C̶a̶p̶ít̶u̶l̶o̶: 24

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        Miraba atreves de la ventana, casas, edificios, casas, autos, edificio, autos, carretera.

“¿Cuánto tiempo debo esperar para que hable? ”.

—Stiwar, tenemos una conversación pendiente ¿Lo olvidas? —interrogó finalmente.

—...No, aún no es tiempo —responde, apretando el volante. —Voy hacer una parada, necesito desfogar está furia. Antes de llegar al lugar —argumenta piensa el acelerador.

—Ahf, colocaré un poco de musica —enciendo la radio.

Su banda favorita Maneskin resuena al 20 de volumen, mas Stiwar creyó no ser suficiente y sube a 60.

Bajo la luna sintiendo el viento en mi rostro, me dejó llevar por la música y el trayecto con la mente en blanco pasa unos minutos para caer dormida.

🅜︎🅐︎🅓︎🅡︎🅔︎ 🅐︎🅓︎🅞︎🅛︎🅔︎🅢︎🅒︎🅔︎🅝︎🅣︎🅔︎

Cuando abro los ojos, noto que estamos estacionados en un grifo. La radio aún encendida y la calefacción incluida, encuentro el copiloto vacío.

“¿Donde se metió? ”—sobo mis párpados, una punzada en mi cabeza.

Los golpes en la ventanilla me sobresaltó, suspiro al ver quién es. Bajo la luna que no recuerdo haber subido.

—¿Por qué no me despertases antes? —le recriminó, cogiendo la botella de agua de litro y medio helado, una bolsa de papel que para mí suerte contiene frituras.

—Te veías cansada, come un poco —me dice apartandose con su cigarrillo.

“Me pregunto cuantos va ”—gruño, subiendo la ventanilla cuando llega el olor de la nicotina.

Abro la botella con agua, refresco mi garganta para luego llenar un poco mi barriga que suena hambrienta.

“Que dia, lo irónico es que se pondrá peor ”—meto unas cuantas papas a mi boca.

Miró la calle, tarareando las canciones de Daddy Yankee o Mark Anthony, terminando mi segunda bolsa de papas la puerta de piloto se abre y entra Stiwar con una botella de energizante en mano.


—...¿Podemos hablar de lo que pasó en el estacionamiento? —pide, dejando su bebida aún lado.

Le doy un trago al agua.

—Podemos —respondo, cerrando la botella. —¿De que hablan ustedes dos?.

—Agf. Ahí algo que creó, no estás consciente —suspira. —¿Por qué crees no recuerdas ese día? —me mira de reojo.

—No lo se, ilumina me.

Extiende su mano pidiendo la mía, que se la doy.

—Ambos fueron drogados —me confieso, apretando nuestras manos. —Segun las invitaciones de... su agencia, no fueron el objetivo real. ¿Recuerdas que fue lo último ingeriste?¿La persona?.

—Una bebida...pero no recuerdo exactamente quién me la dio o la situación, solo beberla mientras llevo a su hospedaje a Suga —frunzo el ceño.—¿Crees que mientan?.

ꪑꪖᦔꪹꫀ ꪖᦔꪮꪶꫀకᨶꫀ᭢ᡶꫀ  [ᵐʸᵍ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora