El Duro Camino a Casa

Parte IV : Al fin en casa

al despertar en la torre me di cuenta de que era hora de ponerme en marcha, debía volver a casa a ver si mi familia estaba bien, pero también me tomé un tiempo para tomar aire fresco y seguir con mi relato

pasada la noche, salimos del contenedor y lo que apreciamos nos asusto bastante, la calle estaba vacía y tranquila. nos precipitamos en salir y ponernos en marcha lo mas rápido posible
nos metimos aun edificio el cual se rumoraba, tenia una conexión con el exterior del pueblo, pudimos comprobar que era cierto pues luego de horas de buscar, dimos con un túnel el cual poseía un mapa que mostraba sus rutas, si seguiamos todo recto podiamos llegar a las afueras de la ciudad.

-que tan largo es este túnel?- preguntó Gael cansado

-lo suficiente como para llegar afuera de la ciudad-

respondí tomando agua de mi mochila, dandole un sorbo y pasandole la botella a Gael.
pasadas unas horas logramos llegar al fin del túnel, desgraciadamente la puerta estaba cerrada con un candado

-Le disparo?-

preguntó Gael

-sería raro que no lo hicieras, te gusta dispararle a todo-

respondí en broma.
el estruendo del disparó se amplificó en el túnel, y como si de un dispensador de agua se tratase, el túnel escupió infectados por todos lados.
Tardamos un poco en abrir la puerta, pues esta era muy pesada, para cuando lo hicimos yo salí primero y Gael comenzó a cerrar las puertas lo mas rapido que pudo

-a mi no me queda nada!-

dijo mientras cerraba las puertas

-a ti te queda mucho por delante, corre!-

gritó, y luego de que cerró las puertas pude oir la voz de Gael gritando

-no voy a ser uno de ustedes!-

luego oí un disparo y la voz de Gael desaparecío con el estruendo.
no pude hacer mas que correr y correr hasta llegar a otro pueblo, una vez ahí, entré a una casa vacía y me desplomé en el suelo, el cansancio y la perdida de un amigo tan bueno me habían golpeado en cuanto entré en calma, no pude pensarlo mucho y me dormí por el cansancio.
al despertar examine mis alrededores y comprobé que no había nada, pero creo que era nada lo que estaba buscando, ni yo lo sabía... me senté frente a una mesa y escribí todo lo anterior relatado


deja su lapicera en la torre, toma las hojas en las que escrbió todo lo que hizo y lo une todo con unos hilos... luego de mirar fijamente al suelo, lanza todo lo que escribío esperando que alguien lo lea

baja de la torre y como si de un milagro se tratase, toma un auto que pudo hacer arrancar con sus cables y se pone en marcha hacia su casa.
viajó durante dos semanas, parando exclusivamente para cargar su auto de gasolina.
luego de esas dos semanas llegó finalmente a su calle, donde al fondo. se alzaba su casa la cual aun parecía ser habitada. al entrar pudo contemplar su patio, donde ya no había nada mas que cesped muy descuidado.
abrió la puerta de su casa lentamente, su familía lo recibio apuntandole con armas, pero al ver que era el las bajaron y lo abrazaron, por fin se sentía vivo... tristemente esto no duró mucho. ya que cuando sus familiares se separaron de el, un infectado se lanzó sobre el, enterrando sus dientes en su brazo

-no... no, no, no... no puede ser-

no podía creer lo que estaba pasando.
su familia se alejó de el luego de dispararle al infectado, tristemente solo había una cosa que Alan podía hacer, y lo tenía muy claro

-estoy muy feliz de haber podido verlos una última vez, no se dan una idea de cuanto los quiero-

cerró la puerta y fué al patio, tomó su arma y la puso en su boca.
su familia vio  todo desde la ventana, con un nudo en la garganta, con la tristeza de no poder hacer nada al respecto.
Alan puso su dedo en el gatillo, dio una mirada hacia su familia, mirada la cual expresaba todo el amor que un ser podía tener dentro de si mismo, luego tiró del gatillo y su cuerpo cayó desplomado al suelo, dejando un charco de sangre que se extendía en el patio, así es como su lucha concluye, con un final tan horrible para alguien que peleó tanto contra la muerte para terminar así, este es el fin de su historia