La luz del cielo

Plumas identificativas

Querido y agradecido sol del patio.

April , la joven de pelo negro con desgradado de color Rosa, ella era así siempre vistiendo blanco y negro pero sus ojos azules tenían esperanza, Luca en cambio iba encapuchado y sus ojos verde oscuro apagado era horrible mirarle, de pies a cabeza de negro, era la tristeza en persona sin embargo yo tenía esperanza en hacer feliz su vida, a veces pienso como una joven de pelo blanco con desgradado de Rubio podría encajar, aparte tenía heterocromia blanca y amarilla con unas pupilas de estrellas amarillas.
Pasaron las primeras semanas la verdad cada día se veía más feliz a Luca, ya no iba encapuchado aunque seguía igual de amargado.
Una tarde fuimos a la plaza donde una vez tome mi primer aperitivo de la tierra , era la tarde más excelente y divertida de mi existencia.
Nos dirigimos a mis famosos y excelentes churros y compramos bastantes, lo que no sabía era que en ese instante el collar que Edgar me dio comenzaría a vibrar para indicar una noticia, tuve que decirles a mis amigos que tenía que ir al baño, por supuesto esa excusa siempre funciona entre los humanos.
Fui al baño y extendí mis alas cansadas de ser ocultadas para que reinaran un rato, abrí el colgante y por supuesto era para decirme una mala noticia, solo tenía un año para poder hacer feliz a Luca, eso era una desgracia para una persona que quería explorar el mundo.
La verdad el mundo humano era inmenso y llena de emociones que quería conocer.
Bueno, volví con ellos y seguimos comiendo los churros, ví a Luca dar la primera sonrisa de este año e hizo que mi corazón se conmocionara la verdad creo que me estoy encariñando de el y me dolería que el día de la despedida llegará, eso ahora no era lo más importante ya que debería de preocuparme por el presente y no por el futuro.

Mi corazón palpita muy rápido pero sin darme respuestas de lo que esta pasando.

Era mi turno de marcar responsabilidad y decidir irnos, la verdad ya sabía que estaba enamorada de Luka.

Esta vez un impulso me hizo abrir las alas y chocar contra el techo, no sabía que estaba pasando.