Nuestra Historia Es Infinita •Sebastián Villalobos• [3T De Nuestro Libro]

54. Perdón

P.D.V. Sam

Sebas y yo estábamos viendo aun películas, esta tarde había sido diferente y me gustaba

Villalobos ya estaba más calmado y ya casi no lo notaba ebrio,  aún me siento culpable por que por mi culpa se molesto así y tomo como lo hizo

-Sebas:¿En que piensas nena?-Me distrajo de mis pensamientos

-Sam:En nada amor-Lo mire

-Sebas:¿Estas segura, nena?-Tomo mis manos

-Sam:No, bueno es que pensaba en lo que paso hace un rato cuando llegaste todo ebrio y enojado me da miedo pensar que por tus arranques de enojo te vaya a pasar algo-Lo mire preocupada

-Sebas:Eso no pasara mi amor, prometo que ya no tendré esos arranques, nada me va a pasar nena te lo aseguro ¿me crees? ¿Confías en mi?-Me miro yo suspire

-Sam:Si amor te creó y confió en ti cariño-Le sonreí un poco

-Sebas:Te amo princesa-Acorto la poca distancia que nos separaba y beso mis labios yo le seguí el beso este se volvió apasionado, sus besos bajaron a mi cuello, y con su manos empezó a desabrochar mi blusa yo empecé a desabrochar su camisa y después el se la quito también hizo lo mismo con su pantalón yo me quite la falda que traía-Eres preciosa jamas me cansare de decírtelo-Miro de arriba hacia abajo mi cuerpo

Yo desabroche mi sostén, el volvió a besar mis labios con pasión, me recostó con suavidad en el sofá y se puso encima de mi con mucho cuidado como si yo fuera una muñeca de porcelana y me fuera a romper, beso mi cuello yo acariciaba su pecho sus abdominales marcadas, me saco las bragas que traía y después el se quito su bóxer, acariciaba mis muslos con ternura y a la vez desesperación sus besos regresaron a mis labios, el de un momento a otro entro en mi feminidad ambos gemíamos de placer bese su cuello y después mordí un poco esa zona sus manos tocaban la parte de mi espalda las embestidas empezaron a ser más fuertes gemíamos más que antes, algunas gotas de sudor resbalaban por nuestro cuerpo, Sebas mordió mi labio inferior, las embestidas eran ahora más salvajes y después de unos minutos el orgasmo llego su hombría salio de mi feminidad, ambos respiráramos muy fuerte necesitábamos descansar el sin querer se callo del sofá

-Sam:¿Sebas estas bien?-Me senté en el sofá

-Sebas:Si nena-Rió un poco, se levanto del suelo y se acostó en el sofá-Ven-Estiro su mano-Me acoste sobre el pero con delicadeza para no lastimarlo y nos tapamos con una manta que estaba en el sofá el y yo nos mirábamos ambos suspiramos y reímos

-Sam:Te amo-Bese sus labios con ternura

-Sebas:Te amo demasiado, estuviste increíble como siempre

-Sam:Ambos-Sonreí pícaramente

Esto fue increíble, no fue planeado casi siempre lo es y me encanto que fuera así espontáneo en un día cualquiera a veces lo tenemos que planear por que los niños siempre están aquí

-Sebas:Si tienes razón-Coloco sus manos en mi cintura-Eres tan perfecta, me encanta que seas mi esposa

-Sam:Y a mi que tu seas mi esposo-Acaricie su cabello-El mordió con suavidad mi labio inferior, coloque mi cabeza sobre su pecho y suspire

Al día siguiente…

Desperté gracias a los rayos de sol que se colaban por la cortina, talle mis ojos para despertar mejor me estire vi que Sebas no estaba en la cama, salí de la cómoda cama, me coloque la camisa blanca de Sebas y la abroche me calce con mis pantuflas salí de la habitación, baje las escaleras  fui directo a la cocina Sebas estaba haciendo el desayuno