Una Noche de Pasión con James Potter

Primera Cita.

Me había costado seguir con mi vida habitual, a cada momento los recuerdos de mi noche con James asaltaban mi mente y no me molestaba cuando me estaba por dormir, o aburrida mirando la ventana… Pero cuando me pasaba en clase, eso ya era demasiado. Me había sonrojado diez veces hasta el momento, y ya me estaba hartando. Salí de mi ultima clase del sábado por la mañana y me apoye contra una pared cerrando los ojos, me estaba volviendo loca…

¿Problemas de circulación? – Me pregunto una voz divertida, yo abrí los ojos con una sonrisa para encontrarme con dos ojos avellanas que me miraban divertido, juguetón, sexy…

No todos tenemos tú suerte – Le dije casi riendo, el me sonrió.

No creo que quieras mi suerte Lily, no he dejado de pensar en ti ni un segundo desde aquella anoche y créeme he intentado no pensarte, pero incluso siendo un animal tú imagen se me aparece de la nada – Yo sonreí.

Entonces no estamos muy diferente – Le dije, el me sonrió.

Entonces, mañana hay salida a Hogsmade – Me dijo, yo le sonreí.

Si, la hay.

¿A las cuatro? – Me pregunto - ¿Sala común? – Yo lo mire mientras sonreía

Claro – Le dije, - ¿Pero te molestaría si nos escabullimos ahora? Hay algo que extraño… - Le susurre al oído tocando su pecho con delicadeza, el se estremeció y me abrazo por la cintura.

Nos vemos en la Sala Común en cinco minutos – Me dijo y se fue por el pasillo, yo me reí y me dispuse a seguirlo cuando alguien se interpuso en mi camino.

¿De que va todo esto Lily? – Yo lo esquive

Déjame en paz Adam, tengo otro compromiso.

Lo esquive y seguí a James que ya se me había adelantado unos cuantos pasos, mi cuerpo lo llamaba, todo mi sistema lo necesitaba y gritaba su nombre… Se había vuelto más que una cosa de molestar a Adam, se había convertido en mi urgencia, en mi necesidad… Llegue a la sala común más rápido de lo que había imaginado. El estaba allí esperándome, no había nadie más.

Me dirigí hacia él y lo bese con fuerza, mientras él me iba llevando hacia su habitación, una vez dentro de esta, el hechizo la puerta, y nos desnudamos, rápidos, ágiles y llenos de deseo.

OoOoOoOoOoOoOoOoO

Abrí los ojos, ya era de noche, mire el reloj que había al lado de la cama de James, eran las diez de la noche. Sus compañeros roncaban extrañamente en las camas de al lado, nuestra cama tenía los doseles cerrados y nuestra ropa reposaba a los pies de la cama. Al parecer James había ordenado todo para que sus compañeros pudieran entrar… Mire hacia su cara y el dormía tranquilamente, rodeándome con sus brazos el cuerpo, haciéndome sentir segura, cómoda… Me preguntaba si tendría que irme, no quería hacerlo, pero las chicas se iban a poner muy nerviosas, pero es que estaba tan cómoda…

Entonces el se revolvió y despertó lentamente… me miro y yo le sonreí.

Hola – Me dijo, luego miro la hora – Es tarde, duerme – Me dijo.

Es que… las chicas – Dije yo molesta, el sonrió.

Sirius ya le dijo a Davina donde pasarías la noche, tranquila – Me susurro, entonces saco de entre el pilón de ropa mi camisón, entonces me di cuenta que el tenía unos boxers negros, MUY sexys. – Le dio esto para ti – Yo sonreí y me lo puse en un segundo, el sonrió y me extendió los brazos para que volviera a acunarme en él, y así lo hice… me sentía tan cómoda como si ese era el lugar al que yo pertenecía….

Me quede dormida en cuestión de segundos, y cuando me desperté el sol se colaba entre los huecos de las cortinas de la habitación… Me quede escuchando a mi alrededor, no oía los ronquidos de la noche anterior, por lo que debía ser muy tarde, mire al reloj de la mesa de luz y pude ver que era la una de la tarde, seguramente éramos los únicos en cama. Lo mire, el me miraba atento y curioso, sonriente, perfecto.