Veces (Stolitz) {Doubleshot} [Helluva Boss]

2. Like a single jingle

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Al final terminamos tomando el pedido de Stolas antes que el de la otra cliente puesto que fue treinta veces más sencillo matar a un cerdo político que a un militar entrenado o lo que sea, tenía cómo mil hombres colgándole de los huevos, ugh...

Igual cumplimos ambos encargos y ya teníamos un cuerpo más embolsado, pero estábamos agotados por haber tenido que traer el cuerpo con nosotros o si no el ejercito que le acompañaba nos habría perseguido.

—Bueno, ahora que está muerto, tómense algún vaso de agua o algo así mientras hago una llamada y volviendo lo descuartizamos. — di un respiro camino a la oficina. Tomé mi celular y seleccioné el contacto de Stolas, por algún motivo la tensión no bajó mucho de escuchar su voz apenas contestar.

—Oye Stolas, ya acabamos ayer con el miembro político que decías querer eliminar, le atiné perfectamente a tus especificaciones tengo que advertir... ¿Stolas? — los sonidos de arrastrar sábanas y una voz reconocible estaban algo lejos pero rápidamente mis pensamientos fueron interrumpidos por su voz.

—Oh Blitzy, que bueno que hablas, disculpa, estaba dormido y recién me despertaste... — una risa pícara y extraña sonó al fondo, comencé a sospechar ligeramente de lo que pasaba.

—¿Estoy en altavoz?

—Oh no, pero bueno, ya sabes cómo soy cuando me relajo mucho después de comer~

—Entonces estás con alguien más(?

—Créeme, estaba sólo hace un par de minutos, pero puedes unirte cuando tú quieras~ incluso ahora podría esperarte~ ¿Quieres que lo haga? ~

—Wo...Es decir que tú realmente solo necesitabas ser cogido sin importar quién.

—¿Es un rastro de celos los que oigo en tu voz?

—Claro que no.

—Haz lo que te digo Blitzy~ — por algún motivo me sentía sumamente enojado y perdí rápidamente mi paciencia.

—No, lo único que me dices es que igualmente lo quieras o no igual vas a putas joder a quien quieras ¡Pues yo estoy para decirte que me importa una reverenda mierda que me hayas querido chingar tanto tiempo para al final pagarle a una ramera!

—Blitzy-

—¡Y qué se una tu puta madre! ¡Haz el maldito depósito de tu encargo y desaparece! — colgué de golpe y estrellé la pantalla del teléfono con el escritorio de mi oficina, tomé una bocanada de aire antes de arreglar mi cuello y accesorio a la par, abrí la puerta para ver el rostro atónito de ambos demonios rojos bebiendo agua, les alcé la ceja extrañado mientras yo también tomaba un vaso para beber. — ¿Qué? ¿Hoy es convención de vasitos rojos?

—Señor... — comenzó "mi empleado del mes".

—Dime Moxxie.

—Recuerdo todo lo que me dijo hace unos días sobre cómo es que podemos llegar al mundo de los vivos y creo que debería preguntar si realmente debemos preocuparnos sobre su discusión con este demonio.

—¿También escucharon mi conversación está vez? — el demonio de cabello blanco me entrecerró la mirada.

—Con todo respeto señor, incluso el edificio de al lado escuchó su "conversación"

—¿Las comillas por qué?

—Claramente, usted acaba de... Hacerle un ataque de celos por teléfono, piénselo bien, si resulta ser de él el libro, ¡¿no cree que con el poder que tiene puede volarnos a todos aquí?! — dejé salir una nerviosa risa bien disfrazada de desinterés.