8: vuelta de tuerca a quien te encuentras

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Pirque siempre fue un lugar especial para mi, es donde crecí, es mis raíces, es simplemente el lugar que me acogió. Hay calles y lugares que la verdad simplemente nos marcan como personas. Haber pasado al sauce con Dominic fue una sensación simplemente increíble. El sauce para mi generación es un lugar de reunión, de amistad y de cariño, compartir el sauce con alguien es que le das el permiso de entrar a tu nido...
Salimos del fundo donde se encontraba el sauce y comenzamos a caminar rumbo a un lugar para almorzar. Un lugar de lo más especial, al menos para mí, y para la mayoría de la gente del pueblo.
Salimos por el canal, la gente que pasaba en auto nos observaba, claramente los adultos no tenían idea de lo que significaba ir al sauce, o tal vez si, no lo se, deben pensar que es un lugar para drogarse... bueno, hablando en palabras frías eso es la verdad...
-¿dónde iremos?- pregunto Dominic mientras me tomaba la mano.
-mira, la verdad no sabia a donde llevarte, pero finalmente decido llevarte a un lugar especial- le dije mientras cruzamos corriendo la calle.
-¿y que lo hace especial?- pregunto sonriendo.
-ufff muchas cosas, pero principalmente ... digamos que si ni hubiera trabajado ahí no hubiese tenido el dinero para ir al lolla, y de no ser por eso no nos hubiésemos conocido-agrege sarisfecha.
-entonces si es especial-concluyo sonriente.
Mientras caminábamos ocurría lo cotidiano, bocinas. En Chile eso es normal, cuando una chica va caminando siempre le llegan bocinazos o la gente les grita cosas cochinas,pero cuando van con un hombre simplemente se limitan a "bocinas". Pero en Pirque existe algo distinto. Es un pueblo pequeño, y nos conocemos entre la gran mayoría de los habitantes, entonces muchas veces los bocinazos son saludos de gente que uno conoce.
-¡BUENA ANA!- grito un chico que paso en una camioneta, era un ex compañero de clases -¡buena buena!- le grité de vuelta mientras el auto se perdía en el más allá.
Esta cituacion se repitió unas dos veces. Dominic se limitaba a reír y a decir -eres popular aqui- pero no era eso, simplemente había pasado por varios colegio de la zona, entonces conocía a micha gente, pero eso no quería decir que me llevara bien con todos, a decir verdad habían muchos que no me soportaban, pero la verdad creo que eso ocurre en todos lados.
Pasamos por fuera de la viña, pero seguimos caminando en dirección a la cordillera. Hasta llegar a un súper mercado.
quieres entrar a nuestraplaza?- note que no entendía a lo que me refería, así que explique -en todas las comunas de Chile hay una "plaza" aquí también tenemos una, pero es una verdadera mierda. Este es el supermercado de Pirque, y la verdad nosotros consideramos que esta es nuestra plaza, porque uno siempre se topa con gente que conoce y porque nunca hay nada- Dominic comprendió a lo que me refería. Pero aún así pregunto.
-¿cómo no hay nada?- alzo una ceja.
-veras, en este supermercado de verdad nunca hay nada, hay veces en que no hay ni pan- sonreí sin mentir.
-necesito ver eso-dijo.
Entramos como niños, corriendo feliz mente, sin nunca soltarnos las manos. No teníamos límites, nisiquiera debíamos comprar algo, solo queríamos entrar, porque podíamos entrar.
Una vez dentro ocurrió lo prometido, me topé con micha mucha gente, Dominic estaba entusiasmado, decía que en el pueblo donde el vivía también era así, que la gente se conocía y se abrazaba con cariño cuando se reencontraba. Seguimos paseando por el pequeño lugar, viendo si necesitábamos algo, preguntándonos si conocíamos cierto producto, hablando de que sabores nos disgustaban, etc.
Nos encontramos con un profesor de mi último colegio, me saludó con un cariño infinito, yo también estuve muy feliz de verlo, pero no se pudo evitar lo inevitable, era un profesor joven, apenas unos siete años mayor que yo. Le presenté a Dominic, quien me soltó la mano para saludar al profesor, el cual notó ese pequeño movimiento y no puedo evitar preguntar con cara de pillo -mmm Anastasia Venegas ¿nuevo novio?- ¡quede negra! ¿Que mierda contestaba a eso? ¿No? ¿Si? Estamos en algo, no somos nada. Simplemente no sabía que responder y no quería cagarla, y sabía que la podía cagar muy bien cagada, así que me limité a responder -¡ay profe! ¡que sapo!- el profesor se río muy fuertemente, Dominic t yo nos miramos incomodos, luego nos despedimos y él se fue, pero Dominic no pudo evitar preguntar -¿qué es sapo? A lo que tuve que contestar: alguien "sapo" es alguien que se anda involucrado en los asuntos personales de la gente. Dominic río, lo entendió a la perfeccion -creo que le quedo muy bien el término- agrego con una sonrisa.
Seguimos paseando por ahí. Dominic se quedó leyendo una caja de dulces que encontró en un pasillo, no se que le abra encontrado de interesante, pero de seguro algo le llamo la atención. Yo por mi parte quería comer un chicle. Así que le dije -¿me esperas aquí un segundo? Quiero ir a buscar un chicle- el río y respondió -yes go-rei, mientras iba en busca de los chicles, me agradaba cuando me hablaba en su idioma natal, aunque fuese una frase corta o una palabrota, porque eso para mi significaba que estaba relajado, que no estaba pensando en que decir.
Mientras buscaba los chicles vi a una señora que realmente no soportó, la mamá de mi ex. Antes de haber sido la novia de mi ex, esa señora era un amor conmigo, pero cuando fuimos novios se dedicó a hacerme la vida imposible, decía que le había quitado a su hijo y no se cuantas bobadas más, realmente me hacía sentir mal, aunque en el fondo igual le tenía cariño, pero era desagradable, a demás me consta que ella se metió mucho en mi relación, y que finalmente uno de los muchos motivos que tuvo para fracasar fue eso. Pero en fin, simplemente me limité a saludarla de lejos con la mano, pero cuanto me vio volcó la cara bruscamente, como diciendo -metete tu saludo por donde te quepa- mi mamá siempre me enseñó que ni importa si una persona te hizo mal, o fue cruel contigo, uno siempre debe saludar, al menos por cortesía, y la verdad llevo eso tan metido dentro que me enfurece cuando alguien simplemente no me saluda o en este caso evita el saludo, pero eso no importaba, porque yo no sabia que estaba ocurriendo unos pasillos más allá...
-wena weon, disculpa me pasai uno de esos porfa-Dominic en un principio no le presto atención, no se dio cuanta de que le estaban hablando a él -¿compa?- Dominic se percató.
-lo siento, crei que le hablabas a alguien mas-dijo tomando los dulces que el otro chico le estaba pidiendo- aquí tienes- se los tendio.
-gracias compa -sonrio el muchacho, para luego agregar- oye weon, están la raja tus calcetines- Dominic sonrio.
-thanks- dijo observando al chico, para luego sacar otra caja de dulces y comenzar a leer su contenido, repitiendo el mismo procedimiento que con la caja anterior.
-¿gringo?- pregunto el muchacho sin ningún remordimiento. Dominic sonrio algo incómodo, no me gustaba dar esa clase de etiqueta a la gente.
-ingles- agrego él, sin despegar los ojos de la caja.
-buena... ¿y qué hací acá?- Dominic respondió de buena manera, no le parecía que el chico fuese desagradable, pero la verdad no tenía ninguna intención en entablar una conversación. Así que se limitó a responder.
-trabajo- Al parecer el muchacho no sabía que el era yungblud, y prefería dejarlo de esa manera, no quería entrar en una conversación sobre su carrera, y menos notando que el chico era de la clase de personas que critica y cuestiona todo.
-buenaa, ojalá te vaya bien- Dominic sonrio tomando otra caja de dulces- ¿cumpleaños?- pregunto el chico.
-no, nada de eso, son para una chica que estoy conociendo, pero la verdad no se cuales le gustan- agrego algo desanimado.
-a weon tranqui, yo te ayudo-dijo el chico tomando una barra de chocolate "trencito"-llevale estos, a todas las minas les encanta el trencito, a mi ex la volvían loca- agrego riendo, luego se rascón el pelo. Dominic observó la barra.
-no es algo... ¿simple?- pregunto.
