capitulo 31

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Los meses pasaron, Naomi volvió a Bogotá junto los chicos de Morat, la madre de Naomi decidió ir a la casa de Naomi en España para conseguir un mejor trabajo, ahora Naomi vive sola en Bogotá, en su antigua casa

Con el pasar de los meses, todo volvió a la normalidad, los chicos ensayaban mucho, Naomi se volvió a encontrar con sus amigas, Laura, Clara y Romina

Todos estaban muy felices con el regreso de Naomi, incluso los padres de Villa, Naomi era una luz en la vida de todos, ella tenía mucha vida, era alegre, positiva

Todo parecía ir muy bien, pero como ya todos sabemos y ya hemos dejado claro, el destino es muy caprichoso....

Isaza: Villaco, ¿va a venir a ensayar?

Villa: si, emm...seguro

Simon: ¿Que le sucede?, Últimamente lo he estado viendo un poco raro

Villa: ¿Raro?, ¿Yo?, Por favor, déjense de tonterías

Martín: si tu dices

Villa: huy, miren la hora, tengo que ir con Naomi, nos vemos luego

Isaza: adiós papo, mándele saludos

Villa subió a su auto, con dirección a casa de Naomi, algo no andaba bien, Villa sintió un par de punzadas en su pecho, le dolía un poco, empezó a toser un par de veces

Villa: tal vez, es el frío

Se dijo a si mismo, luego de 15 minutos ya estaba en la puerta de la casa de su novia, esperándola para ir a almorzar

Naomi: hola mi amor, ¿Cómo estás?

Villa: bien linda, ¿Y tú?

Naomi: bien, ya estoy lista

Villa: pues vamos, por cierto, los chicos te mandan saludos

Rieron y luego subieron a el auto de Villa, ellos hablaban sobre sus vidas, sobre lo que han estado haciendo últimamente, pero luego Villa empezó a toser una y otra y otra vez

Naomi: amor, ¿Te encuentras bien?

Villa: si, ¿Porque?

Naomi: parece que estás enfermo, tienes que ir a el doctor

Villa: no te preocupes, tal vez es solo un simple resfriado, ya verás que con una pastilla se me pasará

Naomi: si tu dices

El día transcurrió normal, claro, sin incluir que a Villa le dolía mucho el pecho y tenía mucha tos

Naomi: ¿Seguro que no quieres ir a el médico?

Villa: estoy bien, no va a pasar nada, ahora entra, está haciendo frío aquí afuera

Naomi: está bien, adiós lindo

Besó su mejilla y luego entro a su casa, Villa subió a su auto y otra vez sintió como una aguja estuviera pinchando su corazón

Villa: ¿Porque me dolerá así?

Villa arrancó y fue a su casa, dónde de recostó en el sofá de su casa, él se preguntaba qué es lo que pasaba, nunca había sentido un dolor así, incluso consideró ir a el doctor, su dolor se hacía cada vez más fuerte

Su hermana Laura entró por la puerta de la casa, y al ver a su hermano, recostado en el sofá, quedó perpleja

Laura: Juan Pablo, mírate, estás pálido

Villa: ¿Quién?, ¿Yo?

Laura: si tu, vamos de inmediatamente a el médico

Villa: no Laura, estoy bien

Laura: no es cierto, yo te conozco, no hagas que llame a papá y a mamá

Villa no tuvo otra opción que obedecer a lo que su hermana le decía, a el no le gustaba ir a el médico, es más, lo odiaba, pero muy dentro el sabía que era por su bien

40 minutos después, Laura había llegado a el hospital junto a su hermano menor, Villa estaba un poco molesto, (de verdad odiaba ir a el doctor)

Laura: en 5 minutos nos van a atender

Villa: esperemos que sea rápido

Laura: no exageres, es por tu bien

Villa: estoy seguro que solo me darán unas pastillas para el dolor, eso es todo

Laura: sea o no sea así, es necesario, por tu salud

Villa: como digas Lau

Minutos más tarde, ya habían entrado a el consultorio de el doctor, le explicaron los síntomas de Villa, el doctor muy sorprendido solicito urgentemente que Villa hiciera varios estudios ese mismo día, Villa, al escuchar eso, sintió una leve preocupación ante todos esos estudios debido a sus síntomas, pero no había otra opción

Tres horas después.....

Doctor: señor Villamil, Ya están completos todos los exámenes, los resultados estarán dentro de una semana aproximadamente, de todos modos nosotros lo llamaremos cuando estén listos

Villa: okey, muchas gracias

Laura y Villa salieron de el hospital, un poco preocupados tras los exámenes de Villa

Villa: Lau, ¿Voy a estar bien?

Laura: estarás bien Villa, sabes que si

Villa: tengo miedo

Laura volteó a ver a su hermano dentro de aquel auto, Villa estaba con los ojos cristalizados, con una expresión de preocupación que desbordaba por sus hermosos ojos verdes

Laura detuvo el auto y volvió a mirar a su hermano

Laura: todo va a estar bien Villa, ya lo verás, estarás bien

Villa: gracias Lau

Laura: no digas nada, ven aquí

Se abrazaron y fue uno de los abrazos más cálidos que Villa había sentido en su vida

A tu lado, es mejor (Juan Pablo Villamil, Morat)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora