🌟❤Don't Fall In Love❤🌟 (Ace y tu) [TERMINADA]

Especial no. 2

¿Adivinen quién ya tiene sus vacaciones?

¡Su escritora favorita!
O eso creo ╥﹏╥

Como sea, aquí su especial navideño que tiene relación con el anterior. Espero lo disfruten y si no lo recuerdan, les pido lo lean de nuevo. Continuemos...

—Finalmente llegas — anunció Sabo con un tono de voz demasiado bajo, sabía de dónde venía —. Tu y yo iremos a cenar con los amigos de Luffy.

—¿Y Luffy? — preguntó Ace, Sabo negó con la cabeza —. Mi hermano es un pequeño idiota, esto no es su culpa.

—No fue de nadie, Ace, ni siquiera tuya. Luffy también la quería, no por cualquier cosa también la llamaba "hermana".

—Hablaré con él.

—¿Puedes hacerlo?

—Si. Claro que si.

Sabo asintió y continuó empacando la cena y algunas prendas para él y sus dos hermanos. Mientras tanto Ace subió hasta la habitación de Luffy, quien se encontraba envuelto en sábanas con los ojos húmedos y rojos, realmente se sentía lamentable. El año anterior fue duro para él (y más para Ace) poder digerir la inesperada noticia, especialmente después de medio año junto a ella. Tal vez no fue nada más para él como para su hermano, pero ella al igual que ellos lo consentía, aconsejaba y mimaba incluso más que Sabo, le encantaba tanto pasar tiempo como si fueran una verdadera familia, especialmente porque Koala no era un bonito remplazo, nadie podía remplazarla nunca.

—Luffy — susurró Ace —. Tienes que vestirte, nos iremos pronto.

Luffy no dijo nada, tan solo negó suavemente. Ace suspiró con algo de cansancio y agotamiento, no solo por el fuerte frío que hacía afuera y que le había helado la garganta, sino por las tres largas horas que había pasado llorando junto a ella. Pero ya no era momento para seguir pensando en aquella desgracia pasada.

—Vamos, Luffy. Tus amigos estarán muy tristes si no vas con nosotros — volvió a insistir, pero Luffy continuaba igual —. Se que no es un buen momento, yo tampoco me siento muy bien. La extraño, extraño tantas cosas de ella...

—Ace — habló con un hilo de voz, de sus ojos salían lágrimas, grandes lágrimas que podían compararse con ojos —. Ace... — habló de nuevo con tono más agudo y limpiándose la cara —. Yo quiero... Yo quiero verla una vez más...

Ace sintió un enorme nudo en la garganta, si no tuviera orgullo y si no estuviera con su hermano menor en el mismo estado o peor hubiera repetido su llanto anterior. Pero debía animar a Luffy, para eso subió hasta su habitación.

—¿Recuerdas cuando Sabo tiró accidentalmente toda la carne que habías tardado tres semanas en comprar?

— S-si. Lo recuerdo.

—¿Recuerdas que te dijo (t/n)_____?

— N-no.

—Ella dijo: en la vida hay cosas buenas y cosas malas, nunca sabrás cuando pasará una u otra así que debemos disfrutar las buenas y aprender de las malas dejándolas después en el olvido.

—¡Cierto!

—Entonces será mejor que le mostremos que estamos siguiendo sus consejos.

—¡Tienes razón!

Y Luffy salió de la cama de golpe hasta su armario y vestirse rápidamente. Ace no sabía cómo, pero había logrado convencer a su hermano. La magia navideña, tal vez, no lo sabía y así era mejor.