Acabamos de despertarnos. Debemos bañarnos.
-OH DIOS MIO! -dije al ver que deberiamos bañarnos en un sucio lago.
-Bueno chicos, vallan por sus trajes de baño y al agua -dijo Sole.
Fui y me cambié. El agua estaba fría, de momento me sentí incómoda hasta que los chicos comenzaron a jugar y lanzar agua. La única qué no se bañó fue Sabana, ella se hacía la delicada en todo, no quiso comer la liebre asada de Matt, no quiso dormir, realmente no la entiendo.
La pasamos muy bien. Fue bastante divertido.
Sebas es un chico alto, trigueño, de cabello rubio muy oscuro y ojos marrones claros. Amber es de piel morena, cabello rojiso y ojos azules. Sonia es de piel trigueña, cabello castaño y ojos color miel. Sabana es de tez color durazno, ojos azules y cabello rubio claro.
Después de bañarnos nos cambiamos de ropa. Yo me puse unos jeans negros, unos borcegos y una camisa militar.
Hacía demaciado calor y decidimos comer el pan.
Sole nos dijo que si llegábamos a la playa podíamos encontrar 6 botellas de agua, pero para llegar debiamos atravesar una mini "Selva".
Salimos hacia allí. Fue un viaje muy caótico, sabana siempre se quejaba. Cuando porfín llegamos a la playa, ahí estaban las 6 botellas, en un bote a varios metros de la playa.
-Deben ir a por ellas, cruzando el inestable puente y traer todas las que puedan antes que lleguen los demás.
-Yo seré el primero - dijo Sebas, le pusieron varias sogas, para que si se caía no se golpeara.
Sebas cruzó despacio el puente, llego a el bote y tomó 3 botellas. En el camino se le cayó una y ésta quedo flotando en el agua, la próxima persona debía recogerla, si es que querían tenerla.
- Sigo yo -dije
Me pusieron las sogas y seguí por el inestable puente. Le faltaban varias tablas. Traté de ir lo más rápido, pero pisé una tabla mala y casi caí hacia el agua. Cuando vi hacia abajo estaba la botella que Sebas dejó. Trate de alcanzarla pero mi mano no llegaba. Me estire lo más que pude y dolorosamente tomé la botella. Mire mi brazo, una tabla con astillas lastimó mi brazo, dolía mucho pero decidí seguir, no era nada grave. Llegué a el bote y tome 2 botellas.
Cuando llegue a la playa le dí las botellas a Amber y me tire en la arena. Fue muy cansador tener que cruzar a duras penas 4 metros de un puente todo destruido, con un brazo lastimado y con el otro cargando 3 botellas de 1 litro.
Sebas se me acercó y me ofreció un poco de agua. Acepté.
Sebas se sentó a un lado mio, me miraba con una cara que daba miedo.
- Oye! no me mires así, pareces un acosador. - le dije riendo y empujandolo suavemente.
- es que eres muy bonita.
- Jajaja - reí- supongo que eres de esos.
- Perdón? de cuales? - dijo ingenuo
- Olvidalo
- Ok.. Pero admite que eres bonita.
- Ajá.. Lo que tu digas señorito.
- Me gusta cuando eres así.
- Ja! Eres todo un adulador - dije- así te ganas a las chicas?
- Pues.. Cuando funciona sí - reímos.
Cuando ya pudimos recoger todas las botellas debíamos volver lo más antes posible, ya que una fea tormenta se avecinaba.
Todos nos tomamos de una soga y por un estrecho camino avanzamos uno detrás de otro. Estaba oscureciendo y debíamos apurar el paso, no teníamos linterna. Al cabo de un rato ya estaba completamente oscuro. Tratamos de avanzar por el camino despejado ya que a los costados habían plantas. Pasaron dos horas y llegamos, cuando llegamos la coordinadora me llevó a la enfermería y me curó mi herida. Todos estábamos muy cansados y despues de unos minutos de charla quedamos dormidos.
