Helvete

Capitulo 2

De nuevo estoy aquí, en las islas de Lofoten debajo de las auroras boreales, siempre que las miro son del mismo color... Azules, daban una vibra inquietante.

Es inquietante estar sola en un lugar como este... siempre he evitado este lugar; parece un duro castigo. La nieve bajo mis pies... No sé siente. No siento nada.

- ¡Det er din feil!

Despierto de repente, la voz de mi padre hace que mi corazón acelere. Ese lugar solo me trae malos recuerdos, y últimamente sueño con ello.

Solo quiero un abrazo...

Ni siquiera me molestó en buscar a Anders, su calor no se siente desde hace rato odio que me deje sola después de una noche así.

- Mi cuello

Me levanto rápidamente para poder verme en el espejo, anoche fue muy brusco con su arranque de celos; mis ojos no pueden creer lo que estoy viendo.

- Por dios Anders... ¡Que mierda!

Casi puedo jurar que Anders trataba de escribir su nombre en mi cuello y pecho, odio que se comporte así, jamás he hecho algo para que el se sienta inseguro sobre mi.

- Señorita está despierta?

Demonios... es muy temprano para que venga.

- A-a si si, salgo en un segundo solo eh... me vestiré sola por hoy.

- Oh, si claro. Estaré afuera.

No dejaré que alguien me vea con estas marcas.

Cuando éramos más jóvenes paso algo así, nuestras hormonas de adolescentes nos descontrolaron un poco, nunca había visto enojada a la madre de Anders, nos castigo a los dos. Los guardias nunca nos dejaban solos, ni por el día ni por la noche.

Busco el vestido con cuello alto en el armario, recuerdo cuando me lo dió la madre de Anders, solo me recalcó que no quería verlo seguido y a decir verdad lo use unas dos veces hasta que desaparecieran las marcas, cuando lo encuentro veo que aún es bonito, el color vino aún sigue vivo; el tenerlo entre mis manos de nuevo, me trae muchos recuerdo de cuando éramos más jóvenes...

Antes éramos un poco descarados...

No puedo evitar sonreír con los bonitos recuerdos que se me vienen a la mente, todo con el siempre fueron risas, todo lo que hacía me encantaba, amo verlo sonreír...

- No me imagino una vida sin ti Anders... - deje de sonreír al recordar que en dos días ya no estaré aquí.

- Bueno tomaré un baño rápidamente.

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Camino por los pasillos con prisa, al parecer voy un poco tarde al almuerzo. Mi dama de honor viene detrás de mi explicándome el lugar donde me sentaré, pero en mi cabeza solo pensaba en Anders y la vergüenza con la que veré a la reina.

- ¡SI LE TOCAS UN SOLO CABELLO VOY A MATARTE!

Confundida por el grito de Anders rapidamente corro a la barandilla para buscarlo.