-no bro, te juro que le va a encantar... osea igual depende para que la quieras, si la quieres como pa pedirle pololeo o algo así llévale una caja más Bonita- agrego. Dominic se quedó pensativo.
-¿pololeo?- pregunto.
pregunto.
-MMM puta bro, aquí pololiar es como ser novios ¿cachai?- Dominic asintió.
-okay, le llevaré esto entomces- dijo señalando la barra.
-¿entonces nada de pololeo?- pregunto el chico dándole una palmadita en el hombro. Dominic sonrio.
-no puedo, vuelvo en un par de días a mi país... ella está formando su carrera aquí, es exitosa, le va bien en la universidad y ahora tiene una banda... solo quiero hacerla sentir especial antes de irme, que entienda que no puedo estar con ella aunque quiera -agrego.
-¡ay culiao lindo! Pucha weon todo pasa por algo, y puta, por lo menos la mina tiene las cosas claras, pero igual que paja, mi ex también me dejó por eso... estaba muy metida en su carrera y no tenía ni tiempo pa mi, más encima estudiaba teatro, onda muy nada, yo estudiaba ingeniería civil y tenía tiempo para ella, igual na que ver-Dominic a pesar de todo comenzó a meterce en la conversación. No podía negar que estaba interesante. A demás tenía una gran objeción.
-espero no te moleste mi opinión, pero si estudiaba teatro es normal que no tuviera el tiempo, yo también estudié teatro en mi país y es una carrera pesada, que requiere muchas horas de ensayo, de esfuerzo mental y físico, sin mencionar que es una carrera colectiva, y que dependes de tu grupo para poder avanzar- agrego tratando de ser amable, el muchacho pensó un poco antes de responder.
-¿puta tan así? Mi ex me decía lo mismo, pero yo igual pensaba que le ponía mucho color con la wea- señaló el muchacho.
-no lo creo, las carreras artísticas incluyen mucho tiempo, trabajo y ensayo, tal vez realmente ella no tenía el tiempo necesario, o estaba muy colapsada... y bueno, viéndolo desde fuera, puede que este muy equivocado, pero si le decías que su carrera era muy "ni ahi" es normal que se haya molestado, los artistas somos muy pasionales... ma chica que estoy conociendo también estudia teatro, y creo que se sentiría realmente mal si le dijera algo así...- agrego Dominic, pero no en mal tono, si no todo lo contrario intentando hacer que el muchacho entendiera su punto de vista. Hubi un momento de silencio, la cara del muchacho cambió por completo, volvió a observar a Dominic de arriba hacia abajo y agregó.
dónde está tu mina?- a Dominic no le agrado mucho el término "tu mina", pero aún así respondió.
-esta aquí, solo que quería comprar unos chicles, debe estar buscándolos todavía, o quitar se encontró con alguien... quede muy impresionado de eso, conoce a mucha gente de por aqui- sonrio Dominic, pero luego se percató de que el rostro del muchacho se deformo completamente, por lo que agrego -¿estás bien?- sabia que acababa de conocer al chico, pero aún así sintió la necesidad de saber si necesitaba algo, pero contrario a lo que había pensado el muchacho comenzó a reír muy fuertemente, Dominic lo observaba realmente incomodo, hasta que dejó de reír, se secó una lágrima que le había salido por culpa de la risa y luego abrió riendo pregunto.
-¿estás con la Ana Venegas?- Dominic quedo negro ¿por qué de todos los nombres que podían existir había nombrado justo ese? Y más ensima con el apodo, quería decir que este chico la conocía bien.
-eh no estamos juntos, pero si, es ella la chica que te mencionaba- agrego nervioso.
-buena weon, te cuento algo loco, cachay que también es la mina de la que te estoy contando?- Dominic se deformo, sin saber como, con que casualidad, pero el muchacho que lo había ayudado a escoger que chocolate regalarme, con quien habían hablado, a quien Dominic confesó que quería tener algo conmigo, a pesar de no poder tenerlo, ese mismo muchacho, era simplemente mi ex... pero para Dominic no era simplemente mi ex, era la persona que me había dañado, la persona por la cual yo no había aceptado "hacerlo" con él, estaba parado frente a él, en un simple pasillo de un vacío supermercado...

Ten calma y... Rompete una piernaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora