En la antigüedad existieron cuatro razas poderosa en Japón estás eran consideradas los salvadores y protectores de los humanos pero como era de esperarse actualmente sus descendientes venerados pero en la vida cotidiana tratados como iguales. Inuyas...
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Corrió hasta la puerta de donde provenía el aroma de la hanyou que se fue enfurecida, sabia bien que había echo mal en recordarle constantemente su error pero quería desquitarse por a verlo interrumpido pero había olvidado que su querida hermana era tan impulsiva como él.
-Estas segura de lo que dices recuerda que es de tu hermano del que estamos hablando en este momento.--escucho hablar a uno de los daiyokai's ahí presentes del otro lado de la gran puerta de caoba.
-Si, muy segura.--se podía escuchar la determinación en sus palabras en serio estaba disputa a delatarlo.
-¿Y tienes pruebas de lo que hablas?--preguntó uno de los daiyokai's impaciente ya que era un asunto serio porque si esto es verdad tendrán que castigar al peliplateado.
Sakuya asintió sacando su teléfono.
-¡Sakuya!--exclamó molesto Inuyasha entrando por la puerta con su ceño fruncido al sentirse traicionado por su propia familia- ¿enserio estas disputa a hacer esto?- señalo todo a su alrededor.
Una sonrisa con ironía apareció en los labios de la hanyou.--Ya es hora de que aprendamos una lección.--se voltio a verlo y después al consejo.
«¿Aprendamos? ¿Que quisodecirconesode "aprendamos"? »se preguntó mentalmente ante aquellas palabras mirando fijamente la oji-azul y cada movimiento de esta.
-Aquí.--señaló su teléfono.--tengo las pruebas que me pedís.-- con su dedo índice deslizo la pantalla de tras del consejo apareció otra pantalla gigante.
En esta se mostraba una galería con cuatro, carpetas y cada una tenia un nombre pero la que más le intrigó al peliplateado fue una que decía "noabriratodacosta" y también pudo ver que las otras tenían nombres. Inmediatamente se abrió una de las carpetas pero esta tenia más de cincuenta imágenes muy comprometedora donde salía él y otras mujeres.
-Bien.--dijo después de un rato en un incómodo silencio, un peliverde de ojos rojos mirando fijamente la peliplateada.--como veo en las imágenes estas tienen fecha de hace más de veinte o diez años... ¿Porque contar hasta ahora?--preguntó serio recargando sus codos en la mesa.
Llenando de interrogantes al hanyou que miro rápidamente la pantalla e observo las fechas de cuando se tomaron las fotografía más antiguas.
«Escierto...lasfechassondehacetreintaañosentonces ...¿porque hastaahoraahablado?... Seraque... ¿en serio es unamedidadrástica? »pensó lleno de dudas y intriga Iunyasha esperando el veredicto de todos.
