1 De Mal ¿A Peor?

2.1K 122 16
                                    


Había sido un pésimo día por donde se lo mirase. Primero se había levantado tarde, por lo tanto había llegado tarde al Gran Comedor y solamente había encontrado dos naranjas, ¡dos naranjas! Corrió a su primera clase con McGonagall pero solo recibió una reprimenda por parte de la profesora, luego Snape le había hecho la vida a cuadritos en pociones, y lo había puesto nervioso a tal punto que su caldero había explotado, quitándole ciento cincuenta puntos a Gryffindor y logrando una mirada furibunda de sus compañeros. El almuerzo fue peor aun, si es que eso podía ser posible, su comida no tenía sal y sabia a vomito de troll, pero le había tenido miedo a la mirada asesina de Hermione que terminado comiendo en completo silencio.
Por la tarde la cosa no había mejorado mucho. Intento copiar de Harry unos pergaminos sobre Cuidado de Criaturas Mágicas, pero el muy traidor lo había delatado con Hermione solo porque se tomó su jugo de calabaza. Valiente amigo. Cerca de las cuatro de la tarde habían ido a practicar quiddich y por poco se había caído de la escoba cuando George había pasado muy cerca de él

-¡Eres un animal! – le grito molesto
-¡Y tú eres una niña llorona! – dijo Fred
-Ñoe ñoe ñoe – se burlaba George
-Ya me tienen harto – dijo Ron
-La niña… – dijo Fred
-Va hacer… – dijo George
-Su berrinche – dijo Fred
-Ñoe ñoe ñoe – se burlaba George
-Cállense – ordeno
-Fred, George – dijo Harry – vuelvan al entrenamiento. Ron a las duchas
-Pero… – quiso protestar
-Ahora Ronald – dijo Harry y remonto vuelo
-¡Maldito día! – mascullaba en voz baja el pelirrojo mientras obedecía –, ¡nada me ha salido bien! ¡Lo único que falta es que Fluffy me bese y yo tenga un hechizo que haga que me guste!

Se desvistió y se metió a la ducha. Fue un baño rápido por lo que minutos después salía con la toalla alrededor de la cintura, accidentalmente se le cayó una prenda que llevaba en la mano

-Linda vista – dijo una voz desde la puerta
-¿Qué haces aquí? – dijo Ron nervioso levantándose rápidamente y ajustándose más la toalla
-¿Nerviosa, comadreja? – dijo Draco acercándose a paso calmado
-Lárgate, hurón – dijo el pelirrojo dando un paso hacia atrás mientras miraba a su alrededor con aprensión
-¿Buscabas esto? – dijo Draco mostrando ambas varitas sin dejar de avanzar en su dirección – aunque si quieres saber las maravillas que puede hacer una varita, yo te puedo enseñar – y se señala la entrepierna
-Dame mi varita – exigió Ron
-Claro, ven por ella – dijo Draco y se llevó las manos a la pretina el pantalón
-¡Oye! – protesto el pelirrojo volcando el rostro
-¿Acaso te sonrojaste? – dijo con tono burlesco
-¡Claro que no! – dijo Ron sonrojado
-¿Y por qué tus mejillas están al color de tu cabello? – dijo Draco acercándose con cada palabras acorralándolo en una esquina
-Cla… cla… claro que… no – dijo Ron
-Te vez hermoso – dijo apoyando una mano en la pared
-Aléjate Malfoy – exigió el pelirrojo nervioso
-¿Por qué? – dijo acercando su cara a la del otro chico – ¿acaso te pongo nervioso? – por lo que este cerro los ojos – ¿alguna vez te ha besado un hombre?
-¿Hombre?– dijo Ron nervioso – ¿Beso? ¿Qué?
-Esto – dijo Draco y le rodeo la cintura
-No te atrevas… – exigió Ron intentando zafarse pero sus labios fueron asaltados por otros  que se abrían paso a cualquier precio. La otra mano se posesiono detrás de su cuello para evitar que se escabulla y profundizó el beso, por lo que no le quedó otro remedio al pelirrojo que aferrarse a los hombros del Slytherine mientras cerraba los ojos
-¿Te gusto? – pregunto al separarse unos centímetros
-¿Qué pretendes? – dijo empujándolo lo suficiente para separarse
-Nada – dijo el Slytherine – solo quería besarte.
-No lo vuelvas hacer nunca más, maldito imbécil – grito cuando iba salir
-Ronald – dijo Draco girando para verlo – eres mío y, aunque demore, serás mi mujer – le arrojo su varita –, en todo el sentido de la palabra – y paso por su lado dándole una nalgada antes de salir

Hurones y ComadrejasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora