don't call me angel | taekook

O1

Desde mucho tiempo los humanos han creído en el cielo, y apesar de que la historia cambia respecto a la generación siempre se cuenta la misma temática.

Ángeles y demonios.

Se dice que un Ángel es una persona pura, la cuál nunca ha cometido pecados y en fiel a las reglas que impone su Dios. Cada ser maravilloso poseía diferentes dones dependiendo a las características que tenía, su belleza era perfecta y aunque los humanos pensaban que conocían la perfección estaban completamente equivocados pues está solo la poseían los ángeles.

Un demonio aquel hijo caído de Dios, el cual por sus pecados y desobediencia tendría que culminar su vida en el infierno. Sus dones se asignaban dependiendo al pecado por el cual bajaron, su aspecto era casi irreal y eran tan inteligentes que podían hacer pecar en cuestión de segundos.

Su guerra nunca había tenido fin, mientras que los demonios odiaban y envidiaban a cada ángel por ser perfectos, ellos sentían lástima y pena por tener que detener a cada demonio de hacer pecar a su humano.

¿El amor existe en el cielo?, No y eso era algo que los demonios podían disfrutar a libertad. El amor era totalmente prohibido pues todos ellos eran hermanos, y por si fuera poco el amor llevaba consigo la lujuria, por lo tanto estaba completamente descartada. Sin embargo existía una vieja leyenda que contaba la historia de dos ángeles enamorados.

Aquellos hermanos no habían podido evitar caer ante sus encantos, su coquetos y pequeñas acciones se disfrutaban al máximo pues nadie tenía idea de lo que en verdad pasaba con ellos. Pero ya no pudieron, ellos querían probar sus dulces labios sin embargo cada que los juntaban ardían como una llama y eso terminó por desesperar a uno de ellos.

JK no podía aguantar el sufrimiento de no besar a su amado, así que le propuso tachar aquella marca y dejarse caer al bajo mundo para así vivir el amor verdadero.

Vante titubeó bastante pues era perder todo lo bueno que conocía, sin embargo asintió temeroso a la idea de su pareja.

Llegado el día JK con una espada tacho su marca que portaba en el antebrazo dejando caer su sangre pura, Vante agarro el arma pero el corte nunca llegó, pequeños querubines los acorralaron y jalaron de el para que no cometiera aquel pecado.

JK trato de tomar su mano sin embargo Vante lo aventó al bajo mundo, sus ojos se llenaron de lágrimas y se fue con los querubines a anunciar al nuevo angel caído.

La historia sirvió como advertencia para cualquier ángel que pensara en amar, pero algo que ellos ignoraban era que en el bajo mundo se encontraba aquel famoso angel caído por amor y no aguantaba la espera de hacer pagar al maldito ángel traidor.

—addy