El sábado por la noche había decidido que el domingo sería para mí, vería series, comería palomitas y dormiría hasta tarde, era un plan perfecto, Nick no me llamó y tampoco me escribió, casi había olvidado que aún no sabía que escondía, tal vez ir a conocer a sus hermanos no era una mala idea, tal vez podría averiguar algo, pero aún no habíamos decidido el día, tendría que presionar un poco, esa noche decidí que hablaría con él el lunes temprano. Casi no pude dormir, tenía un presentimiento sobre conocer a su familia, sabía que esto marcaría un antes y un después en mi vida.
El lunes la alarma me despertó a las 7 en punto, maldije en silencio por tener que apartarme de la comodidad de mi cama, me metí a la ducha y dejé que el agua me despabilara, tenía una sensación rara en el cuerpo que era casi imposible de ignorar, salí de la ducha envuelta en una toalla y con pelo chorreando, decidí usar un vestido corto para ese día, era un día hermoso y cálido.
Cuando salí de casa el sol brillaba en el cielo y el viento soplaba en mi cara, conduje hasta la casa de Blair, con Beautiful Soul de Jesse McCartney sonando a todo volumen, cuando llegué mi mejor amiga ya me estaba esperando.
-Hola-parecía preocupada.
-Hola-sabía que algo estaba pasando.- ¿Qué sucede?- no pude evitar preguntar, estaba empezando a preocuparme.
-Brian-no dijo nada más, de inmediato mi estómago se revolvió, ése tipo era de lo peor y lo odiaba por lo que le había hecho a Blair.
-¿Te hizo algo?-si ese idiota le había vuelto a hacer daño a mi amiga lo iba a pagar muy caro.
-No-parecía perdida en sus pensamientos.
-¿Estas bien?-Blair tenía la mirada fija en la calle y yo con el corazón a mil por hora, quería levantar una orden de restricción contra ese tipo.
-Me pidió perdón, me pidió que volviéramos a intentarlo, de hecho me lo suplicó-cómo se atrevía a pedir algo así después de lo que hizo.
-¿Y qué le respondiste?-una lagrima rodó por su mejilla, aún no me había mirado.
-Le dije que me dejara en paz, que no quería volver a verlo-me miró con los ojos llenos de lágrimas.-Lo que me hizo dejo una herida muy grande, no quiero verlo de nuevo Tarah, me aterra estar con él.-asentí con la cabeza y puse en marcha el auto.
Cuando llegamos al colegio Blair ya estaba mucho más tranquila, aunque no hablaba mucho, sabía que necesitaba tiempo para pensar.
Sentí el celular vibrar en mi mochila, era un mensaje de Nick.-Tengo que verte- rápidamente escribí una repuesta.
-¿Dónde?- su respuesta llegó unos segundos después.
-En la biblioteca-aún faltaban 20 minutos para que iniciara mi clase.
Cuando llegué a la biblioteca él ya estaba esperándome.
-Hola-sonrió.
-Hola-le devolví la sonrisa.- ¿Por qué estamos aquí?-pregunté con curiosidad.
-¿Alguna vez te has saltado las clases?-su pregunta me tomó por sorpresa.
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Oscuros secretos
RandomTarah Wytte a sus 17 años vive una vida normal como cualquier otra adolescente, pero hay algo que siempre la hará especial y peligrosa, el secreto que su familia ha guardado durante tantos años, se verá amenazado con la llegada de una nueva familia...