- - Quiero presentarles a sus nuevos compañeros de clase- Anuncio aquella mujer mayor mientras yo observaba la clase desde donde estaba, allí había todo tipo de adolecentes, los descuidados y revolucionarios en la parte de atrás, los extrovertidos en la parte del medio junto a los demás e interactuando con toda la clase y unos cuantos empollones como solían llamarlos, llenaba la fila delantera – Son ___ y Ashton, se han mudado hace poco y espero que les deis una buena bienvenida – Y antes de que nos diese la señal para presentarnos, la puerta se abrió de repente y apareció un chico teñido de rojo con una chaqueta negra de cuero y una sonrisa la cual no parecía pedir disculpas, es mas, demostraba lo orgulloso que aquel chico se sentía de haber irrumpido la clase - ¿Seria mucho pedirle que llegase a mis clases temprano, Señor Clifford? ¿Quiere que le envié al despacho del director todos los días?
- - Perdóname, Clary – Respondió el tal Clifford y con poca discreción que parecía tener, nos miro tanto a Ash como a mi de arriba abajo deteniéndose mas en mi y, explícitamente, en mis pechos, para luego mírame a los ojos y sonreír mientras me guiñaba un ojo. Cerdo. Y como el los había en todos lados
- - ¿Cuántas veces tengo que decírtelo? Llámame Hooke
- - ¿Llegar temprano a tus clases y llamarte Hooke? Me pides demasiado… Clary
Ah, ya entendía su rollito. El graciosillo de turno.
- - Toma asiento y no vuelvas a molestar, por favor te lo pido- Creo que la Señora Hooke le estaba hasta rogando, ¿Cuan pesado e impertinente llega a ser ese chico?
- - Lo intentare- Termino de hablar y fue hacia su sitio que se encontraba al final de la clase junto a una rubia plástica a la cual sonrió pícaramente
Wow, también mujeriego. No te conozco y ya me sorprendes, Clifford
- - Podéis presentaros- Dijo finalmente la profesora y Ashton me miro a mi para que empezase
- - Pues, um… Me llamo ___, tengo dieciséis años y soy de Australia, Sídney concretamente- Comencé y mire a Ashton para que siguiera.
- - Mi nombre es Ashton y mi historia es igual a la de mi hermana.- Respondió igual de intimidado que yo
- - ¿A ti también te viene la regla?- Pregunto alguien desde el final de la clase. Clifford
- - Señor Cli…
- - No se preocupe, Señora Hooke, la falta de neuronas le hace se incoherente y poco ingenioso - Hable cortando aquella mujer mientras desafiaba a Clifford con mi mirada. Marrón contra verde.
- - Pueden sentarse, gracias- Indico aquella mujer mientras nos señalaba nuestros asientos en segunda fila y la clase estaba sumida en un rotundo silencio. Parecia que desafiar al gran Clifford no era costumbre. Bien, estaba contenta y orgullosa de haber puesto a ese idiota en su respectivo lugar. El subsuelo.
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- - Vamos, M, solo será una hora
- - Una interminable hora
- - No te pongas asi, no seas infantil
- - No es eso, Ash, no quiero ir, no me apetece hacerme notar aquí y ser la hermana de un chico del equipo de baloncesto del instituto no parece que vaya a disimularlo
- - ¿Das por hecho que entrare?
- - Te he visto jugar, podri decirse que ya estas en el equipo- respondi y mi hermano sonrio para después dejar un beso en mi mejilla
- - Ven a verme, me daras suerte
- - Eres tan insistente…
- - ¿Eso es un si?
- - Eso es un puede- me rendi y otro fuerte beso por su parte estallo en mi mejilla
