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Salió con la vista baja del baño, dirigiéndose directamente hasta donde estaban sus amigos, sentándose en el puesto que había dejado hace unos minutos para finalmente retomar su preciado libro el cual había dejado en el olvido. Si era necesario se obligaría a concentrarse en ello, necesitaba hacerlo por su propio bien, quisiera o no.

Pasaron los minutos hasta que finalmente los llamaron para embarcar sin embargo el peli castaño aún no llegaba, y aunque quisiera hacerse el despreocupado algo en su interior le hacía sentir nervioso, en parte culpable por las palabras que le había dicho en el baño una vez se encontraron. Sabía que había sido duro sin embargo no había podido evitarlo, las palabras simplemente habían salido sin tener algún filtro. Un largo y profundo suspiro escapó de sus labios mientras llevaba la diestra hasta los cabellos para despeinar estos, sintiéndose frustrado.

¡Realmente no sé dónde está! Ya no sé por dónde más buscar, Youngjae...

Se notaba que se estaba desesperando cada vez más y eso a la vez le molestaba, entendía que Mark estuviera preocupado, a fin de cuentas, era su novio sin embargo el simple hecho de pensar en ello ya le traía un dolor de cabeza insoportable.

Ya aparecerá, de seguro escuchó que llamaban nuestro vuelo y vendrá de inmediato, quizá se entretuvo con algo, ya sabes.

A veces realmente le sorprendía lo positivo que podía ser su amigo, pero si era sincero consigo mismo eso era algo que siempre le había gustado ya que él mismo era todo lo opuesto a ello. Guardaría sin demora su libro en la mochila para ir a caminando rumbo a la fila que se estaba haciendo y así subir sin embargo una vez alzó su vista se encontró con un peli castaño con la cabeza baja, manteniendo sus manos escondidas en los bolsillos de la chaqueta que traía, se notaba que no estaba del todo bien y una vez que ambas miradas se cruzaron supo que había llorado, logrando aquella imagen que un dolor punzante se posara sobre su pecho, mordiendo su inferior con culpa.

Mark, tu chico ha llegado. —Diría con una voz más seria de lo normal, haciendo un movimiento de cabeza para que mirara hacia atrás.

¿Ah? No me jod...

Y más no pudo decir ya que en cuanto se giró pudo visualizar a Jackson, sonriendo a más no poder, logrando ello molestarle a simple vista por lo que simplemente terminó de ponerse su mochila para dirigirse a la fila, percatándose rápidamente de cómo la expresión que el chino había tenido hace unos momentos cambiaba completamente una vez se encontró con su pareja, mostrándose ahora más sonriente sin embargo a él no lo podía engañar, sabía que todo eso era más que una fachada.


Una vez estuvieron finalmente arriba del avión se dieron cuenta de los asientos que tenían, por lo que cada uno se dirigió a suyo, sin embargo una vez se terminó de acomodar en el suyo, dispuesto nuevamente a leer algo más de su libro, se percató como alguien se acomodaba en el asiento contiguo, frunciendo levemente el ceño al percatarse de quién era, molestándose notoriamente ante ello.

¿Qué mierda haces aquí? Deberías estar con Mark, Jackson.

No creas que estoy feliz de estar a tu lado. Mi asiento es este, al parecer Mark se confundió, eso es todo.

Entonces le cambiaré el asiento, así está contigo. —Se levantaría sin más para salir de allí sin embargo una mano alrededor de su muñeca le hizo detener, llevando la vista hasta el menor que se encontraba a su lado.

¿Tanto te molesta mi presencia? Para tener que cambiarte, hyung...

No es eso... olvídalo. Me quedaré, no pasa nada.

Soltaría el agarre que mantenía aún el otro chico, tomando nuevamente el libro para así disponerse a leer sin embargo no podía evitar llevar disimuladamente su vista hacia el costado percatándose cómo el chico de pelo castaño jugaba con sus dedos de forma nerviosa, extrañándose en un principio de esa acción para después recordar algo que hace muchos años atrás le había dicho... Jackson detestaba viajar en avión.

Hey... ¿estás bien? Tengo unas pastillas relajantes si deseas...

No, no, estoy bien, hyung. Solamente aún no me termino de acostumbrar a los viajes en avión, eso es todo, ya pasará. —Se giraría para así mostrarle una pequeña sonrisa, pero sabía que sólo lo hacía para ocultar como realmente se sentía.

Ok... si tú lo dices.

Volvería a concentrarse en la lectura mientras sentía cómo el avión comenzaba a moverse para así poder despegar finalmente. Se encontraban aún andando por la extensa pista para así tomar una buena distancia que le permitiera volar sin problema. Decidió guardar finalmente su libro en la pequeña mochila que tenía sobre sus piernas, dejando este bajo el asiento de enfrente, llevando su vista hacia un costado unos segundos para ver a un nervioso Jackson, el cual mantenía sus ojos cerrados, como también sus manos apretadas fuertemente en los apoya brazos del asiento, logrando esa imagen que su corazón se ablandara ligeramente mientras negaba con lentitud. Sabía que probablemente se arrepentiría en un futuro o en solo unos minutos después, pero prefería desconectar el cerebro por unos segundos y solo hacer lo que le dictaba su corazón en ese momento.

Posaría la diestra sobre la mano impropia, tomando esta con cuidado para finalmente entrelazar sus dedos con ella, dando un ligero apretón allí mientras su vista se mantenía en la ventana, apreciando la vista que ésta le ofrecía.

No necesitas hacerte el duro, sé que no te gusta viajar en avión, no finjas conmigo. Puedes apretar mi mano si gustas.

Pero hyung... no es necesario, en serio.

Calla, simplemente no digas nada... y lamento mi actitud en el baño, estaba fuera de mis cabales.

No te preocupes, lo entiendo. Y... gracias.

Se mantendrían en silencio, sonriendo inconscientemente una vez sintió un fuerte apretón en cuanto el avión comenzó a andar con mayor fuerza para finalmente alzarse y así despegar. Para él la sensación era realmente única, le gustaba un montón, pero sabía que para el menor no era así, por eso mismo le había ofrecido su ayuda.

Una vez que el avión finalmente se estabilizó llevó su vista al otro chico quien casualmente también le observaba, dio un ligero cariño con su pulgar en el dorso de la mano contraria para después soltarle, intentando no ser brusco en sus acciones, sabía que no podía seguir molesto por lo que había pasado hace años, quería intentar cambiar el humor de mierda que había mostrado con él.

Intenta dormir, eso ayuda a distraerte que estás viajando. Sólo serán unas pocas horas de vuelo, así que no te preocupes y ya sabes... si realmente no lo soportas más, tengo unas pastillas relajantes.

Gracias, en serio lo digo, hyung... pensé que aún estarías molesto conmigo, ya sabes... por lo que p... —Negaría con su cabeza rápidamente, mientras apoyaba sus manos sobre su propio regazo.

Ya no te preocupes. Eso es pasado, intentemos hacer borrón y cuenta nueva ¿de acuerdo? No prometo no ser un hijo de puta, porque es mi especialidad, pero intentaré cambiar un poco eso.

Una pequeña risa se escucharía por parte del menor, sintiéndose como música para sus oídos, maldición... definitivamente lo extrañaba, su corazón reclamaba por él, pero ya no podía hacer nada, la realidad era otra y él debía aceptarlo, quisiera o no.

Por esto mismo y queriendo que su mente se despejara, se colocaría los audífonos, colocando la música a un volumen alto mientras cerraba los ojos, intentaría relajarse y tratar de no pensar que la persona por la cual había sufrido por años, no estaba al lado suyo, logrando hacer un revoltijo en su interior. 

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⏰ Última actualización: Nov 26, 2019 ⏰

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『ɴᴇᴠᴇʀ  ꜰᴏʀɢᴇᴛ』| Jackbum/JaesonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora