🎄Capítulo 03🎄

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- Juro que no me esperaba que eso pasara –Haneul le da un sorbo a su chocolate caliente

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- Juro que no me esperaba que eso pasara –Haneul le da un sorbo a su chocolate caliente. Después de lo sucedido en casa de los hermanos Kim, Haneul alcanzo a su amiga y optaron por ir a una cafetería a tomar chocolate caliente en vez de ir a su departamento-. Esa chaeyoung es una aprovechada y una zor...

- ¡Haneul no digas groserías! –exclama Ah Ra tomando lo último de su chocolate caliente-. Olvidemos el tema por favor.

- Sólo digo la verdad Ah Ra.

- Y lo entiendo pero tampoco es para que la ofendas mujer –dirige la vista a la ventana de la cafetería, viendo las tiendas al otro lado de la calle adornadas con luces y todo lo relacionado con la navidad. La gente iban de un lado a otro mientras caían los copos de nieves sobre ellas. Era muy hermoso-. Además...Jimin puede besarse con quiera.

- Recalcaré que fue ella quien lo besó –Ah Ra volvió a mirar a su amiga-. Bastaba con ver a Jimin para darnos cuenta que no lo disfrutó en absoluto. Enserio mujer, esa chica está loca. Chaeyoung se abalanzó sobre el pobre como si fuera un animal hambriento...Fue asqueroso.

Escuchar eso y ver la cara de asco que tenía Haneul de recordar aquello, lograron que Ah Ra soltara una carcajada por primera vez en la noche, contagiando también a su mejor amiga.

- Lamento interrumpirlas –la risa de ambas cesaron enseguida y Ah Ra abrió sus ojos ampliamente de ver a Jimin frente a ellas-. Hola Ah Ra.

- ¿T-tu que h-haces aquí? –preguntó sin quitar sus ojos de él.

- Haneul me dijo dónde encontrarlas.

Ah Ra de inmediato volteó a ver a la mencionada. Esta vez enserio la mataría.

- ¡Oh! Pero miren la hora –Haneul levanta su muñeca exageradamente, mostrándoles obviamente un reloj imaginario mientras se levantaba de un salto-. Es la hora de ir al baño. Sigan hablando, ya vuelvo.

Haneul tomó su cartera y trotó hasta salir de la cafetería. Jimin y Ah Ra se miraron sin entender lo que acaba de pasar.

- D-debo irme, es tarde –comenta Ah Ra parándose de la mesa-. Fue un gusto verte nuevamente Jimin.

- Quiero hablar contigo de lo que pasó.

- Adiós.

Ah Ra salió de la cafetería sin mirar atrás. Sin embargo, Jimin no se rendiría tan fácilmente. Fue tras ella hasta alcanzarla.

- Déjame explicarte por favor.

- No tienes que explicarme nada –lo mira de soslayo. Su corazón seguía doliéndole. No entendía el porqué de Jimin en querer darle una explicación. Ella sinceramente no quería oírlo, evitaba crearle más dolor a su ya roto corazón-. De verdad no es necesario.

- Pero quiero hacerlo Ah Ra, lo necesito.

- Pero yo no –dijo apurando sus pasos.

- Detente por favor –la detiene colocándose frente a ella-. Déjame hablar.

- Bien –suelta un pesado suspiro-. Te escucho.

- Era a ti a quien esperaba Ah Ra, quería hablar contigo de algo muy importante para mí –por un momento no logra sostenerle la mirada, y sintiendo sus mejillas enrojecer Jimin vuelve conectar sus ojos con los de ella-. Pero chaeyoung apareció de la nada y me beso de repente. Fue algo que no esperaba. Ese beso no significo nada para mí Ah Ra. Absolutamente nada, y eso se lo aclaré a ella.

- Como dije anteriormente, no era necesario la explicación –dijo pasando por su lado-. Adiós de nuevo Jimin.

Al retomar su camino y fingir que sus palabras no le causaron nada ¿Le dolió mucho?, sí, demasiado en realidad. Pero no podía quedarse ahí o se quebraría en cualquier momento. Y no quería eso. Lo amaba, deseaba decirle lo que sentía por él, pero por temor al ser rechazada o incluso que él se burlara de ella, aunque Ah Ra sabía a la perfección que Park Jimin jamás haría eso, él no era esa clase de chico, la llevó a preferir quedarse callada y a evitar salir mucho más lastimada.

- ¡Te amo Ah Ra! –Jimin exclama sintiéndose aliviado de por fin decirle sus sentimientos a la chica que ama. Ah Ra se detuvo en seco al escuchar esas palabras. Estaba atónita. Jimin vuelve aproximarse hasta quedar frente a ella una vez más. Ah Ra conecta sus ojos con los de él, y siente su corazón enloquecer y sus mejillas sonrojar-. Estoy enamorado de ti Ah Ra, y desde hace algunos años, pero nunca lograste darte cuenta de eso –coloca su mano en su mejilla y la acaricia. Sintiendo lo suave que era su piel-. Cuando me pregustaste como sabía que irías a la fiesta, era porque fui yo quien les pidió los chicos que las invitara. Al decirme Haneul para hablar contigo, me pareció una oportunidad perfecta para al fin decírtelo, aunque lamentablemente pasó aquello y no pude hacerlo. Y antes de que Haneul saliera de la casa para buscarte, le pedí su número y así ella pudiera decirme dónde encontrarte.

Ah Ra se mantuvo callada tan solo por poco minutos mientras trataba de asimilar cada palabra dicha por él e inconscientemente sonrió.

- Y-yo ta-tambien estoy ena-enamorada de t-ti Jimin –tartamudea causándole gran ternura a Jimin.

- Eso lo sé –sonríe ampliamente.

- ¿Qué? Pero...pero ¿Cómo?

- Bastaba con ver cómo reaccionabas cuando me acercaba, y quizás también escuche por accidente cuando Haneul y tú hablaban de mí una vez que pasé por su lado en la universidad y no se dieron cuenta. Fue ahí cuando lo supe de verdad.

- Ay que pena –baja su mirada avergonzada, escuchando a Jimin reír suavemente.

- Ah Ra...

- ¿Mmm? –levanta su vista encontrándose con el rostro de Jimin muy cerca del suyo. En cualquier momento iba desmayarse.

Jimin comienza agitar algo sobre sus cabezas y ella se percata de la rama de muérdago que él sostenía sobre ambos. Estaba tan perdida en sus hermosos ojos y labios, que no se dio cuenta cuando Jimin alzó su brazo para colocar el muérdago sobre ambos.

- En navidad, se dice que aquellos que estén bajo una rama de muérdago, deberán besarse –su corazón empezó agitarse de emoción por el atrevimiento de darle primero un pequeño beso en la punta de su nariz-. ¿Lo intentamos Ah Ra?

Con lágrimas acumuladas en sus ojos, Ah Ra asiente feliz. Jimin le sonríe con dulzura y de una manera muy tierna une sus labios con los de ella mientras rodeaba su cintura con sus brazos, pegándola más él. Sus corazones parecían competir por cual latía más rápido de alegría.

Sin duda alguna, para Park Ji Min y Seo Ah Ra esa fue la navidad más hermosa y mágica de todas.

Después de todo, los buenos deseos de navidad si se pueden cumplir.


FIN

Desde hace mucho tiempo he querido publicar algo así para estas fechas y al fin poder hacerlo me hace muy feliz 🤧😄

💚Espero hayan disfrutado de esta corta historia tanto como yo disfrute escribirla 💚


🎄¡Feliz Navidad!🎄

UN BESO BAJO EL MUÉRDAGO //Park Jimin//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora