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Un sonido agudo hizo eco atraves de la casa, acusando que Xiao Jun se levantara del sillón para ir a revisar quien tocaba la puerta.
Abrió la puerta, revelando al castaño muchacho, con lentes de sol en el puente de su nariz.
—¿Yangyang?
El chico removió los lentes de su rostro. —Yup, ese soy yo.— Sonrió, abriéndose paso dentro de la casa.
Xiao Jun abrazó al muchacho más joven y lo envolvió en un abrazo breve pero apretado.
—¿Por qué estas aquí?— preguntó, causando que YangYang sonriera.
—Extraño todo lo de aquí.— El otro respondió. —Incluyéndote.
—¿Qué tal la casa de tu papá?
—Esta bien— Yangyang se encongió de hombros, arrojándose al sofá. —Quiero decir es grande y grandiosa y todo eso, pero enserio extraño mi antigua casa.
—Mmm.— Xiao Jun ladeo su cabeza, sentándose a un lado del chico.
—Escuche que algunas personas ya se mudaron a mi antigua casa.
—Si, conozco al chico que vive alli.
—¿Lo haces?— Yangyang elevó sus cejas. —¿Es lindo?
Xiao Jun se burló. —¿Es todo en lo que piensas?.
—¿Qué?—El otro puso mala cara.—He estado soltero por dieciocho, Tengo el derecho de preguntar si es lindo o no.
—Bueno,— Xiao Jun soltó un profundo suspiro. —Tiene una linda sonrisa
—Anotado.— Yangyang dijo, descansando la parte trasera de su cabeza sobre sus palmas. —¿Algo más?
—Es realmente energetico. Tambien le gusta el origami.
—¿Es del tipo artistico?— Yangyang observó.
Xiao Jun se encogio de hombros. —Solo lo llevo conociendo un mes.
—Eh, apuesto a que no es tan lindo como el cajero de heladeria—. El chico más joven se levantó del sofá, palmeando a su amigo en la espalda.
—Como sea, ¿Lo visitaste antes de llegar aquí?— Xiao Jun elevó una ceja curioso.
Yangyang rió. —Claro que lo hice. De todas formas, Tengo que irme, Tengo que estar donde mi mamá en diez minutos para ayudarla con algo. Pero la próxima vez que venga, Conoceré al chico del que me hablas.
Una pequeña risa salió de los labios de Xiao Jun. —Cuidate Yangyang.
Y con eso, Yangyang caminó hacia la puerta central, despidiéndose de su antiguo vecino.
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Xiao Jun se sentó en su cama, apoyado en la azul pared. Estaba tan metido en el libro que leía, que no noto la vibración de su celular a un lado de el.
Hasta que estuvo leyendo una línea en voz alta, la vibración lo interrumpió. Alcanzó su pequeño dispositivo, Sus ojos se postraron en la pantalla de bloqueo
Sus ojos se elevaron y vio las notificaciones de los textos de su mamá. Desbloqueo su celular, leyendo los dulces mensajes, sintiendo una calidez atraves de su cuerpo.
Pero se encontró con un mensaje, sintiendo su corazón hundirse en su estómago.
Su mamá dijo que su papá y ella volverían después de un viaje de negocios en un par de semanas, para el fin del descanso de verano. Xiao Jun debería volver a la universidad, significando que no los podría ver, debido al estilo de vida en el dormitorio.
Presiono sus labios en una línea recta, contestando los mensajes. Después que terminara, colocó su celular en el colchón, deslizándose por la pared para acostarse sobre su espalda.
Sus ojos trazaban los mini patrones que había en su techo hasta que los cerró, dejando escapar un largo suspiro.
De verdad, de verdad extrañaba a sus padres. Su cuidador ya no estaba aquí tampoco.
Pero el universo nunca estuvo de su lado.
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