1: un tatuaje, una pista

1.6K 72 4
                                    


"porque...porque la vida se ensaña así con mi familia, no le bastó con llevarse a nuestro padre, si no que ahora se ha llevado a nuestra pequeña hermana menor, mi madre ya no puede con tanto dolor, eso yo ya lo sé...pero no me importa lo que me digan, lo buscare, lo buscare hasta que pague por lo que hizo"

Se encontraba un azabache de 19 años, llorando en la tumba de su hermana, lamentando no poder defenderla, ni siquiera había tenido fuerzas para poder despedirse de ella, y la culpa lo consumía...todo había sido como un día normal, iban a la tienda, en busca de lo que su madre le había mandado a comprar y aunque no lo recuerda muy bien, en un momento todo se volvió borroso, en cuanto puedo recobrar la conciencia, deseo no haberlo hecho, la primera imagen que pudo distinguir fue el rostro de su hermana, llorando y suplicando para que ese desgraciado la dejara de penetrar tan salvajemente, quiso moverse, quiso sacarle a ese desgraciado de encima, pero al darse que cuenta de que estaba atado de pies y mano, con un trapo en la boca lo hizo desesperarse aún más, no podía moverse, no podía hacer nada por ayudarla, cerró los ojos con fuerza, lagrimas cayeron de sus ojos, no quería verlo, no como su hermana era violada, pero sus gritos lo desgarraban, quería que todo eso terminara en ese momento, se escucharon unos ruidos, estaba algo aturdido en ese momento, pero creía que eran sirenas, no estaba seguro, solo recuerda que al parecer ellos comenzaron a gritar, dejando a su hermana en el suelo, todo había pasado muy rápido, tres disparos certeros y a corta distancia se escucharon, y el cuerpo de mi hermana sin vida seguía en el piso, otros gritos se escucharon, uno lo vio consiente, no recuerda si por lo apresurado, por mala puntería, pero la bala solo le perforo un costado del abdomen, luego de eso todo se le había vuelto negro, despertando en el hospital, su madre llorando al igual que su hermanos y sus primos, no recordaba bien todo, pero al preguntar por su hermana, solo se enteró que ya la habían velado, no había podido ir ni siquiera al velorio, ahora que salía del hospital, había podido ir a ver a su hermana... sus recuerdos estaban algo confusos, no lo recordaba bien, pero si tenía un recuerdo en la mente, no se acuerda como eran, quien le disparo, quien mato a su hermana, o quien la violo, solo se acuerda de una cosa, un tatuaje, un tatuaje pequeño en el brazo, "ino" era todo lo que decía, y no le importaba lo que dijera la policía, para él era mucha información , por lo menos por ese momento

-¿Por qué...porque...? maldita sea ¿Por qué? – sasuke lloraba aun frente a la tumba de su hermana, había pasado tres semanas desde que despertó, pero apenas ayer le habían dado el alta, le dolía que la última imagen de su hermana fuera la de sus lágrimas cayendo, mientras otro hombre la violaba

-cálmate sasuke... esto no te hará bien – itachi era el mayor, y aunque a él también le había dolido la pérdida de su hermana menor, pero sabía que no podía derrumbarse, su hermano y su madre lo necesitaban

-cómo quieres que me calme itachi...hinata está muerta, y ese infeliz sigue suelto por la calle – se sentía impotente, desde un principio supo que no podía contar con la policía, no podía ser que en todo ese tiempo, aun no encontraban nada, ni una sola pista

-itachi tiene razón sasuke, no estás bien – gaara, mi mejor amigo desde la infancia, al principio no se llevaban bien, pero al ser igual de serios, sumándole la amistad entre las familias, habían terminado siendo amigos, muy buenos amigos

- itachi, gaara, mejor dejemos a sasuke un rato solo, lo necesita – mikoto uchiha, no iba a parar de llorar, su hija se había ido, pero sabía que el que más sufría su perdida, era sasuke, quien era el que la vio morir, y todo su sufrimiento antes que muriera, los dos asintieron, no muy convencidos, dejando a sasuke solo en la tumba de la ojiperla

-te lo juro...te juro hinata, buscare a ese desgraciado y lo hare pagar...lo juro – sus lágrimas seguían cayendo, y aun cuando continuaban, su dolor no disminuía en lo más mínimo

una venganza puede ayudar a enamorseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora