Tony Stark el mercader de la muerte, así era conocido el heredero de Industrias Stark; la primera línea de defensa y primer proveedor de armas no sólo para el ejército americano sino también para el mayor enemigo de éste, una asociación alemana que era conocida como "Hydra".
"Negocios son negocios" era lo que respondía Stark cada que se veía cuestionado por la manera en la que creaba armas más mortales.Cierto día de otoño no tuvo más que viajar a la ciudad de Berlín para encontrarse con Steven Rogers el capitán de Hydra, una junta de negocios que venía aplazando desde el mes de junio y que estaba colmando la paciencia de aquel rubio ya, según la bitácora de vuelo debía aterrizar a las 16:40 pm hora local pero como el clima no se encontraba en perfectas condiciones llevaba más de dos horas esperando la autorización de aterrizar en el Hangar de los alemanes.
- Señor Stark, no sabía que la impuntualidad era una de sus tantas características definitorias - escupió el rubio que lo esperaba al final de la placa de aterrizaje - sigame
- Cariño soy muchas cosas menos impuntual, pero el clima de mierda no ayudaba mucho así que cállate - no estaba de humor para que un rubio de ojos color fuego comenzará con sus palabrerías - y no voy a seguirte, necesito un lugar para calentarme, yo no soporto estas temperaturas tan bajas
Steve solo vio como Stark se quedaba ahí parado, entendió que no eran temperaturas a las que el castaño estaba acostumbrado pero tampoco iba a ceder a la primera - ¿Sí sabes quién mierda soy yo? ¿Verdad? Soy Steven Rogers el capitán de todo esto - agitó sus brazos - y para ti soy el Capitán, Capitán Hydra
- Mucho gusto Capitán Hydra, pero creo que aquí el que no sabe con quien está hablando eres tú. Soy nada más y nada menos que Anthony Stark tú me conoces como el mercader de la muerte, y soy yo quien tiene de pie a tu maldita organización así que te callas y me llevas a un lugar donde pueda calentarme - justo en ese momento era tierra contra fuego, ninguno de los dos parpadeaba ni siquiera se veía el movimiento ligero de sus pechos al respirar -
-Largo todos, llevare al señor Stark a su maldita habitación antes de iniciar la reunión. ¡Fuera! - gritó el soldado haciendo que todos se dispersaran. No iba a dejar que un americano fuera hasta ahí a imponerse sobre él así que lo tomó por el antebrazo y lo arrastró lejos de todos.
Al cerrar la puerta de metal que aislaba el frío fuera de esa habitación Stark curveo los labios, había ganado una vez más.
-¿En serio no sospechan nada? - tiro su saco a la cama que se encontraba ahí en el cuarto mientras caminaba a paso lento al rubio - eres más inteligente de lo que pensé, capitán, mi capitán - pegó una de sus manos al pecho del más alto y recorrió esa parte de su anatomía despacio.
- Me vale una mierda si sospechan o no, ansiaba tenerte aquí, quiero tenerte debajo de mí. Tengo tanto que darte - tomó la mano del menor y la guió a su propia ereccion - todo esto es por ti y para ti, claro espero que me tengas un arma excelente, una que me permita terminar con los americanos
- Mi amor, crees que viaje hasta acá solo para tenerte entre mis piernas, por mucho que ame como me tomas y reclamas como tuyo tengo grandes noticias pero ahora - apretó en un puño la ereccion de su capitán - deja de hablar del jodido capitán América y concentrate en mí, te quiero aquí - ladeó el cuello dándole un acceso total a Steve - follame capitán
- No tenias que pedirlo - en un movimiento salvaje Steve tomó de las caderas al castaño y lo lanzó sobre la cama, y como si de un trapo viejo se tratase rompió las caras prendas que vestían a su amante.
Quizá nadie lo sabía, quizá alguien lo intuía pero cada vez que el pisaba la torre Stark en Nueva York y cada que Anthony se encontraba en Berlín ellos se entregaban hasta poner al límite a sus cuerpos.
Quizá no pensaban que la mejor arma que podría tener Capitán Hydra eran los besos, caricias y la piel de Stark, Steve estaba loco por ese par de ojos color chocolate, por esa piel canela y por ese hermoso hombre que podía pedirle lo que quisiera.
Tony por su lado, sabía que Steve haría lo que él quisiera.
Le quitaría las piedras del camino y lo dejaría crecer, lo haría superior y es por eso que cada que se veían tenían sus mismas líneas antes de irse a la cama y las mismas ya están ahí.
- Steve - llamó Stark entre jadeos, pues era consciente de cómo su amado se perdía en su interior - Steve, Sam Wilson me amenazó - y con esas palabras sintió como los dedos de su amante se incrustaban en sus caderas -
- Pídemelo Tony y sabes que lo haré - el rubio recargo el pecho en la espalda del moreno y comenzó a besar el cuello del mismo - recuerda que yo moriría y mataría por ti - agregó aquello último entre dientes a nada de llegar al orgasmo.
- Matalo, Steve, matalo - un gruñido salió de sus labios al sentir como la semilla del rubio llenaba su interior.
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Dark Stony One shots
FanfictionUn día dije ¿Por qué no hacerlo? Y entonces comencé Tengo una ligera obsesión con el Dark Stony y con el omegaverse, a veces solo me gusta juntarlo o escribir el lado oscuro de ellos Los personajes no son míos pero si de Marvel