Capítulo 66: Lucha hasta la muerte

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¡Auge!

El gran pie del gigante de arcilla se estrelló contra el suelo. Yan Fuxing saltó al aire, esquivando su pisotón.

Sin embargo, una de las rocas que voló en el aire por el impacto se estrelló contra su pecho. De repente le resultó difícil respirar, e instantáneamente cayó al suelo.

Los ojos de Yan Fuxing se llenaron de desesperación mientras veía el pie del gigante corriendo hacia él nuevamente.

En ese momento, un aro de metal voló, enganchándose con Yan Fuxing y alejándolo, permitiéndole esquivar por poco ese ataque.

Sun Jizu lo había salvado.

Sun Jizu gritó cuando agarró su aro del aire, "¡Tenemos que movernos!"

"¿A dónde vamos?", Preguntó Yan Fuxing.

"¡Perseguiremos a Zhang Sheng'an! ¡Se fue por ese camino! "Sun Jizu señaló en cierta dirección.

"¡Vamos!", Gritó Yan Fuxing.

Sin lugar a dudas, odiaban a Zhang Sheng'an al máximo de todos los miembros del Equipo Soaring.

Fue ese bastardo que se esforzó por hacer todo lo posible para atraerlos con él.

Cuando escapó, él también era el que más personas lo perseguían.

Sin embargo, los dos solo lo persiguieron por una corta distancia antes de que otra persona bloqueara sus caminos.

Dragón de sequía Jiang Yang [1. Nota: Traduje mal esto como Morning Dragon anteriormente. Debería ser Drought Dragon en su lugar. Disculpas si esto confunde a alguien].

Era el joven que había sido enviado volando por la palma del Gigante de arcilla desde el principio. Sin embargo, no murió, y ahora regresaba al campo de batalla por su propia voluntad.

En realidad no aprovechó la oportunidad para irse.

Una sonrisa salvaje apareció en la cara de Jiang Yang cuando salió frente a ellos, bloqueando su camino hacia adelante.

Se lamió los labios. "Dos pollos débiles. Si tienes la habilidad, ven a buscarme.

Yan Fuxing y Sun Jizu se miraron el uno al otro antes de atacar simultáneamente.

Los aros agrietados de la Tierra zumbaron mientras volaban por el aire, poseyendo suficiente poder para dividir grandes rocas.

La lanza de viento galopante apuñaló en el aire con un impulso majestuoso, que contenía mucho más poder que antes.

Sin embargo, cuando se enfrentó a los dos aros y la lanza, Jiang Yang reveló una mirada de desdén.

"Errores insignificantes", dijo descuidadamente.

Luego, extendió su mano derecha.

Arañó el aire con la mano, que era extremadamente ancha pero tenía dedos muy cortos.

Agarró los aros de tierra que crujían volando frente a él directamente desde el aire.

Los aros para romper la tierra eran bastante poderosos, considerando que podían romper grandes rocas. Sin embargo, todavía podía agarrarlos solo con esta garra, como si ese poderoso impulso simplemente no existiera. Luego balanceó el aro por el aire, bloqueando la lanza de viento galopante antes de repetir el mismo movimiento por segunda vez para derribar el segundo aro.

Solo estirando su mano, había neutralizado completamente sus ataques.

Arrojó el aro que hacía crujir la tierra a un lado y rió fríamente. "Vamos, sigue adelante".

Trono Divino de Sangre Primordial: Volumen 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora