AMOR NO ETERNO

Espera... ¿Qué?

-¡Hola! - La saludé.
-Hola, ya quería verte - Dijo Isabel.
-Siii, yo igual, ya estaba muriéndome de aburrimiento en mi salón - Dije soltando una pequeña carcajada.
-Ya tengo hambre, vamos a comer, ¿No?
-Si, yo igual ¡Vamos!

Ella me tomó del brazo mientra caminamos hacia la cafetería, así que procedí a tocar su mano con mi otra mano.

-¡Vaya! - Pensé - es posible que yo también le guste, no creo que así sea con todos sus amigos.

Mientras los dos comprábamos nuestra comida ella en la fila me dice:

-Oye, tengo algo que decirte, pero... No quiero que te molestes ni que por eso me dejes de hablar. - Mientras agacha su cabeza.
-¡Claro! No tendría que hacer nada de eso solo por algo que confías para contramelo, para eso estoy contigo. - Le dije mientras tomé suavemente su mano.

Observé que había una mesa vacía y nos dirigimos hacia ella.

-¿Qué es lo que quieres decirme? - Le pregunté.
-Mira... Me gusta una persona, creo que la conoces y va en tu salón - Dijo mientra cerraba los ojos con fuerza.
-Espera... ¿Qué? - Dije sorprendido y con el corazón casi partido en 1,000 pedazos.
-Si, pero... Dime, ¿Qué sientes?

No sabía que decir, por un momento me paralicé.

-Es raro que me digas eso a mi. - Le dije con un tono de tristeza.
-¿Por qué? Solo te estoy diciendo lo que siento, no sé si decirle a esa persona la verdad.
-Dile, pero no te tardes tanto, ¿Qué tal si a él ya le interesó alguien más?
-Tal vez - Dijo Isabel - pero no lo creo, porque solo anda con una persona en el recreo y el no se ve interesado en ella. - Dijo mientras bajaba la mirada.
-Entonces dile, tienes oportunidad.
-Bueno, si tu crees eso pues confío en ti.
-¡Claro! Eres muy linda y si no te hace caso pues se la parto. - Dije mientras me reía.
-No creo que puedas con él - Dice mientras suelta una carcajada. - mañana le diré, ya me convenciste ¡Gracias!
-De nada. - Dije mientras se me rompía de nuevo el corazón.

Sonó la campana de salida, ya eran la 1:10, y ella sale corriendo como si no hubiese un mañana y mientras yo mirándola y soltando pequeñas lágrimas y caminando normal, haciendome el fuerte.
Saliendo de la escuela me llega una llamada, me doy cuenta de que la que me está llamando es Isabel, no le contesté y en cuanto guardé mi celular llega Manuel corriendo.

-Vamos al parque. - Me dice.
-¿A qué? - Dije extrañado.
-A jugar Fútbol, vamos a ir todos los del salón, estará chido ¡Ve con nosotros!
-Está bien, primero le avisaré a mi mamá.
-Si, no te preocupes, yo te espero.

Le llamé a mi mamá pero no contesta, le llamé a mi papá y tampoco, le llamé a la oficina de ellos y me contestó una trabajadora.

-¿Hola?
-¿Si? ¿Está mi mamá?
-David, ¿Cómo estás? Si está, pero está algo ocupada, ¿Qué necesitas?
-Dile que no llegaré a comer, voy a estar en el parque que está cerca de mi escuela.
-Está bien, yo le digo, ¡Bye!

Manuel aún me esperaba, así que me dirigí con el hacía el parque, ¿Cuál fue mi sorpresa? Isabel estaba en el parque también y los supuestos compañeros no estaban ahí, así que me fuí hacia la cancha a esperarlos.

-Adiós amigo, ya llegaron por mi. - Dice Manuel mientras muestra una gran sonrisa como de burla.
-¿Qué? ¿Donde vas?

Se supone que íbamos a jugar Fútbol, así que me tenía que quedar ahí hasta que mis compañeros llegarán ó esperar mínimo una hora para poder llegar.
De lejos, observó que Isabel iba hacia mí, así que ignoré que ella venía y estaba a punto de moverme cuando...

-¿Hola? - Me dice Isabel.
-¿Qué pasa? No te había visto.
-Lo siento, es que me quedé pensando en lo que me dijiste en la escuela y...-Se queda callada.
-¿Y luego? ¿Si le vas a decir?
-¡Claro! Solo que... Hay una noticia extra.
-¿Si? ¿Me vas a decir?
-Si, mira - Me dice mientras me agarra la mano. - la cosa es que la persona que me gusta eres tú.

Espera... ¿QUÉ? me está besando, ¿Qué está pasando?
Isabel se separa de mí y baja la cabeza mientras se chupa los labios.
Yo sorprendido solo me toque los labios, le quería decir que ella también me gusta pero de repente ella sale corriendo, yo no sabia que estaba pasando, así que también me fuí. Después de eso no hablamos en toda la tarde, yo tenía pena de mandarle mensaje.