Un poco más

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El apodo cariñoso hizo que la sangre de Jimin hirviera. Tumbó a Jungkook en la cama y despojandolo de su pantalón rápidamente, se posicionó en frente de este. Tomando una bocanada de aire, se dedicó a chupar de manera rápida la polla gruesa y palpitante de Jungkook.

Jimin lo sacó de nuevo y con su lengua delineó toda su extensión, pasó luego a lamer el líquido nuevo que salió, Jungkook respiraba agitadamente disfrutando de las miles de sensaciones que estaba sintiendo con esa boca de Park.

-Sabes muy bien cariño- soltó Jimin con voz ronca

Jimin chupó extasiado un par de minutos antes de que Jeon se descargase dentro de su boca, una combinación de sabor agridulce que no era tan mala. Tragando toda su esencia se acercó al menor para seguir con su cometido y succionar los finos labios de este.

-Jungkookie, q-quiero-

El mencionado observó al  pequeño entre sus brazos y acariciando suavemente su cabello se dedicó a molestarlo un poco.

-Díme bebé ¿qué es lo que quieres?-

-S-solo quiero... saber cómo se siente, que estés dentro de mí- exclamó el pelinegro con ojos totalmente cegados por la lujuria

Jeon aún sorprendido por las palabras recién salidas de su Mochi, lo acomodó mejor en su regazo, se acercó al lóbulo de la oreja, chupó un poco de éste y en un suspiro susurró.

-Lo que deseé mi Mochi-

Primero con sus dedos delineo todo el cuerpo de Jimin, disfrutando de éste, enviando sensaciones placenteras al contrario. Sus manos masajeando aquellas apetitosas nalgas con las que había fantaseado. Un curioso dedo fue tanteando por encima del aro, metiendose un poco para luego ser sacado, hasta meterse de lleno, para luego hacer círculos con él.

Mientras, con su otra mano, comenzaba un vaivén lento alrededor de todo su miembro, esparciendo el líquido pre-seminal que salía de este.

-Mgnm m-más, oh, por favor Jungkook-

Escuchando las súplicas de su bebé, inserto dos de sus dedos en la estrecha entrada de Jimin, abriéndose paso a través del canal mientras se ganaba cumplidos sucios de parte de su chico. Sin esperar tanto metió un tercer dedo con más ahínco simulando pequeñas penetraciones.

El más bajo abría sus piernas para sentir mucho más adentro los dedos intrusos que su chico le estaba brindando. Jeon estaba deleitado viendo como las caderas de Jimin se movían de forma rítmica ayudando a que sus dedos llegasen al punto que lo volvía loco.

Sin aguantar tomó a Jimin para que quedara sentado en sus piernas, para tomar sus rosados y erectos pezones en su boca, sin dejar de sacar sus dedos.

-A-ahh, Jungkook, umm sigue así bebé, no pares-

Al terminar de jugar con ambos pezones, subio dejando besos y chupones, probando la exquisita y suave piel del azabache, para seguidamente empezar a amasar su culo que según Jeon, parecia hecho por los mismos dioses griegos.

-Basta kookie, es vergonzoso- las mejillas y labios aún con un fuerte color rojizo.

– Oh, por favor. ¿Has visto tu culo? Es imposible que deje mis manos quietas-

"ROOMMATES" KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora