Las luces iluminaban el amplio salón, la música hacia eco entre los espectadores quienes solo aplaudían con ímpetu por la hermosa interpretación de aquellas jóvenes que tocaban sus instrumentos con delicadeza y armonía.
La mayoría de los presentes eran hombres, miembros distinguidos de la Port Mafia, reunidos ahí para celebrar que la mano derecha de su líder alcanzaba la mayoría de edad.
Osamu Dazai cumplía 18 años, su mentor Mori Ougi había preparado esa pequeña fiesta con el único objetivo de distraer a su aprendiz del duro trabajo que implicaba ser un ejecutivo y que mejor manera de hacerlo que en compañia de una dama perteneciente a la casa de cortesanas de Kouyou, mujeres que se dedicaban a dar entretenimiento a hombres que pudieran pagar sus precios elevados y aún así solo una minoría hacia trabajos de índole sexual, no era un prostíbulo ellas eran damas de compañía.
- ¿aburrido en tu propia fiesta de cumpleaños Dazai? supongo que fue nuestra culpa al haberla hecho una reunión de negocios - la elegante pelirroja tomó asiendo a su lado sirviendo en su vaso un poco más de sake
- descuide Kouyou san, la fiesta es agradable solo que no estoy acostumbrado a este tipo de cosas - no mentía, las falsas palabras de sus subordinados y la insistencia de las bailarinas por pasar una noche con él comenzaba a desesperarlo, hubiera preferido estar en casa intentando otro método de suicidio efectivo - además Mori san dijo que la persona quien sería mi pareja estaria aquí y tenía que verla antes de que él intente formalizar un absurdo matrimonio
- oh, te gustara - una sonrisa divertida se formó en su rostro mientras que de su kimono sacaba un abanico con el que cubrió parte de su rostro - es la cortesana más costosa de aquí, es especial y aún es virgen pues se a estado reservando para ti desde que llegó
De un segundo a otro los murmullos se acrecentaron, la hermosa pelirroja de ojos celestes que acababa de entrar llamó la atención de todos los invitados.
Su cadera se mesia suavemente por cada paso que daba, cubría sus labios de forma fallida con un abanico pero todos ahí ya habían sido cautivados por sus labios carmín, vestia un hermoso kimono de colores oscuros y su cabello estaba decorado con una camelia roja haciendo resaltar el brillo de sus ojos, observo a cada uno de los hombres buscando a aquel chico castaño cubierto de vendas, su cliente especial y cuando sus miradas finalmente se encontraron le dedicó una sonrisa coqueta.
Se colocó en el centro del lugar para tomar el arpa y entonar una suave melodía especial para el moreno, sus dedos se movían con delicadeza sobre las cuerdas creando una tonada que fue compuesta por ella.
- ¿y bien? ¿que te parece? - Osaki sonrió complacida por la perfecta interpretación de su aprendiz, nadie se había percatado de la realidad, había pasado desapercibida por los espectadores.
- es muy linda, ¿ella es de quien hablaba Mori san? - término el líquido alcohólico de su vaso manteniendo la mirada sobre su futura pareja - si ese es el caso usted trata de estafarme Kouyou san, si es quien encontramos cuando tenía siete años en realidad es un chico
- eres muy perspicaz Dazai kun- la música se detuvo, la joven hizo una reverencia y tras ver la seña de su tutora se retiró para prepararse a lo que continuaría- Chuuya es el chico que me trajiste hace once años, el mismo por el que Mori a estado pagando mucho para ti, deberías agradecerle
-ya veo, realmente no pensé verlo aquí el día de hoy - una pequeña sonrisa discreta se formó en su rostro - esta fiesta se a puesto interesante
- tratalo bien Dazai, la habitación es la última del pasillo- dicho esto la fémina volvió a sus deberes con las otras jóvenes - feliz cumpleaños
El ejecutivo se puso de pie para alejarse del sonido, camino por el largo pasillo en busca de la habitación donde el pelirrojo lo esperaba y al llegar abrió la puerta corrediza encontrándolo sobre la cama, esta vez el kimono dejaba ver su blanca piel desnuda, sus piernas y hombros dándole una imagen demasiado provocativa, su peinado era diferente ahora una mariposa decoraba su cabellera, no importaba que se pusiera, él simplemente era perfecto.
- Dazai- el de menor altura le dedicó una pequeña sonrisa señalando su lado para que se acercara - a pasado un tiempo ¿no lo crees?
No recibió respuesta, el castaño se poso sobre su cuerpo empujandolo y obligando que se recueste, sin descaro paso su diestra sobre sus delgadas piernas, se podía percibir la lujuria en sus orbes avellana provocando que su corazón latiera con fuerza
Sus labios se unieron en un beso apasionado, Nakahara había esperado ese momento durante años, había deseado volver a encontrarse con el niño que lo salvó y para ello se había estado preparando solo por ese reencuentro, solo por él.
Los movimientos de su boca aumentaban de intensidad por cada segundo transcurrido, una a una las prendas cayeron al suelo y las caricias eran más desesperadas, el castaño no se negó a hacer suyo al pelirrojo, pues el deseo que existía entre ellos era lo único que tenían en común.
La noche fue larga, la luna fue el único testigo de la pasión y el sentimiento que comenzaba a formarse dentro de su pecho, se entregaron sin temor en alma y corazón, esa noche solo fue el principio de un nuevo inicio en la vida de los dos.
Una vez la mañana llegó el castaño partió, solo era cuestión de tiempo para que pudieran estar juntos una vez más.
ESTÁS LEYENDO
Mi Bella Cortesana ^ Soukoku ^
FanfictionOsamu Dazai es un miembro de alto rango de la mafia Portuaria y en su cumpleaños número 18 deciden celebrar en una de las muchas casa de cortesanas que están a cargo de él, sin embargo esa noche el destino lo reunirá con alguien que creyó dejar en s...