✧ unique

965 103 41
                                    

minv os! / omegaverse.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sublimidad refrescante era como JiMin pensaba de aquellas iris de cristal ahogándose en su propia transparencia

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Sublimidad refrescante era como JiMin pensaba de aquellas iris de cristal ahogándose en su propia transparencia.

Unos ojos perfectamente grises y carentes de sentimientos lo señalaban con aptitud.

Fue así como JiMin consideró llamarse un tonto enamorado.

Amaba esos ojos tanto como a su vida. Cuatro constelaciones en cada tramo de gris vidrioso, JiMin no lograba dejar de suspirar cuando la mirada de TaeHyung se perdía en un punto muerto y así podía observarlo más claramente.

El sentimiento que surgía en su pecho era cálido y llenaba todo su cuerpo de una fulgurante alegría; eso era lo que TaeHyung provocaba en sus impapables pensamientos.

Un ordinario día de escuela tuvo que quedarse más de lo planeado, para su inesperada suerte, TaeHyung se encontraba allí, con la cabeza agachada, y su cara casi sobre el libro que se encontraba leyendo.

JiMin más ruborizado de lo que creía logró sentarse y poner una mínima parte de su atención en lo que debía escribir.

Dios, como quería voltear y perderse en la profundidad de los ojos de TaeHyung.

"Vamos, contrólate."

"Agh"

JiMin automáticamente buscó al culpable del suave quejido, encontrando un TaeHyung adolorido, tomando un par de pastillas lo suficientemente familiares como para darle una señal a JiMin.

El intenso aroma a limón flotó en el ambiente momentáneamente, hasta que se disipó, y finalmente JiMin supo que TaeHyung había dejado el salón por el crujido imperceptible de la puerta.

JiMin soltó el aire que contenía en sus pulmones. "Mierda" grito al aula vacía.

Unos días después, como JiMin había previsto, los ojos de cristal de TaeHyung se veían más atentos, un mirada alerta y un tenso ambiente junto al agridulce olor traerían consigo un fuerte impacto para JiMin.

¿Qué estaría pensando TaeHyung al poner la llave en el cerrojo? ¿Estaba completamente cuerdo?

JiMin se preguntaba.

Sólo estaban ellos dos después de la última clase, y un petrificado JiMin no había hecho nada más que ver a TaeHyung caminar de un lugar a otro en aquel espacio cerrado.

"No puedo más"

Escuchó por primera vez otra cosa que un murmullo.

"¿A qué te refieres?"

Estaba temblando. Los ojos de TaeHyung reflejaban su propio miedo como un espejo pulido.

"Bésame"

No, no había escuchado claramente. Porque llevaba un rato sin ser consciente de sus alrededores.

Se escurrió con movimientos veloces, cual parpadeo de luces, TaeHyung se hallaba sobre su regazo, ambos brazos detrás de su cabeza.

Con la lengua de TaeHyung enroscada a la suya, JiMin llevó las manos a los muslos del menor.

El sabor de su libida boca se resbalaba por sus labios. Sintió la dulce cereza en lo más profundo de sus entrañas. Así se debía sentir estar vivo, en realidad.

TaeHyung proporciona un mordisco en su esponjoso labio, luego un tirón suave. Estaba perdiendo las riendas de su mente de una manera tan sencilla que era doloroso.

"TaeHyung" soltó.

"JiMin..."

El silencio se instaló como un buen amigo. Las palpitaciones del corazón de JiMin brotaban de su pecho, TaeHyung podía sentirlo, y tal fue su impresión que ambas mejillas pronto se sumergían en nítido escarlata.

"Cuanto lo siento" susurró casi derramando sus lagrimales.

"No, TaeHyung..."

JiMin enfocó las iris escarchadas, luego los labios entonados de carmesí, y por último las manos de TaeHyung sobre su regazo.

No sabía que decir, así, fue que por puro instinto se tentó a unir nuevamente sus labios.

Y lo hizo.

Casi sabiendo que no se repetiría, no quiso volverlo fugaz, sino eterno.

Casi sabiendo que no se repetiría, no quiso volverlo fugaz, sino eterno

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

el crisantemo blanco es originario de corea, aunque actualmente es una de las plantas más preferidas por los japoneses

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

el crisantemo blanco es originario de corea, aunque actualmente es una de las plantas más preferidas por los japoneses. representa las flores de otoño y es un símbolo de placer y felicidad.

n/a: graciaas por
leer <3 © daeguhell

chrysanthème + minv.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora