HERA PEVERELL | ❝Tengo la sensación de que prefieres llorar por alguien con quien posiblemente jamas puedas estar que intentar ser feliz con alguien con quien puedas estar❞
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LIBRO #1 de la saga WAR OF HEARTS
➳ MARAUDERS ERA
SIRIUS BLAC...
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CAPÍTULO DIECISIETE
❛SIEMPRE BRILLARAS❜
EL DIA DE LA BODA HABÍA LLEGADO, Hera sabia que Bella estaba como loca ya que Narcissa le había mandando una carta explicándole con detalles las ganas que tenía de desollar viva a su hermana mayor y que en cualquier momento iba a lanzarle un petrificus totalus para que se quedara callada un rato.
Hera también estaba nerviosa, ella iría a la boda con el que ella consideraba el amor de su vida, no podía evitar pensar en que algo saldria mal ese día pero solo era su lado pesimista queriendo ponerla mas nerviosa de lo que se sentía.
A la mañana ella se la había pasado en su cuarto haciéndose mascarillas en la cara para que esa noche se viera radiante, ella quería verse bien para Howard.
Llegada la tarde durmió una pequeña siesta para que no tener ojeras pero luego de unas horas se despertó por culpa de cierta rubia.
—¡Hola, pelirroja sensual! —Narcissa la aplasto y Hera se quejo.—¡Deja de quejarte, que somos dos y debemos comenzar a prepararnos!
—Pense que no vendrías. —Hera empujo a Narcissa a su lado.
—Yo nunca te fallaría, amiga. —las dos se quedaron mirando frente a frente.—¿Como han estado las cosas por aquí?
—Como siempre, Cissy.
—Se que es tu padre, pero el no te merece como hija. —Narcissa acaricia la mejilla de Hera.
—Tu crees que nadie me merece, Narcissa, ni siquiera tu.
—Es lo que creó. Eres demasiado buena, asombrosa, una leal amiga, no se me viene a la mente porque alguien quisiera hacerte daño.
—Tu te has ganado todo mi cariño, Narcissa Black.
—Deseo besarte.
—Entonces hazlo.
—Queda entre nosotras ¿entendido? Nunca le diremos a nadie ni a Regulus.
—Esto muere aquí, Cissy.
Narcissa se levantó para ponerme seguro a la puerta y luego volvió a acostarse.
—Que este beso no cambie nada entre nosotras ¿ok? Es solo un beso entre amigas.
Hera asintió.—Si, Cissy.
La rubia cogio de las mejillas a Hera y le dio un beso corto en los labios, al principio fue totalmente extraño para ambas pero Narcissa quería demostrarle de alguna manera su cariño hacía su mejor amiga, las dos dejaron sus labios quietos hasta que Cissy tímidamente los comenzó a mover con lentitud sobre los de Hera, esta respondió de la misma manera. Narcissa no estaba acostumbrada a besos lentos, los de Lucius y ella eran salvajes y en su mayoría de veces terminaban en sexo.
