"Cuando se hace daño a otro es menester hacérselo de tal manera que le sea imposible vengarse."
—Nicolás Maquiavelo.Debían comer algo y pronto.
Draco no tenía idea de cuánto tiempo más lograrían soportar. Recordaba su último trago de agua con dolor. Cada que trataba de pasar saliva, esta se quedaba espesa y se negaba a bajar de su garganta. Hacía calor, mucho.
La castaña sentada junto a él jadeaba por el bochorno; de su frente escurrían pequeñas gotas de sudor que al acumularse caían en picada por toda su cara. Sin nada mejor que hacer, el rubio se dedicó a verlas nacer, crecer y suicidarse en la orilla de su quijada, estas saltaban de su rostro y se estrellaban en el hueco de sus clavículas.
Hermione estaba esquelética, todos los lugares donde alguna vez existió carne suave y apreciable, ahora solo había piel pegada al hueso. Lo más voluminoso que la chica poseía era el vientre, una barriga inflamada por su octavo mes de embarazo.
Draco recordó como era al principio, antes de que pareciera una sandía, el pequeño estómago de su bruja solo era un piquete punzante, nada que requiriera muchos cuidados. Habían logrado avanzar con facilidad durante varios meses hasta que la movilidad de Hermione se vio reducida y los dolores de espalda comenzaron a incrementar.
En el sexto mes la castaña le indico que no podrían aparecerse más o lastimarían a su hijo. Bueno, Draco creía que lo seria, esperaba que fuera un varón, en realidad tenía muy pocas dudas sobre el sexo que tendría su bebé. Todos los Malfoy habían tenido hijos varones y cada uno de ellos había salido fuerte y resistente. Esperaba que su bebé, aún con la carencia de nutrientes, llegara al mundo listo para la pelea. No quedaba de otra. Ambos habían sido descuidados y ahora estaban a punto de traer un niño al mundo en medio de una guerra. Arrepentirse de eso ya era una estupidez, tanto él como Hermione acordaron que lo llevarían a término y una vez que naciera, darían hasta su último aliento para protegerlo.
Así que ahí estaban, ocultos en una cueva de algún lugar boscoso, un poco al sur de Inglaterra. Lograron llegar hasta ahí con éxito luego de que un grupo de carroñeros estuviera a punto de atacarlos. En el camino Hermione había empezado con contracciones que se detuvieron horas después, junto con la llegada de un sangrado que la altero.
Solo contaban con una varita y muy poca experiencia en el ramo médico, el rubio hizo todo lo que estuvo a su alcance, realizo los hechizos de diagnóstico que le indico Hermione, resultando en nada, todo parecía estar estable. Aun así, Draco sugirió que permanecieran ahí hasta que amaneciera, lo cual estaba lejos de suceder.
Con la lucha constante y Voldemort sintiéndose amenazado por Potter, el clima e incluso la salida del sol, cambiaron. Las horas parecían eternamente más largas de lo normal. Lo único positivo era que Hermione al fin se había quedado dormida. Seguramente estaría tan deshidratada como él y eso comenzaba a preocuparle. Recordó haber visto una pequeña laguna no muy lejos, haría no más de diez minutos de ida y regreso y seguro que el agua le caería mucho mejor que la farsa del aguamenti.
Con el cuerpo molido por el ajetreo de meses, el rubio trato de quejarse en silencio cuando al levantarse todos sus huesos tronaron; tomó la varita y antes de alejarse lanzo un par de protecciones.
Camino tan rápido como la rigidez de sus músculos le permitieron.
Al llegar a la zona húmeda, cogió una hoja y la transformo en un pequeño vasito que usaría para llevarse el líquido. Tuvo que resistirse a la tentación de arrojarse al agua para refrescarse, pero todo su cuerpo temblaba de nervios por regresar al lado de su bruja. No se había separado de ella desde que los mortífagos reclamaron a Hogwarts como su hogar e incluso mucho antes, él y la castaña apenas y soportaban estar lejos. Trataban de siempre mantenerse en contacto, sin que nadie supiera nada del amor que había nacido entre ambos en una extraña noche luego de su ronda de prefectos.
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Vindicta *One-shot*
FanfictionEsto se trata de venganza... "Cuando se hace daño a otro es menester hacérselo de tal manera que le sea imposible vengarse." -Nicolás Maquiavelo. One-shot para el concurso "Calendario Dramione 2020" de la página "Citas Dramione" en Facebook.