chevy - sweet boi.
You got a smile so bright,
your pearls be making me so blind.10 años antes.
—Algo tarde, pero no podía arrastrarlos hasta aquí desde Liverpool. Esta es Isla, mi niña.Papá Kurt me empuja suavemente hacia los desconocidos, quienes me miran como él lo hacía cuando me trajo a este lugar, ese día con la señorita Candela: con sonrisas de no poder creer que sea real, como si fuera una aparición fantástica.
Volteo a ver a papá, buscando un apoyo, pero solo me hace una seña con la cabeza indicándome que me acerque a ellos, que no tema. Me es imposible no hacerlo.
—Así que sí es real.
Sus ojos sobre mí (que parecieran esperar algo) me hacen sentir incómoda, así que bajo la vista hacia mis zapatillas, parándome de puntillas y luego sobre mis talones. El cabello me cae por el rostro, pues ni papá ni yo sabemos hacer muchos peinados, aprovechando la cortina de mechones para mirar a través de este a las personas frente a mí.
Reconozco a uno. Es Jason, el papá de Barbara, esa niña rubia que es muy graciosa y dice muchos chistes extraños. Trabaja con papá y los otros dos. Uno de los demás está aquí pero no sé su nombre. Cuando están juntos hacen música, son geniales en eso.
El tío Jason se acerca y me abraza con una fuerza que me quita el aire por un segundo, para luego darme un beso en la frente.
Él me agrada, le tengo casi el mismo cariño que a papá Kurt.
—¿Cómo estás, Isla? —sonrío en forma de respuesta. Bien, quiero decir.
Inmediatamente, estiro el cuello para observar tras de él, buscando a mi amiga. Él parece darse cuenta de mi plan porque hace una mueca y niega con su cabeza- No, Barbie no vino conmigo. Está con su mami pero prometo traerla a jugar contigo apenas vuelva.
Quiero preguntar por qué el tío Jason y la mamá de Barbie no están juntos, pero sería de mala educación hacer esas preguntas. Yo tampoco vivo con mi mami, y a papá y a mí nos va muy bien.
-Además, hoy han venido otras personas a conocerte.
Papá Kurt me toma por los hombros, mientras el hombre desconocido se acerca basta mi. Me siento muy inquieta, pero mi doctora dice que me pasará durante un tiempo con los extraños. Trato de respirar de la forma en que me enseñó, tomando el aire por la nariz y luego botandolo por la boca. Me relajo un poco.
El hombre se agacha frente a mí y veo que su cara es muy parecida a la de papá. Hasta tiene esa barba que da cosquillas. Extiende una de sus gigantes manos hacia mí, para darme uno de los saludos formales. Tardo unos segundos pero la tomo, justo como papá me enseñó.
—Hola, bonita Isla. Soy Herman y estoy encantado de conocerte al fin —su sonrisa es muy grande así que le devuelvo la mejor que puedo formar, aunque la timidez me gana. Su forma de hablar también es diferente—. Eres muy hermosa, ¿no lo crees, Zephyr?
¿Zafi... qué?
—Tu hijo es lo suficientemente listo como para quedarse callado.
Ríe papá Kurt. ¿De quién están hablando? No entiendo nada. Escucho un gruñido de protesta (como el de los perros) detrás del señor, Herman, pero no logro ver a nadie.
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Más que las Palabras.
Teen FictionHay miles de formas para comunicarnos y conectar con las personas. El silencio es una de ellas, pero puede llegar a confundir. Isla no se definiría a sí misma como una persona tímida, una chica introvertida, pero si tiene una debilidad y es no pode...