Castiel

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Narra Castiel

Sam me había llamado tan solo hace unos minutos y ya me encontraba de nuevo en la carretera conduciendo para encontrarme con el menor de los Winchester. 

Luego de haber dejado el bunker no me había comunicado con los Winchester, en específico con el mayor de ellos, solo por un pequeño problema de comunicación gracias a este aparato del infierno llamado celular y por el que ahora Dean estaba enojado conmigo. 

Una vez llegué a mi destino pude observar a Sam afuera de un bar esperando por mí, salí del auto y me acerqué a saludarlo, en mi interior guardaba una pequeña esperanza de ver también a Dean el día de hoy, pero sabía que con lo testarudo que es Dean, jamás iba a aceptar que comenzó una pelea por nada.

-Hola Sam- dije dándole un rápido abrazo.

-Hola Cas, ven vamos adentro- dijo dándose paso al pequeño bar.

Camine tras de Sam hasta llegar a una pequeña mesa al fondo de este, nos sentamos en silencio frente a frente hasta que Sam decidió hablar.

-Tenemos que hablar- al notar mi mirada confundida siguió hablando- Sobre Dean.

De mis labios salió un pequeño “oh” silencioso. 

Sin previo aviso sentí una pequeña punzada en mi mano izquierda, acompañado de un sutil jalón, observé mi mano y no vi nada fuera de lo común. 

-El punto es que- Dijo Sam llamando mi atención- Dean te necesita más de lo que lo necesitas tú a el- soltó el menor de los Winchester sin ni una pisca de duda en su voz.

-No entiendo a qué te refieres.

-Luego de la discusión de la otra noche Dean se ha comportado diferente, apenas y estaba saliendo de su habitación. De alguna forma salió un caso que involucraba a una amiga de Dean y por eso estamos en este pueblo, si no fuera por eso nunca habría vuelto a salir a la luz del sol hasta que tu aparecieras.

Tras las palabras de Sam no podía dejar de sentir un sentimiento creciente de satisfacción en mi pecho ¿O tal vez era felicidad?

-Lo que busco decir es que, se el impacto que tienes en la vida de Dean, se lo que significa para ti y sé que para Dean tu significas mucho igualmente- dijo Sam con una voz segura- te pedí que vinieras porque quiero que hables con él. Dean no está enojado realmente, solo está haciendo uno de sus berrinches de adolescente. 

-Sam, no creo que Dean quiera hablar conmigo, entiendo lo que estás diciendo, pero las cosas no son tan fáciles entre Dean y yo.

Ahí está de nuevo, un jalón en mi mano izquierda, pero esta vez sentí más específicamente un Jalón en mi meñique, esto se está tornando más extraño de lo normal y no entiendo nada.

-Solo te pido que hables con él, sé que es testarudo, pero estoy seguro de que te escuchará.

De pronto sentí algo extraño, más fuerte que antes, no era un jalón simple, sentía una fuerza más grande, podía sentirla cerca, podía sentir algo observándome.  Empecé a observar todo el lugar, cada esquina con tal de encontrar algo.

Sentí otro jalón en mi mano y dirigí mi mirada hacia el lugar donde provenía, no podía observar nada, pero sentía que estaba ahí, no sé qué era, pero definitivamente era muy fuerte la energía y lo único que quería era saltar de mi asiento e ir por ella.

-Cas-dijo Sam interrumpiendo mis pensamientos- Se que sientes algo más que amistad por Dean.

Me quede en silencio, es verdad que sentía algo por Dean, pero algo que me ha enseñado la vida, es que, si un hombre pasa la mayoría del tiempo coqueteando con camareras, es porque no quiere nada contigo.

-yo…

-También sé que Dean siente lo mismo por ti- Dijo Sam interrumpiéndome.

Y ¿si es verdad? Dean y yo hemos compartido momentos no exactamente de un par de amigos que pasan el rato. Se lo que siento por él, aquí la pregunta es ¿Dean será capaz de afrontar sus sentimientos?

-Dean no sabe de qué sospecho de lo que sientes por él.

De pronto sentí algo, una proximidad, una sensación de que alguien estaba cerca, sentí un pinchazo en mi mano y luego una extraña energía viajo por todo mi brazo hasta mi pecho, de pronto pude sentir una energía, la energía de Dean, sentí su cercanía, sentí que tenía que ir a buscarlo de inmediato.

-Sam, debemos irnos- dije mientras me levantaba de mi asiento.   

- ¿Qué pasa Cas?

- Es Dean.

A lo que Sam escucho el nombre de su hermano mayor se levantó rápidamente.

Sam entró tras de mi en el auto y conduje lo más rápido que pude hasta el motel donde se hospedaban los hermanos.

Estacione el auto junto al impala y corrí hasta la habitación, abrí rápidamente la puerta y busque con mi mirada a Dean.

Fue cuando lo vi en la cama y nuestras miradas se encontraron, no sé qué fue esto que sentí, no entiendo bien que pasa en mi interior, pero mi primer impulso fue correr a sus brazos.

- ¿Estas bien? - le pregunte separándome del abrazo.

-Mejor que nunca- Contesto Dean con una gran sonrisa.

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y llegó la segunda parte
lo siento la demora solo esperaba a que más gente la leyera unu

luego de este viene el final, pero esperare a tener más votos para publicarlo

Hilo Rojo [Destiel] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora