Prólogo

19 3 0
                                    

Hace unas semanas que el segundo semestre de clases comenzó y la verdad es que ya me estoy estresando de todo lo que tiene que ver con; El colegio. Solo quiero que terminen de una vez por todas las malditas clases.

Por mi yo no volvería a clases nunca mas en mi vida, no me mal interpreten, no soy una excelente alumna pero si me esfuerzo por conseguir notas con las cuales me conformo. Pero nada se compara con leer un buen libro mientras escuchabas musica. Amo leer, si no leyera verdaderamente mi vida seria realmente aburrida. Adoro leer hasta que mis ojos ya no puedan mas. Que mi mente viaje por diversas historias, me hace olvidar de cualquier cosa que pueda estar sucediendo en la actualidad.

Mi abuela decía que estaba enferma, por que no compartía con adolescentes de mi edad. Yo no me consideraba una chica enferma, simplemente me desagradaba estar con personas que no me conocen, por que en cierto modo cuando no estas con ellos, hablan a tus espaldas, las chicas en especial eran expertas en eso y con respecto a los chicos, todos eran unos idiotas adictos al sexo.

Se que en esta sociedad de mierda que tenemos hoy en día, nunca habrá un chico que no piense en sexo todo el día. En los libros que yo leo, el chico cambia por amor, pero lamentablemente esta vida no es una novela romántica, nunca habrá un chico así en la realidad; nunca habrá un chico que cambie por amor; nunca habrá un chico que no use a una chica como objeto sexual; nunca habrá un chico que no piense en sexo. Es lamentable pero es la realidad de hoy en día.

Todos los chicos son unos cerdos, y bueno las chicas no se quedan atrás, por que ellas son las que abren las piernas. No es que yo este diciendo que soy una monja, pero en mi opinión ambos sexos deben de respetar al otro. Y valorarlos por lo que son.

Y por eso es que amo leer, leyendo me alejo de toda esta realidad absurda que es hoy en día y empiezo a imaginar mi propia realidad.

Ahora mismo me encontraba recostada boca arriba en mi cama, mirando perdidamente el techo de mi habitación, hace aproximadamente una hora me desperté de un sueño muy extraño.

Desde que tengo once años, comencé a tener sueños cada noche. Creí que era normal ya que todas las personas sueñan, Pero a medida que los días pasaban me fui dando cuenta de que no era normal, puesto que eran sueños en los que lo que yo soñaba, sucedía en mi vida cuando despertaba. No siempre era el mismo día, podían pasar días, semanas pero lo que yo soñaba si sucedía. El sueño del cual me desperté hace poco, no lo recordaba lo cual me pareció muy extraño. Forcé mi mente tratando de recordar, pero nada pasaba por mi cabeza. Estaba en negro.

Estaba tan desesperada e intrigada por saber de lo que se trataba pero solamente yo no podía recordar nada.

New experiences |H.S| EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora