1. El comienzo

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CAPÍTULO UNO

El cansancio abunda en mí. Bueno abunda en mi habitación, estoy con mis mejores amigos, Samantha y Alexander.
Aunque no les gusta que les diga sus nombres completos, me gusta molestarlos.

Alex es como un hermano para mí, el y yo nacimos el mismo día, misma hora, mismo hospital. Sam también nació en el mismo hospital, sólo que ella nació un día antes que nosotros. Por eso se cree la madura de nosotros tres, y que viene esto.
Pues, es la razón de su pelea de ahora.

-- Ya te lo dije Alexander, pero como eres inmaduro, no lo aceptas -- le dice Sam.

-- Que nacieras un día antes no significa que tu eres menos inmadura. De hecho yo soy el maduro de nosotros tres -- Se defiende Alex.

-- Sí claro, Amelia yo soy la más madura de los tres, verdad? -- Me pregunta Sam.

-- No cállate, soy yo, verdad Amelia? -- Dice Alex.

-- Ninguno de los dos son maduros, son unos bebés que pelean por gusto -- Acoto.

Después de terminar nuestra bella conversación, decidimos ordenar pizza. Charlamos un poco, y nos reímos mucho.

-- Creo que ya me vinieron a ver -- me dice Sam. Alex ya se había ido hace media hora, tenía cita médica -- Y al parecer me vino a ver él -- Es mi oportunidad para verlo.

Sam tiene un hermanastro, lo mejor es saber quién es. Resulta que la perfección de Liam es hermanastro de mi mejor amiga, ella siempre me dijo que era su mejor amigo. Resulta que su madre de enamoró de el padre de Liam, he hicieron click.

-- Ya Amelia, tienes esa cara de tonta, otra vez, disimula un poco -- me dice Sam y eso hace que salga de mi trance.

Sam se despide de mi y sale de mi casa.

Ahí esta él, se baja de su auto y se dirige hacia Sam -- Hola boba-- Saluda, puedo escuhar por el teléfono, si, estamos haciendo llamada para poder escuchar lo que se dicen.

-- Hola feo, llegaste muy temprano -- le dice Sam.

Reuno fuerzas, decido no salir y quedarme dentro de mi casa, observando por la ventana.

-- Y tu amiga? Igual no importa -- le dice Liam -- Lo que digas, muévete, tengo que dejarte en tu casa y luego ir a mi casa, cuesta mucho, no te quejes.

-- Quién te manda a andar de perro por ahí, cogiendo con cualquier chica que te encuentres -- Qué?! -- el castigo es tuyo no mío -- Sam se da vuelta y se da cuenta de lo que dijo, mira a través de la ventana y me pone cara triste.

-- Creo que ya nos vamos Liam -- se excusa Sam y corto la llamada.

Me entró nervios, subo por las escaleras y entro lo más rápido posible a mi habitación, y me tiro a la cama.

Piin, suena mi celular.

Mensaje de Sam el amor de mi vida.

-- Omg Mi vidaaa, lo siento, luego te explico. Tkm besitos -- solo suspiro, bloqueo mi celular y me quedo dormida, pensando en su lindo rostro.
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Liam en multimedia.

Gracias A Mi Mejor AmigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora