Después de que ambos desaparecieran la rubia de sangre única se molestó por lo que fue a buscar al segundo más grande, Reiji Sakamaki el cual estaba en su laboratorio aunque no paso por alto las quejas de la castaña pues le estaba lastimando el rubio al estarla jalando.
El de porte elegante intervino obligando a su hermano a soltarla e invitarla a tomar té para que descansará y de manera de disculpas aunque primero quería curar la herida que tenía en su mano pues la bufanda del Tsukinami empezaba a dejar de ocultar la sangre de la castaña por lo que el segundo Sakamaki le curo la herida y le dio una simple posición para ocultar su olor lo cual funcionó aunque no quitaban las ganas de morderla por su deliciosa sangre lo cual está sabía y simplemente sonreía torpemente.
—Reiji-san, ¿Quieres de mi sangre? No me importaría darte la por qué tú me ayudaste en estos momentos así que es lo menos que puedo hacer, si necesitas algo me avisas.
Menciono algo tranquila pero sin borrar los nervios que se podían ver causando que este se sorprendiera al ver a la castaña dejar caer su sangre en el té de este para retirarse de manera tan tranquila y que este tomar aquella bebida que le dejaría extaciado y sorprendido al sentir que la sangre de esa chica era más deliciosa que la de Eva cosa que era extraño pues según sabía solo había dos sangres tan especiales y tan únicas las cuales eran de Lilith el joven que se hacía llamar Grethel y el de Yui que sería Eva, no tenía lógica.
Mientras tanto la rubia era mordida por dos de los trillizos los cuales eran tan molestos que no se preocupaban por lo que dijeran pero se detuvieron al sentir a la castaña abrir la puerta de la rubia la cual estaba muy cansada para pelear, los dos chicos se fueron de aquel cuarto dejándolas solas y en silencio por lo que la castaña se acercó a ayudarla y a cuidarla aunque está tenía planeado matarla cuando estuviera bien como en ese momento lo cual solo fingía estar débil mostrando su fortaleza al intentar matarla con una daga plateada pero se detuvo cuando observó la puerta abrirse y dejar ver a un albino de ojos cual sangre lo que la obligo a volver a mentir sobre su estado de salud dejándola en una frustración interna muy alta.
—Subaru, ¿Que pasa? Komori está muy débil así que creo que será mejor dejarla descansar por unos días, se ve pálida y no creo que quieran que se muera, Subaru puedes pedirme mi sangre sin pena.
Menciono la castaña para sacar al albino del cuarto de la humana con tranquilidad y sin molestia que mostrará el contrario pues se sentía tranquilo y dócil al lado de está chica así que una vez a fuera del cuarto de esta la castaña se encontró con Grethel el cual solamente se sonrojo y abrazo a esta dama la cual tenía ganas de morderlo pero lo haría después dejando que este lo abrazara y se fueran al cuarto del chico dejando a un Subaru molestó.
—Greth si me vas a interrumpir hazlo de manera sútil, se que me quieres y estás molestó por qué no te he dado atención pero sabías que esto pasaría.—Menciono mientras esperaba que el de cabellos rizados terminará— Aceptaste que pasara esto.
—Lo sabía pero no quería que pasara tan rápido, se ha distanciado de mi tanto como se lo han permitido estos experimentos.—Aun molestó y con una pequeña herida de la cual dejaba que se llenará una copa—Me es molesto que deje que beban su sangre tan única teniendo a Eva para eso, además por lo que se Eva quiere matarla sin importar nada.
La castaña tomo la copa del de cabellos rizados para beberla lentamente dejando a este escombrar su recámara sin pena de que la joven viera cosas aparentemente prohibidas para algunos aunque a la vista estaba la botella de vino tinto que dejaba pensar que la copa era vino y no sangre como realmente lo era además de que esa botella servía para ocultar el olor de la sangre de Lilith volviéndola aún tanto común y nada deliciosa lo que les parecía extraño a los dueños de aquella casa es que la castaña llegara y dejara dócil a su padre y no solo eso que llegara con un chico, ¿Su padre intentaba demostrarles el amor a base de humanos? Era tan confuso excepto para cierto clan que conocían muy bien a Aisha.
El clan fundador albergo a "Aisha" por mucho tiempo además de que la chica se convirtió en alguien cercana a ellos pues sus padres habían muerto a manos de estos dejándola a ella como huérfana aun sin edad correcta para sobrevivir sola siendo el mayor de los Tsukinami el que la quería matar y el menor quería protegerla con todo lo que se le permitiera siendo asi que la pequeña ha sobrevivido, conforme fue creciendo aprendio leyes y rituales volviéndola alguien peligrosa aunque para ellos era un simple retoño que apenas daba su primer respiro aunque un dia por accidente probaron la sangre de Aisha dejándolos completamente cegados por esta y juraron protegerla de todos los demás vampiros que se le acercaran, Aisha establecion un gran vinculo con el mayor dejando a este completamente perdido por ella aunque desaparecio demasiadas décadas para ahora encontrarla, en cambio, el menor fue mas que un hermano para esta por lo cual en esas décadas en las que desaparecio este sabia su ubicación y sus pasos pero la perdió de manera brusca.
Ahora que estaba de vuelta la protegería y no dejarían que se fuera de su lado, la marcarían si era necesario.
—¿Grethel? ¿Estás bien? Me llegó el olor a sangre, no quiero que mi muñeco este herido.
Era la voz de Kanato, el hijo de Cordelia, Aisha se escondió en el baño mientras Grethel escondía algunas cosas anormales para un varón y después solo abrir la puerta dejando ver a Kanato con su oso y un rostro un tanto maniático. Grethel mantenía una postura pacífica aunque su sangre podía demostrar lo contrario cosa obvia para el vampiro frente a él.
—Veo que estás bien muñeco, me molestaría tener que asesinarte y tirarte a la tierra cual abono solo por simples heridas, Teddy dice que te asesine ahora pero todavía no te he probado, no se si vales la pena o no, cuanto lo sepa solo sentirás mucho sueño.
Dijo el de cabellos lilas con una sonrisa bastante tenebrosa para el humano aunque después de que se fuera este cerraría su puerta para soltar el aire de sus pulmones y dejar su sangre más relajada aunque solo paso al baño para darse una ducha y dejar a la vista anomalías masculinas que a Aisha le encantaban demasiado.
Esta solo sonrió para salir de aquel cuarto dejando la copa en el tocador y salir sin preocupación encontrándose con una mirada verde sobre ella, le penetraba tanto, le recordaba a la misma zorra que era la mujer de cabellos lilas, le daba un asco y un miedo que solo agachó la cabeza y se fue, le tenía un muy falso miedo a Cordelia y solo lo hacia por qué está formo parte de un plan en el que ella era un simple juego de diversión en el cual su sufrimiento era la distracción principal, Cordelia había causadl muchas cosas en ella pero nunca le infundió miedo, solo mentía sobre este sentimiento para dejar a la mujer con un ego que caería como ella al infierno cosa que le daba risa por lo que camino algo rápido pero fue detenida por el anterior chico.
—¿Podría soltarme? No quiero que me toque alguien como usted.