demasiado, Chae, demasiado.
—Hyung... Ya me lo has dicho tres veces...— HyungWon bajó la mirada, mordiendo su labio inferior, sin saber qué decir.
—Eso es porque las cosas importantes se dicen tres veces.— tragó saliva.
—¿Cuántas veces más me lo vas a decir?
WonHo sonrió, y le ofreció el ramo de rosas que tenía en sus manos a HyungWon, quien lo tomó. —Las veces que sean necesarias para que tú me digas lo mismo.
—Hyung...
—Estoy enamorado de ti. Completamente perdido, te amo.
—Hyung...— Chae tragó saliva, mirando las flores para luego mirar a su contrario. —También me gustas.