Amistad.

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Mi amistad te la he ofrecido en muchas oportunidades, pero siempre la desprecias y te vas con esos amigos de ocasiones.

Me hace sentir triste, pues te he ofrecido siempre lo mejor, y ahora que tú no aceptas mi amor, te ofresco mi amistad, pero la desprecias con tal horror.

Amistad, la amistad que te ofrezco no la tiene cualquiera y tú te das el lujo de aplastarla, de no conservarla.

Duele en el alma, que ni mi amistad la quieras, pero estoy en calma, porque tengo amigos que no me dan la espalda.

Poemas de un corazón en reparaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora