|Capítulo 7|

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Castigo

No encontraban por ningún lado al pequeño Kook, los siete habían salido al centro comercial a dar un paseo, pero después de ver algunos peluches en la tienda, nadie encontró a Kook. Hasta que se oyó por los parlantes:

-Kim Seokjin... Kim Seokjin, por favor a administración.

Seguramente tenían a Kook, a quien le esperaba una buena dosis de nalgadas por tener a los 6 chicos desesperados por casi dos horas.

...

-Yo no fuiiii- Lloraba Kook.

Vamos a ver, las cámaras de seguridad demostraban que el pequeño salió de la tienda de peluches con uno en manos sin haberlo pagado, aunque el pequeño del grupo juraba y rejuraba que él no había sido; sin embargo, las cámaras decían lo contrario.

-Niño, ya deja de llorar, tus padres llegarán y arreglaré esto con ellos, a penas eres un crío.

-Noo, mis papis me creen a mi, yo no fui- El pequeño seguía llorando, le parecía tan injusto todo esto, en verdad él nunca haría eso, sus papis le enseñaron a que no se debe llevar las cosas sin pagar, él era buen bebé y nunca lo haría.

-Todas las pruebas te inculpan niño, y no deberías ni llorar, ya no eres un bebé.

Ahora si verá este chico, cuando sus papis lleguen le dirán que el sí es su bebé y que Kook no fue, así que solo siguió llorando hasta que vio como los 6 chicos entraban, todos estaban enojados, Kook solo esperaba que le creyeran.

-Papis, yo no fui- Él esperaba que sus papis lo consolaran, no supo cuánto tiempo estuvo ahí sin sus papis, pero se sintió una eternidad.

-Silencio JungKook, desapareciste casi dos horas, y sabe Dios que hiciste, no quiero que emitas un solo sonido hasta llegar a casa, ¿entiendes? - Nam habló, se lo veía tan enojado, nunca lo había visto así, Kook optó por intentar regular su respiración, seguro podría explicarles en casa.

-Kim Seokjin, JungKook me dijo que usted era su padre- El señor habló serio mientras buscaba algo en su computadora, seguramente los videos que lo "Inculpaban".

-Sí, lo somos- Dijo un poco preocupado, ¿qué habrá hecho su niño?

El señor los vio extraño, aunque ya estaban acostumbrados a esas miradas.

-Bien, su hijo salió con un peluche de la tienda de juguetes y la alarma sonó, esto quiere decir que JungKook robó el peluche.

La mirada que Nam dirigió al pequeño fue de furia y decepción, Kook sólo pudo llorar, él no había sido, él era el bebé bueno de sus papis.

-Bien, pagaremos el muñeco, solo díganos cuanto es y nos llevaremos a JungKook- Nam regresó la vista al gerente, aun con el ceño fruncido, quería llegar cuanto antes y darle una lección a su bebé.

-Bien, ahora nos vamos. JungKook, levántate ahora- Nam pagó el peluche y alzó a Kook del brazo derecho sin mucha delicadeza que digamos. El pequeño solo siguió llorando, no le gustaba caminar, se tambaleaba mucho y que Nam lo haya jalado tan bruscamente casi hace que se caiga.

-Nam, hazlo despacio, ya llegaremos a casa para el castigo, casi haces que se caiga- Le reprendió Jimin mientras veía al pequeño con pena, lo que le esperaba, sería afortunado si solo usaba la mano, lo cual no era muy convincente.

Nam lo llevó al carro, lo puso en la silla rápidamente y ató los cinturones un poco apretado, así evitaría que escape con los demás.

-Papi, yo no fui, créeme- Kook se limpiaba los ojitos pero ni eso ablandó el corazón de Nam.

Kookie en ageplayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora