Psycho - DaeJae

Capítulo #1

《OFICIAL》

Pov DaeHyun:

Hice sonar el silbato para que el tren partiera a la hora indicada.
No pasaron ni 30 segundos cuando varias personas volvieron a juntarse detrás de la línea amarilla. A veces no comprendía de dónde mierda salía tanta gente a diario, cada día eran rostros distintos, o quizá lejos de ser imposible resultaba sofocante poder identificar a todos.
Y eso que me ubicaba en una provincia de "baja población".
La verdad era cansado ver cómo se empujaban con tal de poder subir al tren, escuchar las peleas de mujeres y el llanto de los molestos bebés. Pero ni modo, ese era mi empleo luego de haber salido de prisión 3 meses atrás.
¿Que si podía cambiar de trabajo?
Claro, pero después de un año a condición del juez.

Entre la multitud vi llegar a ese tipo de pelo castaño oscuro, era al único que identificaba porque anteriormente mi mejor amigo, Nam, había tenido un percance con él.

Lo odiaba, ya que por culpa de ese chico metieron a la cárcel a mi amigo, pues lo culpó injustamente de haberlo asaltado y herirlo.
Nam, nunca había sido un santo y menos la víctima pero en aquel entonces mi amigo realmente era inocente y pagó injustamente.
Dos meses después de su encierro, lo mataron dentro de una gris y triste celda. Ni siquiera pude despedirme de él.
Por ello, guardaba mucho coraje hacia ese feo de abrigo viejo.

El idiota siempre llegaba corriendo y ese día no era la excepción.
Se veía muy agitado y no dejaba de mirar hacia las vías como si hacerlo fuese a apresurar el tren, sí qué era idiota.

Quería reír por la cara que tenía, estaba que se lo llevaba el demonio porque de seguro se le hacía tarde… Otra vez.

Al ver que el tren no llegaba, se acercó a mí:

—¿A qué hora sale el otro tren? —Su escasa amabilidad me provocaba asco.

No le sonreí como a cualquier persona, no podía.
—Primero, buenos días.

Formó una mueca y no cambió su mirada de engreído.
—Creo que está retrasado —dijo.

—Pues te ves más retrasado que yo —dije, buscando pelea.

Me echó una mirada aún más fría y seria de la que siempre tenía.
—Me refiero a que el tren viene retrasado.

—Yo sí me refería a ti.

—Pues yo dije "está retrasado" no "estás retrasado" porque jamás te hablaré de usted, no mereces mi respeto.

—Bien, entonces no tengo que responder a tu pregunta. 

—Es tu deber.

Le sonreí con burla solo para hacerlo enojar y en efecto; vi cómo apretó los dientes.

—¿De qué carajo te burlas?

—Mañana levántate más temprano y asunto arreglado.

—Eres muy molesto...

Sin aviso, de nuevo hice sonar el silbato pero esta vez prácticamente en su cara, se cubrió los oídos mientras me acuchillaba con esa mirada de superioridad. Era el rasgo que más detestaba de él.

—Ahí viene el tren, sube, estás retrasado y además llegarás tarde.

—Piérdete —me miró de arriba abajo —, oficial de cuarta.

Levanté un poco mi gorro.
—Buen día.

Subió en ese tren.

Lo odiaba pero me encantaba joderlo, era lo único que me entretenía en la estación.