Bastones de Caramelo

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Pareja: ShakaxMu
Pedido de: @Mu_de_Aries

Navidad esa sola palabra le causaba gran alegría al lemuriano, pero a Shaka le pasaba lo contrario, no es que no le gustará festejar, lo que odiaba era que todos le prestaban más atención a poner decoraciones en sus templos más que su deber como caballeros.

Cómo siempre el sexto caballero estaba en su templo realizando sus meditaciones, desde que regresaron a la vida todo estaba bien, ya no era tan necesario que entrenarán en sus respectivas áreas  sin embargo el lo seguía haciendo como algunos caballeros.

Mu por su parte estaba en la cocina cocinando algunas galletas junto con su pequeño aprendiz.

—¿Invitará al señor Shaka a la cena?— pregunto el pequeño castaño.

—Si, aunque no se si él asista, pues ya sabes siempre está recluido en su templo aunque son momentos ya de paz— sonrió —Así que bueno, tengo un favor que pedirte—

—¿Cuál?—

—¡Quiero que vallas a dejarle esa canasta de bastones de caramelo y le des de mi parte la invitación!— expreso el lemuriano.

—Maestro creo que usted debería invitarlo, a mi solamente me dirá que si vendrá pero al final no lo hará, en cambio usted es su novio— sonrió tímidamente su alumno.

—Kiki, Shaka y yo...—

—No tiene que explicarme, comprendo muy bien que tanto Shaka como usted sienten algo especial—

—¡Así que lo sabes!— dijo Mu sacando la bandeja de galletas de gengibre.

—¡Claro!— respondió Kiki.

—Bien, solo guárdame el secreto, mi maestro Shion tal vez no lo tome tan bien que digamos, por eso Shaka y yo aún no le hemos dicho nada— sonrió nerviosamente.

Aquel día en que Shaka le declaró sus sentimientos ambos caballeros estaban en la sala gemela tomando té, era el cumpleaños del perteneciente al signo de virgo y por eso él fue el único en ir a su templo a felicitarlo.

¡Mu necesito decirte algo!— por primera vez en mucho tiempo había visto a Shaka reir nerviosamente.

—¡Claro puedes decirme!— contestó tomando asiento en frente del budista.

Mu yo... sabes muy bien que eres mi mejor amigo, ayer estuve platicando con Aioria hacerca de un tema, pero sabes cómo es él, así que creo que es más conveniente dejar de buscar una forma de decir lo que siento—

—Shaka... ¿Que es lo que tratas de decirme?—

En lugar de darle una respuesta con palabras, Shaka se acercó y tomó el rostro contrario con sus manos, mantuvo un poco de contacto visual y lo besó.
Mu estaba más que sorprendido, sus mejillas ardían y un color carmín aparecía en ellas, no se iba a mentir él mismo, pues Shaka le gustaba desde que eran unos niños.

—¡Shaka...!— cubrió su rostro con sus manos.

Mu lo que trato de decirte es que... ¡Me gustas!— le quitó las manos del rostro y le besó la mejilla —¿Quieres ser mi novio?—

Con un sonrojo horrible le dió un si que alegro a Shaka tanto que lo abrazó.

—Bien Kiki, puedes comer las galletas que quieras, me acabas de dar una gran idea— sonrió tomando la canasta de dulces.

Su aprendiz asintió con la cabeza, mientras él se ponía una bufanda de color verde.

No quería dar explicaciones del por que llevaba ese presente hasta Vigo, así que mejor decidió teletransportarse hasta la sexta casa.

Lo encontró como siempre, meditando. Una sonrisa se le formó en el rostro al mirarlo atentamente, interrumpió la meditación de la forma más romántica que pensó, le dió un corto beso en los labios.

—Mu... ¿Que haces aquí?— pregunto sorprendido —Alguien nos podría observar— abrió los ojos y volteó hacia varias direcciones.

—Vine a verte y puedes estar tranquilo me cercioré de que no hubiera nadie al rededor— hizo un puchero.

—¿Puedo saber a qué se debe tu visita?— le acarició la mejilla derecha.

—Vine a invitarte a cenar a mi templo, como sabes está noche se celebra la...—

—Lo sé, aunque no comprendo por qué tienen que decorar tanto sus templos solo para festejar estás fechas— tomo la mano de Mu entre las suyas.

—Shaka te invito por qué se que todos los años te la pasas encerrado en tu templo aunque no eras el único, Shura y Camus también eran tan antipáticos como tú, pero velos ahora Camus pasará la Navidad con Milo y Shura... Pues creo que tanto Aioros como Aioria lo invitaron a cenar en Sagitario— suspiro.

—Bien, creo que a ti no te puedo rechazar ni un vaso de agua— sonrió —¡Quiero proponerte algo!—

—Bien, ¿Dime de qué se trata?—

—Invita a Shion y a Dohko, está noche les diré lo que siento por ti, no te voy a negar que tenía miedo de que él patriarca me alejara de tí, pero ahora creo que los dos merecemos se felices, mostrarnos al mudo como lo que somos, quiero que todos se den cuenta que tú eres mi novio y que estén enterados de que estamos juntos— recorrió el flequillo lila de la frente de mi y depósito un suave beso protector sobre ella.

—¿Estás seguro?—

—Por supuesto, está noche le pediré permiso a tu maestro para ser feliz contigo aunque no lo necesite, por qué ya soy feliz contigo a mi lado—

—Esta bien— sonrió —Te traje algunos bastones de caramelo, se que no eres gran fan de las cosas dulces, pero ya los traje conmigo hasta aquí, así que ahora te los comes— rió un poco.

—Así que unos bastones de caramelo fueron tu gran pretexto para venir a invitarme a una cena preparada por ti— observó los caramelos de color rojo y blanco —Supongo que aparte de decirle a Shion sobre lo nuestro, también le diré, ¡Felíz navidad!—

—Si quieres sino solamente con que me lo digas a mi basta—

El pelilila se levantó del suelo con ayuda del rubio.

—Creo que para ti si será una muy felíz navidad— lo abrazó —Gracias por esperarme un poco de tiempo para tomar esta desición de decirle a tu maestro lo que realmente somos ahora— le besó la mejilla —También te doy las gracias por traerme estos bastones de caramelo son mis dulces favoritos—


¡Fin!









Espero te guste, aunque sea algo cortito (creo que así serán todos).
Los demás One-Shorts que me faltan los iré publicando durante la semana hasta el día 1ro. De Enero.

¡Felices fiestas!





Navidad en el Santuario (Yaoi Saint Seiya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora