El Pecado del Ángel

2 - Existe la caja de pandora dentro de nosotros

Notas del cap:

Hahahah se me olvido decir que esta historia no tenía ninguna intención de ser irrespetuoso con los creyentes ni nada por el estilo... solo es un fanfic ¬¬ una historia ficticia creada solo para entretener...

Lol, me puse a preguntarme... ¿Ahora qué publico? ¿El siguiente de suggar o el siguiente de el pecado del ángel? Y que creen... hahaha, pues gano el pecado del ángel hahahahha lol, ok ya, me calmo

¡A leer!

2 - Existe la caja de pandora dentro de nosotros

A sus ojos les tomo un tiempo el poder acoplarse a la iluminación que había dentro de aquella habitación, podía sentir un clima cálido y agradable, podía sentir una suaves cobijas y una cama realmente agradable de no ser que, al tiempo que regresaba su estado de consciencia, también volvía su propio dolor y consideración a su lastimado cuerpo. Sus ojos, que lentamente se iban abriendo, se cerraron en pos de su dolor, aunque, al tener sus ojos cerrados y su mente hecha todo un lio, también percibe un suave aroma a chocolate o algo dulce, parpadea curioso, nunca había olido algo tan dulce, se pregunta si sabrá igual a como huele...

Ahora es su estomago el que parece protestar en busca de alimento. Quiere gruñir pero hasta el tratar de abocar a su voz parece una tortura imposible de controlar, toma un poco de aire, tratando lentamente de mover su cuerpo... siente todo adolorido, de hecho, incluso el poder respirar parece que le cuesta trabajo, aunque, tan pronto como logra, por lo menos, con ayuda de sus codos, sentarse en la cama, también nota que hay vendas por todo su cuerpo, no solo eso, su ropa blanca y dorada, pulcramente limpia y perfecta ahora se encuentra desaparecida de su cuerpo; solo hay una enorme camisa verde con el logo de un partido político que tiene por fondo un tucán tal vez... El vaticano observa esto confundido; la camisa es demasiado grande, uno de sus blancos hombros sobresale de entre la tela y también, eso le permite ver parte de las vendas que cubren su cuerpo

-¿Qué es todo esto dios mío?- pregunta bajito el country observando preocupado la situación, pasando con cuidado una mano vendada sobre su pecho, sintiendo las vendas rodeando buena parte de su cuerpo o que tampoco tiene ropa interior y que sus piernas también están cuidadosamente cubiertas por vendas y curitas; quiere rascar su mejilla y nota también una gasa colocada ahí con cuidado, suelta un quejido cuando, al tratar de hacer más presión, se termina lastimando sin desearlo

-¡Estas despierto!- escucha una voz alegre que le hace pegar un brinco y alzar la mirada con velocidad. Al momento se arrepiente ante su dolor, pero su mirada sorprendida encuentra a un tricolor que siempre había visto a lo lejos y que nunca le había prestado completa atención... un tricolor en verde blanco y rojo con escudo de águila que le mira y sonríe alegremente, ahora notando una bandeja con comida caliente y que entra con trabajo por la habitación

-¿Cómo te encuentras Vaticano? Te ves muy herido ¿No preferirías estar en cama otro poco más?- le llega con preguntas que llueven de un modo grácil, no se siente tan invasorio como pensaba que sería alguien como él, La ciudad del Vaticano solo observa en silencio las acciones del contrario, como, con una gentil sonrisa se acerca y deja sobre sus piernas una pequeña mesita donde trae el desayuno, El Vaticano puede ver claramente un par de huevos fritos, un poco de tocino, un juego, fruta, un atole, pan de dulce, pan blanco, unas cuantas tortillas, sopa, cubiertos, una servilleta y por decoro, un pequeño florero con dos rosas, una roja y otra blanca... un detalle a tomar muy en cuenta se dice el country de dos colores observando maravillado la escena y luego volviendo la mirada al tricolor que luego de verse unos momentos a los ojos, se pone ligeramente sonrojado y rasca su cabeza desviando la mirada hacia el techo al tiempo que se ríe torpemente